"Me gustar¨ªa contar con Duato"

En la p¨¦rgola acristalada del Grand Hotel de Par¨ªs, el bailar¨ªn y core¨®grafo murciano Jos¨¦ Carlos Mart¨ªnez (Cartagena, 1969), reci¨¦n nombrado director art¨ªstico de la Compa?¨ªa Nacional de Danza (CND), est¨¢ sentado con la espalda tan recta que casi no llega a rozar el pomposo butac¨®n regencia. No tiene mucho tiempo para entrevistas, le espera una clase de rigor y un ensayo. Su nombramiento, sondeada la profesi¨®n, alcanza un consenso casi un¨¢nime y se le considera la persona adecuada.

Enseguida hay que hablar del repertorio de la compa?¨ªa titular espa?ola y del destino de las coreograf¨ªas de Nacho Duato, quien ha expresado no querer que se mantengan en cartel: "A m¨ª me gustar¨ªa tenerlas y contar con su colaboraci¨®n. No ser¨ªa justo tirar el trabajo de 20 a?os, no se puede ni se debe hacer. No quiero tirar nada, pero es ¨¦l quien tiene que reconsiderar su postura. La m¨ªa es mantener sus piezas dentro de un proyecto m¨¢s amplio".

En el proyecto que present¨® Mart¨ªnez al INAEM no hay t¨ªtulos espec¨ªficos: "M¨¢s que t¨ªtulos, se trata de precisar una l¨ªnea de trabajo". Y salen a colaci¨®n las tan trajinadas zapatillas de punta, esas que se han vuelto met¨¢fora y no se compran en la CND desde hace casi tres lustros: "Es org¨¢nico, elemental al trabajo del ballet y a mantener a las bailarinas en forma. S¨¦ que algunas de las artistas de la compa?¨ªa en Madrid ya han empezado a practicar con ellas de nuevo, y eso me ha alegrado mucho, es una actitud positiva que valoro enormemente".

Mart¨ªnez se har¨¢ cargo de la compa?¨ªa en septiembre de 2011 y un tiempo despu¨¦s tendr¨¢ ya la responsabilidad de presentar al p¨²blico un primer programa: "S¨¦ que habr¨¢ decepciones, pero en ballet no hay milagros, sino mucho trabajo. Conforme cambie el perfil del conjunto ir¨¦ m¨¢s lejos; un desarrollo pausado nos indicar¨¢ de lo que somos capaces de hacer, y el primer programa de una temporada que yo llamo ya 'de transici¨®n' forzosamente va a estar nutrido del repertorio del que se dispone". Las condiciones del contrato le permiten pensar las cosas con cierta calma: "Es un contrato por cinco a?os renovable otros tres consultando y obteniendo la confianza de la comisi¨®n".

El destino de los bailarines actuales de la CND flota en la conversaci¨®n: "Tienen contrato hasta julio de 2012. En este tiempo pueden asimilarse al nuevo proyecto o tomar sus decisiones". Y con respecto al equipo de trabajo dice: "Hay que conocer bien a la gente de la que te rodeas, poner en valor sus cualidades. La meta de ampliar repertorio est¨¢ ah¨ª, lo m¨¢ximo que podamos entregar a la nueva producci¨®n. En la CND, por ejemplo, hay demasiados repetidores para los t¨ªtulos disponibles. Eso hay que corregirlo".

Mart¨ªnez no bailar¨¢ en la compa?¨ªa en la que fungir¨¢ como director art¨ªstico: "No bailar¨¦ en Madrid. Lo tengo claro, puede que alguna vez, una ocasi¨®n especial, pero no bailar¨¦ habitualmente, me concentrar¨¦ en el trabajo de direcci¨®n. Bailar¨¦ en otros sitios, compromisos que tengo en otras partes del mundo y volver¨¦ ocasionalmente la pr¨®xima temporada a la ?pera de Par¨ªs, pues esta ha sido mi casa casi 25 a?os". El s¨¢bado pasado comenz¨®, con el Lago de los cisnes, su temporada del adi¨®s a la escena, pues seg¨²n las estrictas normas de la ¨®pera, a los 42 a?os se dejan las tablas: "Habr¨¢ un adieu definitivo, una funci¨®n en Garnier; eso es una tradici¨®n de la ?pera de Par¨ªs".