Phoenix vuelve al 'show' de Letterman para disculparse

Mucha gracia no parece haberle hecho al presentador David Letterman haber formado parte del enga?o orquestado por el actor Joaquin Phoenix y el director de cine -y tambi¨¦n cu?ado del anterior- Casey Affleck para promocionar la pel¨ªcula Todav¨ªa sigo aqu¨ª. Aunque, como es un profesional, Letterman puso al mal tiempo buena cara y se lo tom¨® con sentido del humor, reclamando de Phoenix un mill¨®n de d¨®lares por la publicidad que le hab¨ªa reportado. "Solo hemos ganado 75 centavos con la pel¨ªcula", apunt¨® el actor. "Ese no es mi problema", dijo Letterman.

Phoenix era consciente de la papeleta en la que involucr¨® a Letterman y el mi¨¦rcoles por la noche le pidi¨® disculpas en su programa, The late show with David Letterman: "Lo siento", atin¨® a decir t¨ªmido y acongojado en el sill¨®n de los invitados, un Phoenix muy distinto al que hace m¨¢s de a?o y medio asombr¨® al mundo anunciando su retiro a los 35 a?os y pegando el chicle que mascaba indolente bajo la mesa del presentador.

"Os hab¨¦is re¨ªdo bien de m¨ª", dijo el presentador al saber que fue una farsa

Pero result¨® ser que el divorcio de Phoenix de Hollywood para cortejar el mundo musical convirti¨¦ndose en un cantante de hip-hop era la invenci¨®n de un personaje para el documental Todav¨ªa sigo aqu¨ª, total fracaso en las pantallas estadounidenses y que el propio actor reconoci¨® que parec¨ªa durar "siete horas" en lugar de 90 minutos.

"Has entrevistado a mucha, mucha gente y asum¨ª que sabr¨ªas diferenciar entre un personaje y una persona real...", quiso justificarse Phoenix que corrigi¨® casi inmediatamente al darse cuenta de que esa frase m¨¢s que una disculpa era ahondar en el hecho de que el presentador se crey¨® a pies juntillas el cambio de vida de Phoenix y no fue capaz de ver el montaje. "Pido disculpas y espero no haberte ofendido de ninguna manera", suplic¨® un Phoenix visiblemente arrepentido, que parec¨ªa esperar y aceptar que en cualquier momento Letterman le echara una buena reprimenda.

Del Phoenix monos¨ªlabico, titubeante, despeinado y con una barba propia de un hombre del Neandertal no quedaba ni rastro. Su afeitado no pod¨ªa ser m¨¢s apurado y su sonrisa y timidez m¨¢s aut¨¦ntica. El actor era el vivo retrato del ni?o que sabe que ha roto algo, en este caso, la confianza y quiz¨¢ parte del prestigio de uno de los humoristas m¨¢s cotizados de Estados Unidos. "Os hab¨¦is re¨ªdo bien de m¨ª", dijo Letterman. Aunque el presentador reconoci¨® que entrevistar en febrero de 2009 a Phoenix tuvo su gracia. "Parec¨ªa que te hab¨ªas ca¨ªdo y golpeado la cabeza con la ba?era". "Me diste una buena paliza", a?adi¨® Phoenix. "S¨ª, fue como practicar con un bate de b¨¦isbol y darle a todas las bolas", se consol¨® el presentador.