C¨®mo perder las elecciones

?Est¨¢ usted harto de ganar de forma consecutiva ocho veces las elecciones auton¨®micas en Andaluc¨ªa? ?Cansado de enfrentarse cada cuatro a?os a unos comicios donde el resultado se conoce antes de instalar las urnas? No se preocupe, he encontrado en Internet un manual de c¨®mo perder elecciones en c¨®modos pasos. Un compendio de consejos para afrontar con garant¨ªas un fracaso electoral. Una receta testada cient¨ªficamente este fin de semana en Catalu?a, con una derrota m¨¢s abultada incluso de la esperada. Como sus efectos son m¨¢s visibles a largo plazo, este manual garantiza que el varapalo en las municipales ser¨¢ todav¨ªa peor. Ni desfallezca ni se desmoralice, las elecciones nunca se pierden sino que se gana experiencia en la oposici¨®n.

El compendio para perder las elecciones incluye un centenar de consejos. Por razones de espacio, aqu¨ª llevan una versi¨®n simplificada y adaptada a la singularidad auton¨®mica, ya que en principio este manual estaba escrito para pol¨ªticos que quer¨ªan perder las elecciones en Paraguay.

1. Haga un cambio de liderazgo en el Gobierno. Y luego dese prisa y haga un segundo cambio de liderazgo en el partido. Decida entre ser radicalmente tradicional o definitivamente moderno. Si la cosa se pone muy fea, intente cualquier combinaci¨®n de elementos tradicionales y modernos, pero consiga un respaldo un¨¢nime, las crisis en falso siempre se cierran con mayor¨ªas a la b¨²lgara.

2. Nunca cambie de opini¨®n o de estrategia, aunque le vaya mal. O cambie cada d¨ªa de opini¨®n y estrategia para confundir a sus adversarios, aliados o electores. Dec¨ªdase claramente por una de las dos opciones, aunque si realmente quiere perder las elecciones de forma r¨¢pida debe corregirse a s¨ª mismo todos los d¨ªas, diciendo hoy una cosa y ma?ana la contraria.

3. Diga cualquier cosa, a cualquiera, y en cualquier lugar, especialmente en presencia de periodistas. Desconf¨ªe de la planificaci¨®n, conf¨ªe siempre en la improvisaci¨®n. No se trata de que su adversario gane las elecciones, sino de que uno haga todo lo posible por perderlas.

4. Nunca haga usted nada que se parezca a lo que dice. Nunca prepare un material impreso con sus intervenciones, as¨ª la gente las olvidar¨¢ pronto. Nadie sabr¨¢ c¨®mo explicarlas y nadie le pedir¨¢ explicaciones por no desarrollarlas. Y nunca diga en unos segundos lo que pueda decir en muchos minutos. Deje siempre en manos de los periodistas la interpretaci¨®n de sus palabras. Si no lo hace, se quedar¨¢ sin excusa ante los suyos una vez alcance la derrota: "Hemos tenido un problema de comunicaci¨®n, comunicamos mal lo que hicimos".

5. Si la situaci¨®n se complica por una crisis econ¨®mica, b¨²squese m¨¢s problemas. Ya sean funcionarios, ERE con sorpresa o subvenciones a familiares. Lo mejor, sin embargo, es reclamar una caja ¨²nica. En definitiva, no deje para ma?ana ning¨²n l¨ªo que le pueda erosionar hoy. Para ello, rechace todas las t¨¦cnicas modernas de mercadeo electoral. Vaya a lo seguro: para perder unos comicios s¨®lo hay que propon¨¦rselo.

6. D¨¦jese llevar por la inercia. No preste atenci¨®n a lo que otros candidatos ofrecen o denuncian. Ni defina el producto de la competencia. No explique qui¨¦nes son, qu¨¦ representan, ni qu¨¦ ofrecen ni qu¨¦ piden. Y h¨¢gase preguntas para convencerse a usted mismo: ?Quien ha perdido tres veces por qu¨¦ va a ganar ahora?

7. Si tiene malas noticias, comp¨¢rtalas. Las malas noticias son un arma poderosa para bajar la moral de la tropa.

Siga las instrucciones sin salirse del gui¨®n. Y en 2012, no diga perdimos. Diga que ganamos una nueva experiencia pol¨ªtica, la de estar en la oposici¨®n.