?Todos a la huelga?
Es una inc¨®gnita lo que pasar¨¢ con la huelga general del 29, pero la gente est¨¢ muy dividida al respecto. En la calle y en los bares se oye de todo, pero da la impresi¨®n de que gran cantidad de ciudadanos, tanto de izquierdas como de derechas, duda de la oportunidad de la misma y del modo en que se ha convocado. Otros se callan, por ejemplo el sector del taxi de Madrid, que esta semana celebr¨® en el Palacio de Congresos una asamblea de la Gremial y ni siquiera se habl¨® de la cuesti¨®n. La Asociaci¨®n de Futbolistas Espa?oles (AFE), en cambio, ha dado libertad a sus miembros para que hagan lo que quieran. Los futbolistas han hecho cuatro huelgas en 31 a?os (1979, 1981, 1982 y 1984). Es incierto que este a?o, el a?o del Mundial, los flamantes h¨¦roes de Sud¨¢frica se sumen a la convocatoria. O no. Vaya usted a saber.
La presidenta de la Comunidad, como de costumbre, ha a?adido pimienta gorda a la cuesti¨®n exigiendo unos servicios m¨ªnimos mucho m¨¢s extensos que los acordados por el Gobierno y los sindicatos. A eso se le llama echar m¨¢s le?a al fuego y a la conflictividad por motivos estrictamente pol¨ªticos. Es decir, que en Madrid va a haber m¨¢s problemas que en el resto de la naci¨®n. Si a esto a?adimos que algunos l¨ªderes animan a los abuelos de toda Espa?a a dejar ese d¨ªa a los nietos solos en casa para acudir a la protesta, la cosa se complica m¨¢s. Mal lo tienen que ver los convocantes para llegar a estos extremos. Lo cierto es que esta huelga general es la menos clamorosa de cuantas ha habido. Huelga decirlo.
El 29 de septiembre puede que se oscurezca a¨²n m¨¢s la situaci¨®n econ¨®mica y social del pa¨ªs. El horno no est¨¢ para bollos. Pero hay algunos, de quienes no se pone en duda su buena voluntad, que ponen en grave riesgo a los propios trabajadores.
?Va a ganar alguien algo con esta huelga? Enseguida se ver¨¢.
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