Los Pirineos ya no existen

Acaban de producirse dos noticias ferroviarias glamurosas: el estreno de la l¨ªnea de AVE Madrid-Valencia, a cuerpo entero, y la entrada del TGV franc¨¦s hasta Figueres, a pedacitos alternos de trote y galope.

Ambas han tapado la verdaderamente relevante: la inauguraci¨®n, a t¨ªtulo de viajes piloto, de las l¨ªneas de mercanc¨ªas entre el puerto de Barcelona y Lyon y Mil¨¢n, por v¨ªas de ancho europeo (1,4 metros en lugar del espa?ol de 1,6 metros), gracias a la instalaci¨®n de un tercer ra¨ªl. Uno de los sue?os por los que m¨¢s pugn¨® la llamada gota malaya barcelonesa, el Pasqual Maragall-alcalde.

Con esas nuevas l¨ªneas quedan allanados los ¨²ltimos Pirineos, los de la log¨ªstica comercial, una vez ya se desarbolaron los econ¨®micos, pol¨ªticos e intelectuales mediante el ingreso de Espa?a en la Europa comunitaria, en 1986.

El tren de ancho europeo para mercanc¨ªas convierte al 'corredor mediterr¨¢neo' en competidor de Rotterdam

La mayor relevancia econ¨®mica de este hecho para el futuro inmediato se adivina con tres datos. Uno es que en Espa?a el transporte ferroviario alcanza solo el 4% del movimiento total de mercanc¨ªas, contra una horquilla del 18% al 20% en la UE, en beneficio del m¨¢s caro, de menor escala y m¨¢s contaminante transporte por carretera. Otro estriba en que los costes de transporte suponen un 20% del coste total de las mercanc¨ªas fabricadas en las empresas del arco mediterr¨¢neo (seg¨²n la C¨¢mara de Barcelona). Y el tercero es que en el periodo 2000-2003 el tr¨¢fico de contenedores Asia-Europa aument¨® m¨¢s de un 60%, por un 30% el interno de la regi¨®n del Pac¨ªfico: el doble (datos de Ferrmed/OMC).

El ancho europeo para mercanc¨ªas empieza a balizar de forma tangible el corredor mediterr¨¢neo ferroviario, un eje en lent¨ªsima construcci¨®n que comunicar¨¢ el territorio desde Algeciras a Portbou, mediante un patchwork de tramos nuevos y tramos renovados. Un eje que podr¨¢ vehicular importaciones y exportaciones asi¨¢ticas y sudamericanas, con las del cogollo de la Europa carolingia (y hasta Estocolmo), compitiendo con Amberes, Rotterdam y Hamburgo a trav¨¦s de los puertos de Valencia, Tarragona o Barcelona. La conexi¨®n de los dos modos m¨¢s baratos, mar¨ªtimo y ferroviario, y la mayor cercan¨ªa a Asia, son las dos bazas decisivas de este corredor frente a sus contrincantes.

La dimensi¨®n europea del eje Estocolmo-Algeciras alcanza los 3.500 kil¨®metros, conecta 245 millones de ciudadanos (el 54% de habitantes de la UE) y el 66% del PIB europeo. Su dimensi¨®n mediterr¨¢nea viene pespunteada por casi la mitad de la poblaci¨®n de Espa?a, la mitad del valor a?adido agrario, el 55% de la producci¨®n industrial de bienes de consumo e intermedios, casi el 60% de las exportaciones a la UE y entre el 60% y el 65% del tr¨¢fico portuario, exceptuando el canario (Ferrmed).

El coste de la l¨ªnea se sabr¨¢ antes de final de a?o, seg¨²n prometi¨® Fomento, pero ya se estima en unos 136.000 millones; el retorno podr¨ªa alcanzar el 11% de la factura total, lo que es buen anzuelo para consorciar la financiaci¨®n p¨²blica con la privada.

El pr¨®ximo semestre deber¨ªa conseguirse su incorporaci¨®n al cat¨¢logo de grandes redes europeas de transporte que elabora la Comisi¨®n. Algo que de momento (y hasta que la UE se dote de un presupuesto de adulto en vez de uno de adolescente) dotar¨¢ al corredor de m¨¢s visibilidad y ventajas indirectas que de subvenciones directas. Y que ya se habr¨ªa conseguido si en 2003 el Gobierno de Aznar no lo hubiese apostado todo a la radialidad centralista, incurriendo en "importantes insuficiencias en el criterio de selecci¨®n", al orillar "los datos reales de transporte", como acaba de denunciar el Tribunal de Cuentas de la UE.

El doble envite del transporte ferroviario de mercanc¨ªas por ancho europeo y el del corredor mediterr¨¢neo sientan tambi¨¦n doctrina: hay que dar prioridad a la inversi¨®n en infraestructuras que sea productiva, m¨¢s que suntuosa, aunque a veces esta se disfrace de ret¨®rica igualitarista. Aeropuertos como los de Ciudad Real, que tanto coadyuvaron a la quiebra de Caja Castilla la Mancha, o como el de Lleida, que ha debido suspender vuelos tras atraer a un solo pasajero, equivalen a dilapidar el dinero. Y qu¨¦ decir de antros como el Palma Arena, o la Caja M¨¢gica y el estadio de la Peineta, en Madrid.

Hay consenso en la necesidad de examen de conciencia y de hilar fino, m¨¢s a¨²n en tiempos austeros. ?Por qu¨¦, pues, el escandaloso aguinaldo de 80 millones p¨²blicos para las concesionarias de autopistas, sobre todo de las radiales madrile?as, basado en que no han atra¨ªdo el tr¨¢fico previsto? Lo han votado CiU y el PSOE, presionados, ay criaturas, por amenazas de quiebra. El PP, con acierto, se opuso. Igual se ha vuelto liberal.