Svetlana Pozharskaya, hispanista rusa de primera l¨ªnea

Del g¨¦lido Mosc¨² llega la noticia del fallecimiento, el 12 de diciembre, de la profesora Svetlana Pozharskaya, a los 82 a?os. A la mayor¨ªa de los espa?oles su nombre no les dir¨¢ nada. Se trata, sin embargo, de la gran dama de la hispan¨ªstica rusa. Con raz¨®n en este pa¨ªs hemos honrado a los hispanistas occidentales que trataron, en tiempos tenebrosos, de explicarnos la historia contempor¨¢nea espa?ola de forma no adaptada a las necesidades pol¨ªticas e ideol¨®gicas del r¨¦gimen franquista.

Los aires de la guerra fr¨ªa envolvieron a quienes, m¨¢s all¨¢ del tel¨®n de acero, se esforzaron por comprender y difundir en sus pa¨ªses los rasgos esenciales de la historia de Espa?a. Algo que, en estos pagos, nadie o casi nadie se atrevi¨® a hacer con la de ellos hasta fecha relativamente reciente.

Nacida en 1928 en Leningrado, hoy San Petersburgo, su tesis doctoral, le¨ªda en 1951 en la Universidad Estatal de Mosc¨² M. V. Lomonosov, vers¨® sobre el PSOE en los cruciales a?os del bienio republicano-socialista, de 1931 a 1933. La de su habilitaci¨®n como docente, sobre la pol¨ªtica exterior espa?ola en la II Guerra Mundial.

Desde 1958 trabaj¨® en el Instituto de Historia de la Academia de Ciencias de la URSS, hoy Rusia. Su producci¨®n cient¨ªfica se materializ¨® en cinco libros (el ¨²ltimo, una biograf¨ªa de Franco publicada en Mosc¨² en 2007), la edici¨®n de documentos diplom¨¢ticos (entre ellos una impresionante colecci¨®n sobre Espa?a y la Komintern, que aqu¨ª no cita casi nadie) y multitud de art¨ªculos.

La profesora Pozharskaya dirigi¨® innumerables tesis doctorales, muchas relacionadas con la historia de Espa?a; cre¨® una revista especializada en la misma y alent¨® una escuela viva y palpitante de j¨®venes y ya menos j¨®venes historiadores que alumbran oscuros recovecos en el entramado de las relaciones entre los dos pa¨ªses y dan a conocer en Rusia los fundamentos de la Espa?a de hoy.

La conoc¨ª personalmente al principio de los ochenta, cuando ella y el profesor Manuel Espadas Burgos, del CSIC, emprendieron una fruct¨ªfera colaboraci¨®n entre las respectivas instituciones. Uno de sus resultados fue un corpus de documentos diplom¨¢ticos que iluminaron las relaciones entre Rusia y Espa?a desde el siglo XVII a la Revoluci¨®n de Octubre.

Reanudamos el contacto en Mosc¨², cuando regres¨¦ a mis investigaciones de historia contempor¨¢nea. A pesar de los muchos a?os transcurridos, vi a la misma Svetlana de siempre, entusiasta, entregada por entero a su labor, orgullosa de la escuela que hab¨ªa ido creando en circunstancias cuando menos dif¨ªciles.

Descanse en paz.

?ngel Vi?as es catedr¨¢tico de la Universidad Complutense e historiador.