Tr¨¢nsfugas al poder
El aval de los socialistas al alcalde expulsado de Benidorm estimula esta pr¨¢ctica fraudulenta
Los socialistas de Valencia parecen dispuestos a consumar la ruptura del Pacto Antitransfuguismo que el PSOE firm¨® hace cuatro a?os con el resto de las fuerzas pol¨ªticas del arco parlamentario. El alcalde tr¨¢nsfuga de Benidorm, Agust¨ªn Navarro, ha sido propuesto por los socialistas como candidato a la alcald¨ªa, ahora con la etiqueta de independiente. Le ha dado su aval Jorge Alarte, l¨ªder del partido en Valencia, el mismo que hace un a?o defendi¨® en¨¦rgicamente el Pacto Antitransfuguismo y promovi¨® la expulsi¨®n de Navarro y los concejales que le auparon a la alcald¨ªa benidormense (entre ellos la madre de la secretaria de Organizaci¨®n del PSOE, Leire Paj¨ªn).
Este movimiento es de una enorme gravedad. Todos los partidos pol¨ªticos han sido v¨ªctimas alguna vez del transfuguismo. De ah¨ª el acuerdo alcanzado entre ellos en 1998, que se convirti¨® en un m¨¢s solemne Pacto Antitransfuguismo en 2006. Pacto no menos solemnemente ignorado luego, destacando en ello el PP, tanto por el n¨²mero de casos como por el surtido de coartadas empleadas para justificarlo. Precedentes que en ning¨²n caso podr¨ªan justificar la actitud de los socialistas en Benidorm con el amparo de m¨¢s altas instancias.
Ante las cr¨ªticas por su cambio de actitud, Jorge Alarte ha reclamado la destituci¨®n de los alcaldes populares de otros municipios de la provincia que, como Navarro, alcanzaron el puesto con votos tr¨¢nsfugas. Pero condicionar la decencia propia a la de los dem¨¢s vac¨ªa de sentido el discurso de los socialistas valencianos de que el transfuguismo, adem¨¢s de ser un fraude a los electores, esconde corrupci¨®n urban¨ªstica. Si los 12 concejales que auparon a la alcald¨ªa a Navarro hace un a?o merecieron la expulsi¨®n por vulnerar el Pacto Antitransfuguismo, ?no la merecen ahora los que avalan retrospectivamente aquella decisi¨®n?
Pero el caso de Benidorm est¨¢ cargado de simbolismo y su onda expansiva sobrepasa los l¨ªmites de la Comunidad Valenciana. En este enclave tur¨ªstico de 70.000 habitantes, especulaci¨®n urban¨ªstica y transfuguismo tienen una larga tradici¨®n. A comienzos de los a?os noventa, el futuro dirigente popular Eduardo Zaplana inici¨® su carrera alcanzando la alcald¨ªa de la localidad gracias a un voto tr¨¢nsfuga.
El episodio de hace un a?o ya salpic¨® a la secretaria de Organizaci¨®n del PSOE, Leire Paj¨ªn. Sus enemigos la acusaron entonces de haber salvado la cara con unas expulsiones cuyo alcance real se ver¨ªa cuando llegaran las elecciones. La sospecha de que los 12 ser¨ªan readmitidos en las listas no se ha verificado, pero el indulto impl¨ªcito concedido a quien los encabezaba al designarle como candidato indica que aquella indignaci¨®n era provisional. Si el PSOE imita lo que considera inaceptable en el PP, ambos partidos no solo renuncian a lo que pactaron sino que dejan el camino abierto para que los tr¨¢nsfugas escalen con impunidad el camino que lleva al poder.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.