Leer con los sentidos

La oscuridad alimenta las peque?as luces. Cuando el mundo de la edici¨®n en papel tiembla ante la amenaza exterminadora del libro digital, un peque?o sector est¨¢ viviendo un crecimiento inesperado: la literatura ilustrada para adultos. Numerosos editores, ilustradores y libreros coinciden en que el futuro del papel est¨¢ ah¨ª, en esa edici¨®n que a¨²na dos lenguajes, el texto y la imagen, para crear una obra distinta y, frente a la asepsia de la pantalla, fuertemente sensorial. A las dos editoriales de referencia para ilustrados que hay en Espa?a, Galaxia Gutenberg y Media Vaca, se han sumado, en los ¨²ltimos a?os, nuevas editoriales, mientras que otras ya existentes empiezan a abrir colecciones. La situaci¨®n es sorprendente: ?a qui¨¦n se le ocurre con la que est¨¢ cayendo abrir una editorial de libros ilustrados? ?Los libros con ilustraciones no estaban destinados a los ni?os? ?C¨®mo es posible que tengan ahora tan buena acogida entre los mayores? ?Qu¨¦ es exactamente un libro ilustrado?

"Una de las claves del ¨¦xito es la calidad de la edici¨®n. La muerte del papel solo afectar¨¢ a los productos de consumo r¨¢pido, de usar y tirar", sostiene Jes¨²s Moreno

A veces para describir algo cuya definici¨®n no resulta sencilla es muy ¨²til empezar enumerando lo que no es. Un libro ilustrado no es una fotonovela; no es un texto cl¨¢sico adornado con dibujos; no es un objeto decorativo para la mesa de centro del sal¨®n o la sala de espera del dentista; no est¨¢ destinado a quienes tienen dificultades con la lectura; no tiene una misi¨®n educadora.

Para describir algo cuya definici¨®n no resulta sencilla tambi¨¦n es muy ¨²til recurrir a las personas que gustan de ese objeto. ?C¨®mo son los compradores de libros ilustrados?

Personas con los sentidos siempre hambrientos. Con un apetito voraz para la belleza, el conocimiento, el placer, las emociones. Que esperan sorpresas al abrir un libro. Que no tienen miedo a las aventuras intelectuales y sensoriales. Que no ponen el grito en el cielo porque la ilustraci¨®n les lleva, en una lectura conocida, hacia caminos desconocidos. Que se r¨ªen de los encasillamientos en g¨¦nero, edades, lenguaje... Que adoran la felicidad indescriptible que produce un descubrimiento. En fin, personas tan libres que podr¨ªan parecer locas. Para ellas son los libros ilustrados.

El n¨²mero de esos lectores que tambi¨¦n son espectadores ha crecido en los ¨²ltimos tiempos. El primer ¨¦xito de la editorial N¨®rdica, que inici¨® su andadura en 2006, fue El fest¨ªn de Babette, de Isak Dinesen, con ilustraciones de Noem¨ª Villamuza. La editorial Perif¨¦rica acaba de inaugurar una colecci¨®n de ilustrados a la que ha bautizado La Hora Feliz e Impedimenta estrena la suya en febrero con Diccionario de Literatura para Esnobs. A estas editoriales se unen otras dedicadas ¨²nicamente a ilustrados como Libros del Zorro Rojo, A Buen Paso, etc¨¦tera. ?C¨®mo es posible semejante entusiasmo en tiempos tan fr¨¢giles para la edici¨®n? Todo es muy misterioso.

Editores, ilustradores y libreros coinciden en varios puntos: la pasi¨®n por el libro como objeto; la convicci¨®n de que la ilustraci¨®n ofrece nuevas posibilidades de lectura; la unanimidad en que lo ¨²nico importante es un texto y una ilustraci¨®n potentes, lo llamen como lo llamen: novela gr¨¢fica, novela ilustrada para adultos o ¨¢lbum. Nadie, sea peque?o o grande, leer¨ªa un libro idiota. Todos, sean ni?os o viejos, se lo pasan de maravilla con un buen libro. ?Es El pato y la muerte, de Wolf Erlbruch, un ¨¢lbum solo para ni?os? ?Es Rebeli¨®n en la granja, de George Orwell, un libro solo para adultos?

El riesgo y el cuidado por el libro como objeto, lo que Juli¨¢n Rodr¨ªguez, editor de Perif¨¦rica, denomina el fetichismo del libro, son los pilares de los libros ilustrados. De ambos sabe mucho Vicente Ferrer, que comparte con sus lectores la curiosidad y el desprecio hacia el peligro. El fascinante cat¨¢logo de su editorial, Media Vaca, ha estimulado el surgimiento de otros editores, aunque por su car¨¢cter personal¨ªsimo no haya creado escuela. "Inventamos libros muy ilustrados dirigidos a lectores de todas las edades. No me interesa editar un libro que ya existe si no es para hacer con ¨¦l algo distinto. Tampoco es correcto identificar novela y libro. El libro es una suma de cosas, no es solo un texto escrito. Importa la tipograf¨ªa, las ilustraciones, los m¨¢rgenes, la elecci¨®n del papel, el formato, la encuadernaci¨®n, el peso, la manejabilidad y hasta el olor del papel y la tinta". Olor, tacto, visi¨®n... El libro como imperio de los sentidos.

En cuanto al riesgo, depende del editor. "Hay que inventarse los libros que no existen para que la gente que no existe exista", dice Ferrer. Diego Moreno, responsable de N¨®rdica, habla con entusiasmo de uno de sus ¨²ltimos trabajos: una edici¨®n de tres cuentos de Borges junto a La Metamorfosis, de Kafka, ilustrada por Ver¨®nica Moretta. Ensayos visuales que convierten la lectura en una serie de mapas que conducen al mundo de ambos autores. "Mar¨ªa Kodama nos regal¨® los derechos porque el sue?o de Borges era estar en un mismo volumen que Kafka. En tres d¨ªas se agot¨®".

Galaxia Gutenberg, con sus extraordinarios y caros libros ilustrados, ha sido una referencia esencial para las editoriales que han surgido en la ¨²ltima d¨¦cada. En 1994 public¨® Las aventuras de Pinocho ilustradas por Antonio Saura y desde entonces hasta hoy, con la publicaci¨®n de Las aventuras de Huckleberry Finn ilustradas por Santi Moix, su colecci¨®n ha unido grandes obras literarias con grandes artistas pl¨¢sticos. Tras sus pasos, tanto N¨®rdica como Libros del Zorro Rojo editan fundamentalmente cl¨¢sicos, pero a un precio asequible. "Los textos son potentes, las ediciones ¨ªntegras y los ilustradores aportan una lectura propia de manera que el lector no pueda separar el texto de las im¨¢genes. Yo ya no puedo leer Bartleby, el escribiente sin las ilustraciones de Javier Zabala", cuenta Moreno.

?C¨®mo lee el ilustrador para ense?arnos la historia de otra manera?

Zabala, premio Nacional de Ilustraci¨®n, entre otros galardones, ha ilustrado libros para ni?os, para j¨®venes y para adultos. "No creo en las fronteras. La ilustraci¨®n es un arte y el ilustrador crea ambientes, sugiere... La diferencia con la pintura no es de t¨¦cnica ni de libertad creativa, sino que se halla en la carga narrativa. Yo soy muy intuitivo: leo el libro y realizo el storyboard, que es como un mapa de la historia, un GPS para el trabajo. Luego intento olvidar el texto para que no pese sobre m¨ª como una losa. Parto de una falta de respeto al texto bien entendida, sin traicionarlo ni pisarlo, pero me gusta que el dibujo me lleve por otros derroteros y que sea el lector quien d¨¦ la ¨²ltima pincelada".

El camino de los ilustrados est¨¢ repleto de premios. Casi todos los libros de Galaxia Gutenberg han recibido el Premio al Libro Mejor Editado. Las flores del mal, la edici¨®n ilustrada por el belga Louis Joos de Baudelaire, fue el libro de poes¨ªa m¨¢s vendido en 2007. El artista catal¨¢n Arnal Ballester ha recibido este a?o el Premio Junceda de Ilustraci¨®n por su trabajo para El gran zoo, de Nicol¨¢s Guill¨¦n. Una temporada en Calcuta, de Llu?sot, fue la primera obra espa?ola que recibi¨® el Premio al Libro de No Ficci¨®n en la Feria de Bolonia...

Los ilustrados se han instalado tan c¨®modamente en las entregas de premios como en lugares tan insospechados como las librer¨ªas de c¨®mics. Jes¨²s Moreno, due?o del espacio y de la editorial Sins Entido, que ha recibido este a?o el Premio a la Mejor Librer¨ªa especializada en C¨®mic, es testigo de la demanda creciente. "Los g¨¦neros ya no tienen sentido. Una de las claves del ¨¦xito del libro ilustrado es la calidad de la edici¨®n. La muerte del papel solo afectar¨¢ a los productos de consumo r¨¢pido, de usar y tirar. Creo que el concepto de "novela gr¨¢fica" englobar¨¢ en el futuro el ilustrado".

El editor de Libros del Zorro Rojo comparte esa conexi¨®n entre el auge de la novela gr¨¢fica y del libro ilustrado. "El p¨²blico del c¨®mic y de la novela gr¨¢fica est¨¢ acostumbrado a una relaci¨®n con la imagen que le hace receptivo a los ilustrados", dice Fernando Garc¨ªa Schnetzer. No es extra?o que los propios editores sean, a menudo, ilustradores o est¨¦n cercanos. "Mi educaci¨®n sentimental, m¨¢s que ling¨¹¨ªstica, fue visual. Antes de editar libros, dibujaba c¨®mics", explica Enrique Redel, de Impedimenta.

Vicente Ferrer, que adem¨¢s de editor es ilustrador, ve el panorama con el escepticismo y la pasi¨®n del resistente: "Dedicarse a esto no es negocio, se hace por vocaci¨®n. Resistir es vencer, y nosotros estamos venciendo cada d¨ªa". Y se r¨ªe. -

La divina comedia, de Dante, con ilustraciones de Miquel Barcel¨®. Galaxia Gutenberg. Las aventuras de Huckleberry Finn, de Mark Twain, con ilustraciones de Santi Moix. Galaxia Gutenberg. Panam¨¢ o las aventuras de mis siete t¨ªos, de Blaise Cendrars, con ilustraciones de Fabio Zimbres. Media Vaca. Libro de las preguntas, de Pablo Neruda, con ilustraciones de Isidro Ferrer. Media Vaca. Rebeli¨®n en la granja, de George Orwell, con ilustraciones de Ralph Steadman. Libros del Zorro Rojo. El gran zoo, de Nicol¨¢s Guill¨¦n, con ilustraciones de Arnal Ballester. Libros del Zorro Rojo. El barco ebrio y otros poemas, de Arthur Rimbaud, con ilustraciones de Alicia Mart¨ªnez. N¨®rdica. Kafka y Borges, con ilustraciones de Ver¨®nica Moretta. N¨®rdica. Coplas a la muerte de mi padre, de Jorge Manrique, con ilustraciones de Juan Carlos Mestre y m¨²sica de Amancio Prada. Casariego. La declaraci¨®n de George Silverman, de Charles Dickens, con ilustraciones de Ricardo Cavolo. Perif¨¦rica.