El embajador de EE UU cree que los cables no afectar¨¢n a la relaci¨®n bilateral
Solomont dice que el contenido de esos textos no refleja la opini¨®n de sus l¨ªderes
"Espa?a es un aliado estrat¨¦gico", empez¨® por afirmar ayer el actual embajador de Estados Unidos en Espa?a, Alan D. Solomont, "y conf¨ªo en que la informaci¨®n supuestamente obtenida de los cables del Departamento de Estado por Wikileaks no da?ar¨¢ la excelente relaci¨®n entre Espa?a y Estados Unidos". Y agreg¨®: la posibilidad de que la perjudique es "peque?a".
Solomont lanz¨® un comunicado para salir al paso de las informaciones publicadas por EL PA?S y en el que arremeti¨® contra el contenido de estos cables, asegurando que se trata de "an¨¢lisis incompletos y subjetivos de cuestiones que pueden contribuir al proceso de elaboraci¨®n de pol¨ªticas en Washington, pero que no refleja ni la opini¨®n de los l¨ªderes de Estados Unidos ni la pol¨ªtica de la naci¨®n".
En la misma l¨ªnea en la que se manifest¨® anteriormente la secretaria de Estado de EE UU, Hillary Clinton, el embajador en Espa?a calific¨® la publicaci¨®n de "ilegal" y afirm¨® que con su difusi¨®n "se pone en peligro la vida de personas, se amenaza a la seguridad nacional y se minan esfuerzos por trabajar con otros pa¨ªses en la resoluci¨®n de problemas compartidos". Y calific¨® la publicaci¨®n de "ataque contra la comunidad internacional".
En relaci¨®n con las informaciones contenidas en los cables que juzgan con dureza a los principales l¨ªderes pol¨ªticos espa?oles, Solomont rechaz¨® cualquier sugerencia de que en los contactos mantenidos por su embajada con el Gobierno, los pol¨ªticos o los empresarios espa?oles "les hayan tratado de otro modo que no sea con gran respeto y consideraci¨®n".
El embajador manifest¨® su indignaci¨®n porque la publicaci¨®n de los cables "haya interferido en el importante trabajo com¨²n por la paz, la seguridad, la democracia y la prosperidad".
Un hombre cordial para una nueva era
Alan D. Solomont, de 60 a?os, empresario y fil¨¢ntropo, aterrizaba a principios de este a?o en la embajada espa?ola en un floreciente momento de las relaciones entre Espa?a y Estados Unidos tras las tensiones vividas entre los pa¨ªses en la era Bush. Durante su gesti¨®n ha hecho siempre un esfuerzo porque quedara claro que los norteamericanos van en Espa?a a las claras.
El embajador tuvo que afrontar una peque?a crisis, poco tiempo despu¨¦s de deshacer las maletas en la madrile?a calle de Serrano, cuando Washington anul¨® la cumbre UE-Estados Unidos en plena presidencia espa?ola, que anteriormente hab¨ªa anunciado como probable. Fue por un problema de agenda de Barack Obama y, ante la desilusi¨®n que suscit¨® en el Gobierno espa?ol, Solomont se preocup¨® por mantener una postura cordial y muy cercana.
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