Marta Minuj¨ªn, la artista fil¨®sofa
La creadora argentina rescata una obra de 1968 sobre comportamientos sociales
Tiene tanto que decir que habla a velocidad de v¨¦rtigo. Podr¨ªa haber vivido cien vidas. En su biograf¨ªa hay material para rellenarlas. Ella es Marta Minuj¨ªn, polifac¨¦tica artista argentina (Buenos Aires, 1943) que inaugura hoy una muestra en el Centro Andaluz de Arte Contempor¨¢neo (CAAC) de Sevilla, y su experiencia art¨ªstico-vital es tan amplia que abruma. Quem¨® sus obras en las calles de Par¨ªs antes de que nadie so?ara con lanzar adoquines (La destrucci¨®n, 1963), introdujo el happening en Am¨¦rica Latina, fue hippy en Central Park junto a Jimi Hendrix y Janis Joplin, le pag¨® la deuda exterior argentina a Andy Warhol con mazorcas de ma¨ªz, construy¨® un Parten¨®n con 30.000 libros prohibidos por los militares en Buenos Aires... Marta Minuj¨ªn presenta ahora Minucodes, su primera individual en Espa?a, una reposici¨®n de un happening que realiz¨® en Nueva York en 1968.
El Centro Andaluz de Arte Contempor¨¢neo ofrece su primera muestra en Espa?a
En 1983, recre¨® el Parten¨®n con libros prohibidos por la Junta Militar
"Minucodes es un estudio que revela c¨®mo la gente se comporta de forma distinta ante una misma situaci¨®n. Fue un experimento tan revolucionario entonces que me han pedido que lo repita en el mismo lugar en el que lo grabamos en mayo de 1968, en el Center for Inter-American Relations, en Park Avenue", explicaba ayer Marta Minuj¨ªn mientras supervisaba los ¨²ltimos detalles del montaje de la muestra que podr¨¢ verse en el CAAC hasta el 6 de febrero de 2011.
La artista, que a sus 68 a?os derrocha energ¨ªa y no ha perdido un ¨¢pice del entusiasmo que la llev¨® al arte con tan solo 14 a?os, convoc¨® a cuatro grupos homog¨¦neos de 80 personas cada uno a trav¨¦s de anuncios en prensa y los invit¨® a participar en un c¨®ctel que grab¨® con seis c¨¢maras fijas de 16 mil¨ªmetros.
"Les hice rellenar un cuestionario porque quer¨ªa que fueran gente que solo se interesa por una cosa en concreto e ignora todo lo dem¨¢s. Reun¨ª a los m¨¢s fan¨¢ticos de la moda, de la econom¨ªa, del arte y de la pol¨ªtica. Es curioso, pero en todos los casos se olvidaron de las c¨¢maras al poco tiempo y empezaron a actuar de forma natural", coment¨® ayer Minuj¨ªn, quien ha creado una pieza de cuatro minutos de duraci¨®n -un minuto de cada una de las grabaciones- que se proyecta en todas las paredes de una habitaci¨®n, de forma que el espectador tiene la sensaci¨®n de ser un invitado m¨¢s a la fiesta.
"Los del mundo de la moda son m¨¢s estereotipados y se mueven de forma parecida, los economistas casi no se mueven y los pol¨ªticos se mueven todos iguales", dice Minuj¨ªn a modo de resumen. "Mis favoritos son los artistas. Son los m¨¢s libres. Estaban convocados 80 y se colaron unos 250, se movieron para todos los lados y alguien, incluso, se desnud¨®. Eran los a?os hippies y para nosotros estar desnudos era como estar vestidos", aclara la artista, quien pas¨® una d¨¦cada en Nueva York tras conseguir la beca Guggenheim. "Fui pop y ahora soy transpop, transconceptual. Trabajo con la desmitificaci¨®n de los mitos populares. Por eso muchas de mis obras acaban tumbadas. Mis proyectos son acostar a los mitos. El artista, en realidad, es un fil¨®sofo que capta las ondas de los dem¨¢s y las traduce a un lenguaje art¨ªstico", explica la autora de obras como Parten¨®n de libros, una r¨¦plica del monumento ateniense que construy¨® en 1983 en pleno centro de Buenos Aires con 30.000 libros que hab¨ªan estado prohibidos y que, como casi todas sus obras, acab¨® tumbando y regalando los libros al p¨²blico.
Marta Minuj¨ªn, que a pesar de su apellido ruso asegura orgullosa que la fantas¨ªa le viene de su bisabuela andaluza, siempre ha querido influir en su pa¨ªs; en una sociedad "multifuncional y multifac¨¦tica" que produce individuos fragmentados, al igual que ella ha hecho con famosas esculturas griegas y romanas. "Cada uno de nosotros es muchos a la vez. Es como una esquizofrenia arm¨®nica", argumenta.
El amplio curr¨ªculo de esta artista, quien tendr¨¢ una gran retrospectiva en el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba) el pr¨®ximo noviembre, est¨¢ lleno de gestos como el de su obra El pago de la deuda externa argentina con el oro latinoamericano (1985) en el que ella aparece d¨¢ndole mazorcas de ma¨ªz (choclos) a Andy Warhol.
"Llev¨¦ todos los choclos, hice una monta?a, pusimos dos sillas y nos sacamos 10 fotos. As¨ª la deuda externa quedaba paga. Pensando que yo era la reina del pop por estos lados y ¨¦l, el rey del pop por all¨¢, ten¨ªa sentido que sald¨¢ramos la deuda", aclara esta incansable creadora.
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