Volar desde la web y la crisis
Travelgenio naci¨® en julio y cada mes duplica su n¨²mero de visitantes
Mariano Pelizzari, presidente y cofundador de Travelgenio.com, un portal de viajes por Internet que a pesar de su corta vida -"empezamos a operar el pasado mes de julio"- dobla, mes tras mes, su n¨²mero de visitas, nunca tuvo en la cabeza la idea de convertirse en empresario. Ni cuando estudiaba Turismo en su Argentina natal, ni cuando era el director general del operador de viajes n¨®rdico Supersaver Travel en Espa?a.
Lo suyo fue un salto adelante para sobrevivir, despu¨¦s de que la firma en la que trabajaba decidiera cerrar su unidad de negocio en Espa?a. "Hace veinte a?os que trabajo en el sector tur¨ªstico. Por eso, cuando me qued¨¦ sin trabajo, pens¨¦ que, quiz¨¢s, hab¨ªa llegado el momento de arriesgar construyendo mi propio proyecto", dice. Y arriesg¨®.
El emprendedor se queja de las escasas ayudas recibidas tanto de la Administraci¨®n como de las entidades financieras. "Se habla mucho de subvenciones p¨²blicas, pero no son f¨¢ciles de conseguir. En cuanto a los bancos, y lo mismo valdr¨ªa para los proveedores, la quiebra de empresas como Marsans ha hecho que baje much¨ªsimo la confianza en el sector. Adem¨¢s, hay que tener en cuenta que las agencias de viajes est¨¢n consideradas como empresas de alto riesgo en Espa?a".
Y es que, "al escaso margen de beneficio que deja la venta de billetes, tienes que a?adir que IATA -la asociaci¨®n que regula el tr¨¢fico internacional de aviaci¨®n- no te cobra hasta 45 d¨ªas despu¨¦s de que el cliente te pague el billete. Esto quiere decir que, teniendo el dinero en tu poder, y si no tienes una administraci¨®n muy eficiente de los gastos, puede que cuando tengas que abonarlo ya no lo tengas. Los bancos lo saben y, por eso, nos penalizan a la hora de darnos cr¨¦ditos", explica Pelizzari.
Agencias de viajes como tales las hay con oficina abierta a pie de calle o con ventanilla en el ciberespacio. Cuando lleg¨® el momento de decidirse por abrir Travelgenio en uno u otro lugar, Pelizzari lo tuvo claro "el mercado de las agencias de calle en Espa?a est¨¢ muy dividido y consolidado: solo triunfas si eres muy grande o muy peque?o. No hay espacio para los medianos, as¨ª que desde el principio supimos que, si quer¨ªamos aspirar a crecer, hab¨ªa que estar en Internet donde, adem¨¢s, est¨¢ el futuro de este negocio".
Aunque las agencias de viajes tradicionales siguen sin tener rival en los viajes organizados, "el cliente, en estos casos, busca un asesoramiento y una informaci¨®n que a¨²n no encuentra en Internet", explica; en lo que respecta a la venta de billetes de avi¨®n, reserva de hoteles y alquiler de coche, las travel.com ofrecen unos precios que no est¨¢n al alcance de las agencias convencionales "y eso, para el cliente espa?ol, que mira sobre todo el precio y que no tiene ninguna fidelidad como cliente, resulta b¨¢sico. Si vendes el billete un euro m¨¢s barato, te comprar¨¢n a ti. Es algo que tenemos m¨¢s que comprobado".
Desde los 18 a?os en el sector del turismo "he desempe?ado todos los trabajos que se pueden desempe?ar en una agencia de viajes", Mariano conoce muy bien el terreno sobre el que pisa. "Desde un principio supimos que ten¨ªamos que salir al mercado con un motor de b¨²squeda potente; que no se cayera; que fuera capaz de buscar, de ofrecer b¨²squedas de tarifas r¨¢pidas y eficientes. Eso era lo principal, en lo que estuvimos trabajando casi un a?o antes de estar operativos. Ya tendremos tiempo, m¨¢s adelante, de ocuparnos de la est¨¦tica de la p¨¢gina".
Fundada en plena crisis, Travelgenio ha nacido con un control muy estricto del gasto "para as¨ª poder sobrevivir, con los menores problemas posibles, a esta ¨¦poca", pero con una alta inversi¨®n tecnol¨®gica "para que luego nos sea m¨¢s f¨¢cil y r¨¢pido crecer". Y en ese despu¨¦s piensa Pelizzari, por ejemplo, desarrollar una aplicaci¨®n espec¨ªfica para los tel¨¦fonos inteligentes (o smartphones). "Todo lo que sea facilitar el acceso a Internet representa, para una empresa como la nuestra, nuevas posibilidades de negocio, as¨ª que habr¨¢ que estar ah¨ª".
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