Realidad paralela
Las campa?as electorales no tienen mucho que ver con la realidad. Hasta tal punto que incluso necesitan deslocalizar de s¨ª mismas un Bar?a-Madrid, esa cosa tan real. Tal vez eso es un indicativo de que, en campa?a, la realidad a palo seco ni est¨¢ ni se la espera. ?Qu¨¦ diablos es la realidad a palo seco? Ni idea. Quiz¨¢s tiene que ver con que esta semana un se?or se ha ahorcado en la calle momentos despu¨¦s de que se le notificara su desahucio. Bueno. Majestic. Reuni¨®n de empresarios con Artur Mas para hablar de econom¨ªa. Mas -le recordar¨¢n de anteriores pel¨ªculas, como Mam¨¢, me he cargado la financiaci¨®n negociando un sabadete en La Moncloa; inciso: vaya d¨ªa aquel, la reuni¨®n dura cinco minutos m¨¢s y hubi¨¦ramos perdido tambi¨¦n las DOC Priorat y Conca de Barber¨¤- es el favorito en estos comicios, en los que flota la sensaci¨®n de que no votar¨¢ ni el gato. En esta coyuntura, si Laporta consiguiera que todas sus ex le votaran, igual sacaba grupo propio.
Acto. Prima el senyor Rius por encima del hereu Rius. El personal gasta aire triste. Tanto que, de lejos, la cosa parece una reuni¨®n de accionistas de Yahoo. Para acabarlo de liar, toma la palabra Duran Lleida. Describe un paisaje tan sombr¨ªo para el empresariado que el logo de campa?a de CiU a sus espaldas -una sonrisita post porno-siesta- empieza a llorar y a llamar a su madre. Toma la palabra Artur Mas. Momentos egregios: apoy¨¢ndose en un Power Point -llama a la cosa "unes diapositives", una opci¨®n l¨¦xica que en ESADE le supondr¨ªa repetir P-3- ense?a su esquema para salir del hoyo, una mezcla de cercle virtu¨®s Keynes, senyor Esteve y T¨ªo Gilito. En un momento dado habla de adelgazar la Administraci¨®n. Diez minutos despu¨¦s habla de nuevos fichajes que la ampliar¨¢n. La memoria hist¨®rica en esa realidad paralela llamada campa?a electoral no dura, snif, 10 minutos. El resto de la eternidad, posiblemente, pues menos.
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