De la Pirelli al World Trade Center

Poco antes de la ocho de la ma?ana, cinco j¨®venes engominados y enfundados en camisas blancas con corbatas a rayas contemplan con cara de estupefacci¨®n la llegada del piquete. Seguramente algo tiene que ver que est¨¢n en su oficina, a una altura considerable, en lo que se llama World Trade Center Almeda Park, en Cornell¨¤, que es ejemplo de la evoluci¨®n industrial de Catalu?a.

En terrenos que ahora emplean a m¨¢s de 6.000 oficinistas y profesionales liberales de conocidas empresas, funcion¨® durante durante a?os la empresa Pirelli, que emple¨® a m¨¢s de 1.000 empleados cuando el Baix Llobregat rebosaba de f¨¢bricas y era una referencia del movimiento obrero.

Ahora los tiempos son otros y ya quedan pocas industrias en el barrio de la Almeda. Los piquetes apenas pueden disuadir de entrar en el aparcamiento a algunos empleados en veh¨ªculos de de alta gama. "Con este carro tambi¨¦n vengo yo a trabajar", "vamos, campe¨®n, que te van a dar un premio por currar hoy", les espetan a "los esquiroles", ante la insistencia de dos mossos d'esquadra para que permitan el paso. La frustraci¨®n se torna acci¨®n, los sindicalistas fuerzan la situaci¨®n y se sientan. El vigilante de seguridad les responde echando el cierre del aparcamiento entre v¨ªtores.

El paro fue total en la Seat de Martorell, fiel a su tradici¨®n sindical

Paco Garc¨ªa recuerda que presidi¨® siete a?os el comit¨¦ de Pirelli y Antonio Barbastro evoca que negoci¨® el ¨²ltimo convenio. "Los movimientos del capital han dejado a Cornell¨¤ sin industrias. Si solo servimos para atraer oficinas y no invertimos en valor a?adido, vamos fatal", se lamentan.

El aparcamiento se abre al poco de alejarse el piquete en direcci¨®n a El Corte Ingl¨¦s. Quieren evitar, y lo consiguen, que entre el personal antes de su horario habitual siguiendo el consejo de la direcci¨®n. Alguna dependienta lo intenta y no puede reprimir las l¨¢grimas porque quiere trabajar. Las mujeres son minor¨ªa en el piquete, pero ya pueden verse dos sindicalistas de origen isl¨¢mico con velo. Una afiliada a CC OO recuerda que la compa?era que tiene al lado, de la asesor¨ªa jur¨ªdica, tiene a su hijo en la UCI y est¨¢ siguiendo activamente la huelga. La direcci¨®n de El Corte Ingl¨¦s tambi¨¦n decide que es lo mejor, porque Cornell¨¤ no es Madrid y la polic¨ªa no ha tomado la zona. Los sindicalistas destacar¨¢n despu¨¦s la exquisitez de los Mossos.

El piquete lo forman ya m¨¢s de 300 personas, que acuden al centro comercial Esplau, junto al campo del Espanyol. Los Mossos les anuncian que habr¨¢ cierre, una comisi¨®n lo verifica y la comitiva emprende rumbo al centro Eroski, previa concentraci¨®n ante el Ayuntamiento de Cornell¨¤.

En el norte de la comarca hay cosas que permanecen con los a?os, como el seguimiento un¨¢nime de una huelga general en la Seat de Martorell, con 9.000 empleados y una afiliaci¨®n superior al 80%. CC OO, UGT y CGT est¨¢n a la gre?a desde hace a?os, pero toca unidad por un d¨ªa y nadie la quiebra. La cadena de producci¨®n se para 24 horas y deja de producir unos 1.700 veh¨ªculos. Los delegados reconocen que el futuro de la factor¨ªa sigue siendo incierto, pero conf¨ªan en la llegada del Q-3 el pr¨®ximo a?o para revitalizarla, porque se prev¨¦n fabricar m¨¢s de 100.000 unidades al a?o. La industria auxiliar de la zona tambi¨¦n para por completo y espera beneficiarse del nuevo modelo.

En el pol¨ªgono petroqu¨ªmico de Tarragona, el impacto de la huelga fue absoluto, seg¨²n los sindicatos. La patronal fij¨® el seguimiento en el 60%. En el Vall¨¨s, los pol¨ªgonos industriales presentaban ayer un aspecto des¨¦rtico, m¨¢s propio de un d¨ªa festivo. Como en el Baix Llobregat, los sindicatos calcularon que el 80% de la industria secund¨® el paro. Los piquetes actuaron en el centro log¨ªstico del CIM Vall¨¨s de Santa Perp¨¨tua de Mogoda, adonde solo se acercaron un centenar de camiones de los 3.000 que lo hacen a diario.

En la cl¨¢sica guerra de cifras, CC OO y UGT hablaron ayer de un ¨¦xito total de la jornada de huelga en Girona, tambi¨¦n con m¨¢s del 80% de seguimiento en la industria, que en el caso de las compa?¨ªas qu¨ªmicas y agroalimentarias elevaron por encima del 90%. La patronal de peque?as y medianas empresas, PIMEC, cifr¨® el seguimiento en el 8,1%.

Con informaci¨®n de Ferran Balsells, Rebeca Carranco e Ivanna Vallesp¨ªn.