Palomares pide la limpieza inmediata de la zona contaminada

45 a?os despu¨¦s del accidente nuclear en Palomares no se ha movido ni un grano de arena para descontaminar el suelo de esta pedan¨ªa de Cuevas del Almanzora (Almer¨ªa) sobre el que cayeron dos bombas -potentes como las de Hiroshima- transportadas por un B-52 de EE UU que choc¨® en el aire con su nave nodriza. El archivo sobre el siniestro, conocido como Caj¨®n de Palomares -en alusi¨®n al lugar en el que ha permanecido guardado durante d¨¦cadas-, no sali¨® de su escondite hasta 1996 y, desde entonces, Cuevas del Almanzora lucha por volver a la normalidad. Pero la paciencia tiene un l¨ªmite.

A cinco meses de las elecciones municipales, el alcalde y senador del PP, Jes¨²s Caicedo, anunci¨® ayer el "fin de la tregua" dada a la administraci¨®n competente y su firme intenci¨®n de pasar a la acci¨®n. En enero ha concertado una cita con la embajada estadounidense en Espa?a y en ella solicitar¨¢ que el pa¨ªs causante del desastre asuma su responsabilidad y cumpla con lo pactado: la descontaminaci¨®n de las hect¨¢reas afectadas, cuyo coste ronda los 31 millones de euros, y la retirada del plutonio y americio contaminantes a cementerios nucleares de aquel pa¨ªs.

Dos meses de margen

"Hemos esperado este tiempo mientras todo el mundo ha opinado, pero ya se ha acabado", amenaz¨® el regidor, quien exige conocer las fechas de inicio y finalizaci¨®n de la limpieza. "Nos da igual quien lo pague, pero que lo limpien ya" y concede un margen de dos meses a la Administraci¨®n central para dar una respuesta.

El Centro de Investigaciones Energ¨¦ticas, Medioambientales y Tecnol¨®gicas (Ciemat) culmin¨® hace dos a?os un informe sobre radiactividad y ahora trabaja en el Plan de Rehabilitaci¨®n definitivo para iniciar los trabajos de limpieza, cuyo borrador se aprob¨® en mayo por el Pleno del Consejo de Seguridad Nuclear. Ninguno de estos documentos, ni los informes anuales que se realizan a la poblaci¨®n de Palomares para medir los ¨ªndices de contaminaci¨®n, han sido facilitados al Ayuntamiento.

"Queremos ser interlocutores oficiales", reivindica tambi¨¦n Igor Parra, de Ecologistas en Acci¨®n, que ha solicitado, sin ¨¦xito, al embajador de EE UU y al Gobierno el plan de descontaminaci¨®n.