Los violentos enturbian la huelga

Por primera vez en muchas semanas, Catalu?a dej¨® ayer de vivir sumergida en el zumbido de la precampa?a electoral, con los dos principales partidos, PSC y CiU, instalados durante 24 horas en un deliberado perfil bajo -y los socios minoritarios del tripartito, ERC e ICV-EUiA, a su aire, en las calles- debido a la huelga general. La protesta par¨®, sobre todo, f¨¢bricas y transportes en consonancia con los servicios m¨ªnimos pactados, y por la tarde sac¨® al centro de Barcelona a 75.000 manifestantes, seg¨²n c¨¢lculos de este diario, en protesta pac¨ªfica contra la reforma laboral de Zapatero. La movilizaci¨®n, sin embargo, se calent¨® hasta la violencia en varios momentos del d¨ªa por los actos vand¨¢licos de grupos antisistema. Dichos brotes violentos duraron desde el mediod¨ªa sin parar hasta la noche, como hac¨ªa tiempo que no se ve¨ªa en Barcelona, desde la ¨¦poca de las contracumbres, en 2001 y 2003.

La batalla campal dej¨® el coraz¨®n de la ciudad convertido en un paisaje de contenedores ardiendo, un coche de la Guardia Urbana en llamas, cristales de tiendas rotos y 57 heridos leves (28 mossos). De ella se desmarcaron los sindicatos CC OO, UGT y USOC. La CGT justific¨® la actuaci¨®n de los descontrolados al considerarla la respuesta a un supuesto acoso policial. Seg¨²n los Mossos d'Esquadra, en total fueron detenidas 59 personas (42 en Barcelona), la mayor¨ªa de ellas procedentes de pa¨ªses no europeos. Tres de los arrestados son menores.

Los primeros incidentes se produjeron a mediod¨ªa en la zona de la plaza de la Universitat, donde un grupo antisistema quem¨® un coche de la Guardia Urbana mientras mobiliario urbano y de las terrazas de los bares saltaba por los aires. A partir de las dos de la tarde, la bronca se traslad¨® al entorno de la plaza de Catalunya, donde la polic¨ªa desaloj¨® la antigua sede de Banesto, ocupada desde el s¨¢bado por colectivos alternativos. Seg¨²n los mossos, se intervino porque los okupas estaban arrojando objetos a las fuerzas de seguridad. El desalojo se sald¨® con 17 personas identificadas y un detenido, con antecedentes. Los accesos al edificio fueron tapiados. Varias unidades m¨®viles de COM Radio, RAC 1, Punto Radio, TV3 y La Sexta desplazadas al centro para retransmitir la manifestaci¨®n fueron atacadas y gravemente da?adas. El Colegio de Periodistas de Catalu?a conden¨® los hechos "en¨¦rgicamente".

La violencia estall¨® de nuevo y de forma simult¨¢nea a la manifestaci¨®n de la tarde convocada por CC OO y UGT. Guiada por un pu?ado de radicales, muchos de ellos encapuchados y ajenos a las convocatorias mayoritarias, la violencia prendi¨® a las siete en la plaza de Catalunya y el paseo de Gr¨¤cia, baj¨® por Via Laietana, se agudiz¨® en el entorno de la catedral y se instal¨® en las callejuelas del Born.

Los radicales la tomaron con bancos, cajas y tiendas de ropa de cadenas como Zara o Levi's -saqueada-, arrasaron literalmente una tienda Movistar y quemaron contenedores. Tambi¨¦n se liaron a pedradas contra agentes antidisturbios, escaparates y el coche de una autoescuela, ante el pavor centenares de turistas. Tras un largo juego del rat¨®n y el gato, la situaci¨®n se calm¨® sobre las nueve de la noche. La polic¨ªa tom¨® la plaza de Sant Jaume."No tienen nada que ver con los trabajadores ni con las organizaciones sindicales mayoritarias que han convocado la huelga", conden¨® a los antisistema la consejera de Trabajo, Mar Serna. El consejero de Interior, Joan Saura, y el secretario de Seguridad, Joan Delort, evaluar¨¢n los incidentes esta ma?ana. Los hechos perturbaron el desarrollo de la s¨¦ptima huelga general de la democracia, en que, desde la madrugada de ayer, la imagen del d¨ªa fueron los pol¨ªgonos fantasma de las industrias, la detenci¨®n de las grandes obras, un transporte de mercanc¨ªas y de pasajeros al ralent¨ª, la baja actividad del puertoyo el bloqueo de Mercabarna.

No obstante, el peque?o comercio, los bares y restaurantes, y los grandes centros comerciales del centro funcionaron sin problemas la mayor parte de la jornada, con interrupciones intermitentes y la persiana a medio bajar por temor a los piquetes. El hormigueo de los edificios de oficinas, que no ces¨®, da idea de que en los servicios tampoco cal¨® el par¨®n. La protesta no cuaj¨® entre m¨¦dicos y enfermeras, cuyos sindicatos mayoritarios no secundaron el paro, aunque en servicios como la limpieza el seguimiento fue desigual. En muchos colegios faltaron m¨¢s alumnos que docentes.

La manifestaci¨®n que canaliz¨® la protesta pasadas 18 horas concentr¨® a unas 75.000 personas, seg¨²n c¨¢lculos de este diario. La polic¨ªa elev¨® la cifra a 130.000 y los sindicatos hablaron de 400.000.

La guerra de cifras -que la Generalitat esquiv¨®- fue eso, una guerra. CC OO, UGT y USOC aseguraron que el 80% de los asalariados no acudi¨® al trabajo y calificaron la protesta de "¨¦xito". Las patronales se sonrieron con la cifra y hablaron de una huelga de "escasa incidencia", seg¨²n Fomento del Trabajo. PIMEC cifr¨® el seguimiento medio en el 16,5%. La vallesana Cecot habl¨® de un 26,4%. La patronal del metal UPM la calcul¨® en un 65% entre las grandes empresas y en un 35% entre las medianas y peque?as. La Asociaci¨®n Nacional de Grandes Empresas de Distribuci¨®n (ANGED) se?al¨® que solo un 4% de la plantilla de sus empresas dej¨® de ir a trabajar. La Confederaci¨®n de Comercio puso el list¨®n en el 10%. En el sector p¨²blico falt¨® un 15%.

Si el consumo el¨¦ctrico es term¨®metro fiable de la actividad econ¨®mica, los datos de Endesa, que controla el mercado catal¨¢n, arrojaron una ca¨ªda del 24% del consumo en la comunidad a las 15.00 horas con relaci¨®n al mi¨¦rcoles anterior. Este dato va cambiando a lo largo del d¨ªa. A las ocho de la ma?ana, el desplome hab¨ªa sido del 27%, dijeron los sindicatos. En la ¨²ltima huelga general, en 2002, la ca¨ªda media en Catalu?a fue del 28%, con simas del 35%. El consumo de gas cay¨® un 22%.

En Lleida, la protesta sac¨® a la calle a cerca de 2.000 personas. En Tarragona, a unas 6.000, seg¨²n c¨¢lculos de este diario (m¨¢s de 8.000 seg¨²n los organizadores). Coreando gritos del tipo "?esta huelga la hemos ganado!" y "?contra la reforma laboral!", m¨¢s de 4.000 personas recorrieron ayer el centro de Girona.

Con informaci¨®n de Ariadna Trillas, Clara Blanchar, Miquel Noguer, Cristina Delgado, Ferran Balsells, ?ngels Pi?ol y Rebeca Carranco.