El negocio de la visita del Papa pincha
Los vecinos no logran alquilar sus pisos - Las tiendas de 'souvenirs' solo venden los art¨ªculos m¨¢s baratos
Pau Francia alquila para ma?ana una terraza de 80 metros cuadrados con vistas privilegiadas a la Sagrada Familia. El precio: a convenir con los interesados. Pero nadie ha llamado. Su caso no es excepcional. La idea de algunos vecinos de alquilar su balc¨®n durante la visita del Pont¨ªfice para sacarse un dinero extra no ha tenido ¨¦xito. Algunos pensaban ganar miles de euros en horas. Pero la burbuja del negocio papal ha explotado. Tampoco las tiendas de souvenirs ni los restaurantes piensan llenar la caja. El negocio, se consuelan las patronales, llegar¨¢ a largo plazo, gracias al impacto medi¨¢tico.
Ni la limitaci¨®n de feligreses que podr¨¢n seguir la ceremonia (desde el interior del templo 6.900 personas y desde el exterior 40.000 en las sillas instaladas) ha sido suficiente para que los fieles que quieran tener las mejores vistas se rasquen los bolsillos. Roberto Rodr¨ªguez ha rebajado el precio de su balc¨®n, en la calle de la Marina, dentro de la ruta papal, de los 200 a los 50 euros, pero ni as¨ª ha tenido ¨¦xito. "Ha llamado solamente una persona que quer¨ªa poner una pancarta en contra de la visita del Papa y meti¨¦ndose con los casos de abuso sexual cometidos por miembros de la Iglesia", explica. No se lo alquil¨®. Raquel Buschiazo asegura que le han llamado unas 10 personas, pero solo para informarse. "No quieren pagar los 100 euros que pedimos por persona", dice. A Raquel, que vive en la calle de Mallorca, no le consta que ning¨²n vecino haya podido alquilar su balc¨®n a particulares. Solo algunos han logrado alg¨²n beneficio, gracias a cadenas de televisi¨®n.
Los bares que no pueden instalar sus terrazas pierden miles de euros
Los recuerdos m¨¢s vendidos son dedales, llaveros y campanitas
El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, calcul¨® que la visita generar¨ªa a la ciudad 30 millones de euros en ingresos. Pero muchos comercios no tienen tan claro que les salga a cuenta el viaje vaticano. Para empezar porque la zona m¨¢s pr¨®xima a la Sagrada Familia estar¨¢ blindada y en toda la ciudad, por ser domingo, las tiendas estar¨¢n cerradas.
"Los recuerdos que m¨¢s ¨¦xito han tenido entre las tiendas son los dedales con la imagen del Papa, los llaveros, las campanitas y las medallas", explica una responsable de Exporegalo, una empresa de recuerdos que ha fabricado objetos para la visita. El negocio de los recuerdos religiosos, sin embargo, ya no es lo que era, dice. Esta compa?¨ªa de Cornell¨¤, hasta hace pocos a?os se dedicaba a ellos en exclusiva y ahora se ha centrado en otros regalos. Aun as¨ª, para la llegada del Papa, hicieron un esfuerzo y fabricaron objetos religiosos. Sus clientes, los comercios de souvenirs, se han decantado por proveerse de objetos de poco valor. No esperan una avalancha de compras y surtirse de camisetas del Bar?a con el nombre de Messi detr¨¢s les sale m¨¢s rentable.
Los bares cercanos a la Sagrada Familia tampoco creen que se beneficiar¨¢n demasiado del lleno en la plaza. Para empezar, porque no podr¨¢n instalar sus terrazas a partir de hoy. Espacios como la avenida de Gaud¨ª, donde hay bastantes, est¨¢n ocupados por las sillas para seguir la ceremonia. Esos establecimientos, de media, obtienen entre 1.000 euros y 1.300 euros por d¨ªa en las mesas exteriores. "Pero esperamos que consuman bebidas", matizaba un empleado de una pizzer¨ªa. Algunos trabajadores se mostraban preocupados ayer, porque a¨²n no hab¨ªan recibido los documentos que necesitan el domingo para acceder a la zona del templo.
Las banderas amarillas y blancas que adornan algunos balcones tampoco han enriquecido a muchos. La gran mayor¨ªa, 20.000 piezas de tela, las ha vendido a precio casi de coste la asociaci¨®n de familias cat¨®licas Barcelona Posa't Papa. Piden por ellas donativos, seg¨²n el tama?o, de entre tres y siete euros. "Si despu¨¦s de pagar el material queda algo de dinero, lo donaremos al arzobispado, para contribuir a los gastos del viaje", dice una de sus responsables.El fin de semana de la visita del Pont¨ªfice los hoteles registrar¨¢n, seg¨²n el gremio de la ciudad, una ocupaci¨®n cercana al 75%, es decir, 10 puntos por encima de un fin de semana sin Papa. Aun as¨ª, y a pesar de que el gremio en septiembre hab¨ªa augurado un lleno total, su presidente Jordi Clos se muestra muy optimista. "La proyecci¨®n internacional de Barcelona ser¨¢ extraordinaria para la imagen corporativa", defiende.
En la misma l¨ªnea habla Miguel ?ngel Fraile, secretario general de la Confederaci¨®n Catalana de Comercio: "Es una operaci¨®n de mercadotecnia impagable. Las molestias e incomodidades que pueda ocasionar se ver¨¢n compensadas".
No solo es el fin de semana del Papa, recuerda Gaiet¨¤ Farr¨¤s, presidente del Gremio de Hosteler¨ªa de la ciudad. Tambi¨¦n es el fin de semana de Hostelco, la feria para profesionales de su sector. "Ambas cosas arrastran a mucha gente y eso para nosotros es bueno, siempre", defendi¨® ayer. Seg¨²n las cifras de la organizaci¨®n, Hostelco traer¨¢ a Barcelona 60.000 personas. Ser¨¢n 60.000 profesionales que suelen gastar muy por encima de los visitantes tur¨ªsticos en hoteles, taxis, etc¨¦tera. El a?o pasado se calcul¨® que el impacto econ¨®mico de esta feria, que dura cuatro d¨ªas y medio, fue de 56 millones de euros seg¨²n sus promotores. Casi el doble de lo que se espera que genere la visita del Papa.
"Lo que pasa es que el Ayuntamiento ha sido muy conservador a la hora de calcular lo que genera que millones de personas vean Barcelona el domingo en las televisiones", defiende Fraile. "Los beneficios no se ver¨¢n solo el domingo. Llegar¨¢n en dos semanas o un mes. Con vistas a Navidad, seguro que se nota una mayor llegada de turistas a la ciudad, porque es ahora cuando deciden d¨®nde ir¨¢n y cuando vean la televisi¨®n se decidir¨¢n por Barcelona", zanja.
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