20.000 pasajeros sufren durante horas en los aeropuertos

M¨¢s de 20.000 personas padecieron ayer en Lavacolla, Peinador y Alvedro el caos provocado por el conflicto de los controladores, una situaci¨®n que Galicia arrastra desde hace una semana y que se complic¨® en la primera de las terminales a causa de la niebla matinal. Con motivo del puente, en Santiago hab¨ªa programados 68 vuelos; en Vigo, 42; y en A Coru?a, 37, y de ¨¦stos unos 140 sufrieron retrasos que AENA calific¨® de "importantes", o fueron desviados o cancelados. A ¨²ltima hora, cuando a¨²n se esperaba la llegada de los militares a las torres de control, muchos viajeros optaron por dejar los aeropuertos tras presentar reclamaciones. Por la tarde, en Galicia solo logr¨® aterrizar un vuelo procedente de Barcelona y despegar otro rumbo a Marraquech que sobrevolaba Portugal.

Volar desde M¨¢laga le llev¨® 24 horas, y el ¨²ltimo tramo lo hizo en autob¨²s

Los 48 bailarines ven¨ªan de Vigo y Nar¨®n, peinados y maquillados para participar desde ayer por la tarde hasta el mi¨¦rcoles en el concurso profesional de ritmos de sal¨®n. Con eso del puente, tambi¨¦n bastantes familiares se hab¨ªan sumado para apoyarlos en la competici¨®n. Como las pruebas son en Salou, compraron billetes de Ryanair a Reus, y hace tiempo que hab¨ªan adelantado el dinero del hotel y la inscripci¨®n al concurso, que cuesta 90 euros. Despu¨¦s de una larga espera, al final el vuelo fue cancelado sin que la compa?¨ªa les ofreciese m¨¢s alternativa que el cambiar sus pasajes para otro d¨ªa, perdi¨¦ndose las pruebas de danza. "Les pedimos a las chicas del mostrador que nos ayudasen a buscar un bus para ir por carretera", contaba Nerea, una de las bailarinas de la Escuela Pazos de Vigo, "y no se les ocurri¨® otra cosa que esconderse y llamar a los de seguridad". A modo de protesta, los j¨®venes se echaron unos bailes. Y los polic¨ªas del aeropuerto llegaron al vuelo y pusieron fin a la fiesta.

AENA tendr¨ªa que haberles agradecido que amenizaran con su chachach¨¢ la estancia del resto de los viajeros, en una jornada en la que los sucesivos parones de los controladores se mezclaron con una tupida niebla que impidi¨® maniobrar en los escasos intervalos en que la pareja de vigilantes del aire volvi¨® a la torre. El d¨ªa fue ganando en tensi¨®n, y pasado el mediod¨ªa, cuando el tel¨®n de bruma se disip¨®, el cabreo se fue espesando. Buena parte de los 68 vuelos (llegadas y salidas) programados para la v¨ªspera del puente en Lavacolla fueron cancelados o desviados a Vigo, A Coru?a y Oporto (¨¦stos, los de Ryanair). El resto, aterrizaron o despegaron hasta con cuatro horas de retraso y ¨²nicamente dos, uno procedente de Bilbao y otro de Barcelona, arribaron en hora. Algunas compa?¨ªas optimistas, en los ratos en que los controladores volvieron a sus puestos, llegaron a embarcar a los viajeros, pero al rato los hicieron levantarse de nuevo para despacharlos en autob¨²s.

Mientras tanto, varios aviones aguardaban una se?al desde arriba, rondando el espacio a¨¦reo de Santiago por si hab¨ªa suerte y pod¨ªan tomar tierra. De ¨¦stos, bastantes no lo lograron, como uno de Iberia, procedente de Madrid, que despu¨¦s de media hora de sobrevuelo anunci¨® a los pasajeros que se desviar¨ªa hasta Alvedro, aunque al final acab¨® en Peinador porque la AP-9 estaba cortada. En ese aparato viajaban Mar¨ªa y Orlando. A ¨¦l le hab¨ªa costado llegar desde M¨¢laga, v¨ªa Barajas, 24 horas (adem¨¢s de en Lavacolla, tuvo complicaciones por los paros y el tiempo en esos dos aeropuertos) y ella, que hab¨ªa comprado un billete Madrid-Santiago para las nueve de la tarde del jueves, acab¨® durmiendo en un hotel en Barajas pagado por la compa?¨ªa. Otros pasajeros, ni siquiera eso. A Aurora, en la ventanilla, le dijeron que no ten¨ªa derecho a cama porque se trataba de una cancelaci¨®n "por causas metereol¨®gicas".

Sin saber nada de sus vuelos y con m¨¢s desaliento que informaci¨®n y soluciones por parte de las operadoras, se vieron ayer m¨¢s de 10.000 viajeros en el aeropuerto santiagu¨¦s, a los que se sumaron otros tantos en Vigo y A Coru?a cuando estos aeropuertos se contagiaron del colapso. Por la ma?ana, en Peinador y Alvedro (con 42 y 37 vuelos previstos respectivamente para todo el d¨ªa m¨¢s los que tuvieron que asimilar desviados desde Lavacolla) se registraron numerosos retrasos, pero por la tarde, despu¨¦s del boicot masivo del personal de torre a las medidas urgentes del Gobierno y el cierre del espacio a¨¦reo madrile?o, los tres aeropuertos quedaron sin actividad.

Las compa?¨ªas remit¨ªan a AENA, y los trabajadores de AENA, a las compa?¨ªas. Ya no val¨ªa la excusa meteorol¨®gica. Muchos viajeros perdieron sus vacaciones; otros, la mitad de ellas, porque aceptaron vuelos para dentro de dos d¨ªas.