Fiesta en la f¨¢brica de chocolate

Adi¨®s calor, bienvenido fr¨ªo. Despu¨¦s de las alt¨ªsimas temperaturas y los incendios del verano, la ciudad m¨¢s grande de Europa vuelve a ser la que era: obras monumentales, poluci¨®n, lujo y un constante bullicio. A¨²n no ha cuajado la nieve, pero estos d¨ªas la temperatura m¨¢xima apenas alcanza los 8 grados. Y aunque se encuentra algo lejos de Espa?a -unas cuatro horas y media en avi¨®n desde Madrid: con Iberia (www.iberia.com), ida y vuelta desde 270 euros-, un d¨ªa dentro del Anillo de los Jardines (el segundo de los cinco que rodean Mosc¨², de 17 kil¨®metros) da para explorar el pandemonio ruso. Todo ello sin recurrir al metro, el "palacio del pueblo" visionado por Stalin y, seguro, el subterr¨¢neo m¨¢s hermoso del mundo.

07.00 'Pierogis' ma?aneros

En Rusia los d¨ªas encogen en oto?o y en invierno. As¨ª que madrug¨®n para desayunar en Nikolai (1) (Piatnitskaya ulitsa, 53, Metro Dobryninskaya, www.bar-bufet.ru), al sur del anillo. Aparte de la bebida, en este espacioso local regentado por j¨®venes que pinchan rock y funk no hay que deliberar demasiado: pida un pierogi, una empanada al horno rellena de espinacas, queso, carne o mermelada. Aqu¨ª los clientes se las llevan a decenas. El bar abri¨® en honor al violonchelista Nikolai Peregulov, muerto hace dos a?os.

10.00 A la Lomon¨®sov sobre v¨ªas

A bordo del tranv¨ªa m¨¢s pr¨®ximo, la l¨ªnea 39, contin¨²a el recorrido. Hay dos opciones. La primera es seguir hacia el suroeste, hasta la colosal Universidad Estatal de Mosc¨² Lomon¨®sov (2) (ulitsa Akademika Khokhlova s/n, Metro Universitet), y salir temporalmente de los m¨¢rgenes del segundo anillo. Con sus 240 metros y 36 pisos, la universidad es el rascacielos estaliniano m¨¢s alto de los siete que alberga la capital. Lo fue tambi¨¦n de Europa en los a?os 50. Erigida en 1953 junto a la Colina de los Gorriones (Metro Vorobi¨®vy Gory: es el mejor mirador de Mosc¨² y cuenta con un trampol¨ªn de esqu¨ª artificial), su estilo se mece entre el barroco y el g¨®tico y est¨¢ coronada por una gran estrella roja. Cursar en la Lomon¨®sov era un anhelo para los estudiantes de los estados socialistas. Hoy conserva parte de esa reputaci¨®n, sobre todo m¨¢s all¨¢ de los Urales.

Muy cerca se encuentran el Monasterio y el Cementerio de Novod¨¦vichy (3) (Luzhnetskiy proyezd, s/n, Metro Sportivnaya), fundados en el siglo XVI. Patrimonio mundial desde 2004, el primero es un conjunto arquitect¨®nico blanquecino de lograda armon¨ªa que tiempo atr¨¢s hizo de fortaleza. En el camposanto descansan el escritor G¨®gol, el compositor Prok¨®fiev, el cineasta Eis¨¦nstein y pol¨ªticos como Nikita Jrushev o Boris Yeltsin. La tumba de este ¨²ltimo, una suerte de bandera rusa ondeando, es sin duda la m¨¢s ostentosa.

La segunda opci¨®n es llegar con el viejo tranv¨ªa hasta el barrio de Chistye Prudi (4) (Bulvarnoye Koltso). Lo de la senilidad del funicular no es rechifla: el tranv¨ªa se aver¨ªa cada dos por tres. A cambio, ofrece un paseo inigualable y empinado que recorre el r¨ªo Moscova y su afluente y, con ellos, varias eras de la arquitectura rusa; desde templos ortodoxos hasta los lineales bloques postestalinistas, pasando por los refinados edificios prerrevolucionarios o el tenebroso socialismo neog¨®tico. Casi nada.

13.00 El barrio polis¨¦mico

Para almorzar, hay que adentrarse por el vecino Kitai Gorod (5) (Metro Kitai Gorod), un barrio sobre cuyo significado ("ciudad china", "ciudad de balleneros", "ciudad de las estacas de madera") no se avienen los entendidos. En tan polis¨¦mico distrito se halla el restaurante Piloto Chino (6) (Kitaiysky Lyotchik, 25 Lubyansky proyezd), que de asi¨¢tico solo tiene el nombre. Es un s¨®tano bien engalanado, de aire bohemio y precios asequibles. Sirven pasta y buen salm¨®n.

Proc¨²rese algo frugal porque queda ruta. Hay que explorar las callejuelas de Kitai Gorod, una cacofon¨ªa de iglesias ortodoxas (frente al Piloto Chino est¨¢ la Iglesia de la Trinidad de Nikitniki, en Nikitnov pereulok, s/n, de las mejor preservadas), bancos, hoteles, tiendas caras, locales a la ¨²ltima, sedes ministeriales y de otras autoridades (como el neobarroco edificio de la Gran Lubyanka, en Lubyankaya Ploshad, otrora sede de la KGB) o los pomposos grandes almacenes GUM (7), de inspiraci¨®n victoriana. Estos ya se meten en la Plaza Roja (8), presidida por las magn¨ªficas c¨²pulas en forma de cebolla de la Catedral de San Basilio (9) y una de las aristas de la genial fortaleza, el Kremlin (10). Sin olvidarnos del hier¨¢tico Mausoleo de Lenin (11). En ¨¦l descansa desde 1924 el cuerpo incorrupto del bolchevique m¨¢s c¨¦lebre.

17.00 Con Gorki y Bulg¨¢kov

Para llegar a la Casa-Museo de Gorki (12) (6/2 Malaya Nikitskaya ulitsa), es menester dar un rodeo por Tverskaya (13), la avenida m¨¢s c¨¦lebre, y bifurcarse por su paralela, Tverskoy, en cuanto se llegue a la Plaza Pushkin; all¨ª abri¨® hace 20 a?os un s¨ªmbolo de la perestroika: uno de los McDonald's (14) m¨¢s grandes del mundo. La ¨²ltima morada del escritor de La madre, de dos plantas, es m¨¢s modesta por fuera. Construida a comienzos del siglo XX por Fyodor Schechtel, el interior es de un soberbio estilo modernista del que destaca la barandilla, con forma de medusa. Defensor de los desharrapados, Gorki fue el artista m¨¢s querido de la Uni¨®n Sovi¨¦tica. Hasta Stalin tiene su fotograf¨ªa con ¨¦l.

Muy cerca est¨¢ el Caf¨¦ Margarita (15) (Malaya Bronnaya, 28), abierto de 13.00 hasta medianoche, con m¨²sica de piano en directo desde las 20.00. Este bar, que es rojizo y coqueto y que demanda a sus clientes no fumar (a no ser que lo que se aspire sean los cigarrillos arom¨¢ticos que vende el propio bar), est¨¢ en una de las esquinas de los Estanques del Patriarca, uno de los lugares m¨¢s apacibles. Debe el bistr¨® su nombre a la novela de Mija¨ªl Bulg¨¢kov El maestro y Margarita, cuya primera genial escena transcurre en el estanque: Voland (Sat¨¢n) aterriza en Mosc¨² para vengarse de funcionarios y pol¨ªticos c¨®mplices de un sistema absolutamente corrupto.

21.00 'Pelmenis' y vodka

Escondido entre la Catedral de Cristo Salvador (16) y el Museo de Pushkin (17) (ulitsa Volkhonka, 12, www.museum.ru/gmii/defengl.htm), asoma el restaurante georgiano Pelmeni & Pelmeni (ulitsa Lenivka, 6/7), cuya especialidad son los pelmenis, una masa harinosa generalmente rellena de carne y sazonada con eneldo. Puede tambi¨¦n pedir las sopas borsh o solyanka, aunque van tan recargadas que se arriesga a no probar despu¨¦s el manjar que da nombre al bar.

Mosc¨² hay que liquidarla con vodka. Detr¨¢s del Cristo Salvador hay una isla angosta y sin nombre, gobernada por la piedra granate de la abandonada f¨¢brica de chocolate Octubre Rojo (18) (Krasny Oktyabr), que hoy sigue produciendo un dulce excelente pero en otra latitud. Sucesivas reformas han hecho de la antigua f¨¢brica Octubre Rojo el nuevo foco de ocio con sus galer¨ªas art¨ªsticas, sus lofts para ricachones y sus bares de post¨ªn. Uno de reciente creaci¨®n es el Dome - (Bersenevskiy pereulok, 3/10), de m¨²sica house y electr¨®nica. Cuentan que a su fiesta de apertura, antes del verano, solo se pod¨ªa acceder con una palabra secreta: el resultado fue una discoteca vac¨ªa. Ahora el Dome va a mejor. Como Mosc¨². Eso s¨ª, con fr¨ªo.