Hostales ?qu¨¦ lujo!
Las habitaciones asequibles y estilosas se multiplican al ritmo de los vuelos de bajo coste
Las tiendas de Cartier y Loewe se encuentran en una misma esquina. Un poco m¨¢s arriba, los turistas hacen cola para entrar en la Casa Batll¨®. Cruzando la calle, que no es otra que el elegante Passeig de Gr¨¤cia, la n¨¦mesis de la Barcelona burguesa y la catarsis de la Barcelona tur¨ªstica, se halla el HOTEL MANDARIN ORIENTAL (www.mandarinoriental.com; Passeig de Gr¨¤cia, 38-40; 931 51 88 88; la doble, desde 295 euros), con sus cinco estrellas, sus jardines, su spa, su mobiliario de Patricia Urquiola y su restaurante gestionado por Carmen Ruscalleda. Pura elegancia. Y en medio de todo esto, media docena de j¨®venes se congregan alrededor de una monta?a de mochilas. Gritan, se r¨ªen. Y no se han equivocado de destino. Recogen sus trastos, se dirigen al portal de una majestuosa finca del siglo XVIII y entran en ella. "Las vistas son magn¨ªficas, ?verdad? Eso es la terraza de la Batll¨®", comenta orgulloso desde la terraza del edificio Gerrad Belenes, director de marketing de EQUITY POINT (www.equity-point.com), una red de hostales creada por empresarios catalanes hace 10 a?os. Poseen establecimientos en Madrid, Girona, Londres, Lisboa, Marraquech y tres en Barcelona. Entre todos suman 1.700 camas. 400 de ellas en este hostal, repartidas en habitaciones para entre 2 y 12 personas. La gran escalinata, la di¨¢fana y pulcra sala com¨²n -equipada con una moderna cocina comunitaria, una consola Wii, ordenadores con acceso a Internet y wifi gratuito- y la espectacular terraza con vistas son las se?as de identidad del establecimiento. El precio: desde 18 euros por persona y noche.
El turismo juvenil no es lo que era. Ahora, los hostales son sitios limpios y equipados, algunos ubicados en zonas elegantes. La mejora de las instalaciones en este tipo de establecimientos en Barcelona corre paralela al incremento del turismo juvenil -un 20%- y al hecho de que el pasado a?o el volumen de pasajeros que llegaron en l¨ªneas a¨¦reas de bajo coste alcanzara el 45%. Con el boom de los hoteles low cost lleg¨® tambi¨¦n el de los hostales de alto standing.
En el 82 de la calle Tallers, CHIC AND BASIC (www.chicandbasic.com) es un aut¨¦ntico hostal de dise?o. Ocupa dos plantas de un edificio con vistas a la plaza de Castilla. Cuenta con 14 habitaciones, todas dobles. Aqu¨ª no hay literas, ni lavander¨ªa, ni hay que hacerse la cama cada ma?ana. Todo es blanco. La zona com¨²n, cuyas paredes est¨¢n decoradas con vinilos de Silvia Prada, posee todo lo necesario para prepararse el desayuno, la merienda o un tentempi¨¦ posfiesta. El punto de lectura contiene revistas de arquitectura y dise?o. Las habitaciones se limpian cada d¨ªa sin coste adicional y el cliente recibe el obsequio de una gu¨ªa de la ciudad. Cada alcoba, aunque de dimensiones reducidas, alberga ba?o y ducha en un cub¨ªculo y lavamanos a la vista. ?Y qu¨¦ gente viene aqu¨ª? La encargada del turno de ma?ana -que ejerce de oficinista, de recepcionista y de gu¨ªa tur¨ªstica- nos invita a que miremos alrededor. ?Altos y guapos? "Exacto". Y adem¨¢s, con un poder adquisitivo algo mayor que el de la media de turistas tradicionalmente asociados al hostal -la habitaci¨®n doble cuesta, seg¨²n temporada, entre 65 y 93 euros-. La media de edad es de 35 a?os.
En Equity Point cuentan que cada d¨ªa acogen a m¨¢s familias de ex mochileros que se niegan a renunciar al estilo de viaje que practicaban en sus a?os mozos. Aprovechando el orden, la limpieza y el confort actual de los hostales, vuelven a ellos, ahora con sus parejas y sus hijos. Adem¨¢s, han detectado un peculiar e incipiente fen¨®meno: los viajeros de negocios que deciden no dedicar todo el presupuesto viajero en hoteles. Se calcula que el cliente de uno de estos establecimientos destina el 10% de lo que gastar¨¢ en la ciudad en su alojamiento.
Hay cadenas que han reformulado el concepto hostal de tal manera que ya casi es irreconocible. Por ejemplo, GAT ROOMS(www.gatrooms.es), cadena que posee dos establecimientos en Ciutat Vella. Uno en la calle de Joaqu¨ªn Costa (Gat Raval) y otro en Hospital (GatXino). La aproximaci¨®n del primero se asemeja a la del Chic & Basic. Inaugurado hace 10 a?os, fue el germen de un concepto barcelon¨¦s que, como el Equity Point, fue exportado con ¨¦xito. Hoy encontramos hostales Gat en Par¨ªs y Lisboa, e incluso, un hotel de tres estrellas de la cadena en Berl¨ªn. Por su parte, Gat Xino es el colmo de la sofisticaci¨®n en este tipo de establecimientos. Decorado con mobiliario exclusivo, posee incluso una fragancia y una l¨ªnea de productos de ba?o propias. No hay literas, pero tampoco hay servicio de habitaciones. No hay restaurante, pero hay una terraza enorme con chill out y una suite. ?Un hostal con suite! En el Xino, una habitaci¨®n doble cuesta entre 60 y 120 euros; en El Raval se puede pasar la noche por 40 euros.
El URBANY (www.barcelonaurbany.com; avenida Meridiana, 97; 932 45 84 14) es un hostal inaugurado en 2008 (84 habitaciones, 400 camas) que posee algunas peculiaridades. El edificio que lo alberga es de vocaci¨®n sostenible y comparte espacio con el centenario Orfe¨® Martinenc, cuyas salas pueden ser reservadas. Adem¨¢s, en el edificio adyacente se encuentra el club deportivo Vintr¨®, a cuyas instalaciones pueden acceder de forma gratuita los clientes del hostal. "Tenemos mejor gimnasio y piscina que el Hilton", bromea el director Jordi Lacruz. Urbany, adem¨¢s, apuesta por la tecnolog¨ªa, ofreciendo descarga de mapas y gu¨ªas de la ciudad mediante Bluetooth. Tambi¨¦n cuenta en su zona com¨²n con lo que se hace llamar la primera red social en el punto de venta, un dispositivo con aspecto de iPhone gigante ideado por Knowhouse y mediante el cual se fomentan las relaciones entre los hu¨¦spedes.
En MELON DISTRIC (www.melondistrict.com), en Poble Nou, nos hallamos con la afrenta definitiva: un hostal con piscina. No una. Cuatro. La empresa que lo regenta tiene dos hostales-residencia de estudiantes, uno de tama?o humano en Poble Sec (Avinguda del Paral¡¤lel 101), y este complejo de cuatro torres en lo que se ha llamado Distrito 22@ (Sancho de ?vila, 22). Tiene 500 habitaciones, lavander¨ªa en el s¨®tano, piscinas en cada azotea, cocina y zona com¨²n con televisor de pantalla plana en cada planta, wifi en todos los edificios e Internet por cable en cada habitaci¨®n. Pronto esperan poder acoger tambi¨¦n un gimnasio y un bar, adem¨¢s de exportar el concepto a Par¨ªs y Praga.
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