De andar por casa
RINC?N DE ALARDOS, refugio de calma a los pies de la sierra de Gredos
Cuesta llegar hasta este rinc¨®n de la sierra de Gredos. Tal es lo bravo y rec¨®ndito del lugar en que se asienta esta posada de apenas cinco habitaciones, residuo de una antigua casa de labranza dedicada al secado de tabaco y pimientos. El camino hacia El Raso est¨¢ poco se?alizado y se requiere cierto conocimiento de la zona para tomar sus desv¨ªos y salvar sus revueltas. Todo lo cual es garant¨ªa de un aislamiento id¨ªlico para quienes huyen del mundanal gent¨ªo y no necesitan en su fin de semana m¨¢s que un butac¨®n y un refresco para deleitarse con las vistas de la sierra. El hotelito aparece de repente ladera abajo entre robles, alisos, naranjos, olivos e higueras de cuello de dama, que luego se sirven en mesa a la hora de la cena.
Rinc¨®n de Alardos
PUNTUACI?N: 6
Categor¨ªa oficial: posada rural. Direcci¨®n: Finca Las Planas. El Raso, Candeleda (?vila). Tel¨¦fono: 920 37 70 75. Fax: 920 37 71 29. Internet: www.rincondealardos.es. Instalaciones: jard¨ªn, alberca de ba?os, sal¨®n de estar, comedor; no recomendable para ni?os menores de 10 a?os. Habitaciones: 5 dobles con calefacci¨®n, lector de DVD, secador de pelo. Servicios: zona habilitada para fumadores, animales dom¨¦sticos prohibidos. Precios: desde 80 euros, IVA y desayuno incluidos.
Michael y Susan, el matrimonio Reed, son conscientes del lujo que hoy representa un enclave de tres hect¨¢reas con arroyo propio y sin una sola construcci¨®n en el horizonte. Alrededor solo hay naturaleza y silencio redentor de los siete males urbanos. En el interior, muy british, se respira un ambiente informal y hogare?o, casi de h¨¢ztelo t¨² mismo. El sal¨®n de estar, caldeado con una estufa de le?a y dos sof¨¢s para repanchingarse a gusto cuando afuera hace fr¨ªo, enamora a los zahor¨ªes de lo r¨²stico. Irresistible la visi¨®n solariega de su empedrado, debajo de las alfombras. Arriba existe otro sal¨®n a¨²n m¨¢s campirano con la viguer¨ªa de madera a la vista, decorada con tallas de garzas y otras aves acu¨¢ticas, unos anaqueles suspendidos bajo las cerchas, una mesa atiborrada de revistas de decoraci¨®n y un televisor que (menos mal) permanece todo el d¨ªa apagado.
Del mismo tenor se presentan los dormitorios, aderezados con flores silvestres, cabeceros se?oriales y colchas estampadas, seg¨²n mandan los c¨¢nones del estilismo campestre. Ninguno hurta la belleza serena de los montes circundantes ni el jard¨ªn florido que cincha los cuatro lados de la casa.
Un rito indispensable en este tipo de posadas es el desayuno, mimado por los Reed con elaboraciones artesanas a la inglesa, es decir, bizcochada, mermelada, taz¨®n de cereales, fruta fresca, tostadas con aceite de casa y... t¨¦ sin llegar al punto de ebullici¨®n.
No menor es la importancia que Mike y Susan conceden a las cenas, basadas en productos de la huerta. Es un men¨² corto, no siempre a gusto de todos, pero elaborado con mucho cari?o por los propietarios.
En invierno, la noche g¨¦lida de la sierra pide arrebujarse a hora temprana entre s¨¢banas. En verano, la terraza exterior se llena de velas y ofrece un trago a los noct¨¢mbulos con m¨²sica suave de fondo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.