Los recursos de funcionarios bloquean el Tribunal Superior de Justicia

Cuando el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, anunci¨® el pasado 12 de mayo que iba a bajar el 5% de los sueldos a los funcionarios, los magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) se dieron cuenta de que la medida les iba a traer problemas. Y muchos. No se estaban preocupando solamente por su n¨®mina, que tambi¨¦n se ver¨ªa mermada, sino porque tendr¨ªan que ver todas las demandas y los recursos que plantearan los trabajadores p¨²blicos de toda Espa?a. Eso supone que en la actualidad las salas de lo contencioso-administrativo del este tribunal est¨¢n colapsadas de casos y que los jueces no dan abasto a estudiarlos, seg¨²n afirman fuentes judiciales.

La raz¨®n de que el Tribunal Superior madrile?o est¨¦ sobrepasado de asuntos es que centraliza las demandas de todo el territorio nacional, incluidas las de las Embajadas en pa¨ªses extranjeros.

Es decir, si un funcionario cree que la bajada de su sueldo es ilegal tiene que recurrir primero al organismo que ha dictado la reducci¨®n de su salario. Como en principio su solicitud ser¨¢ desestimada en primera instancia, deber¨¢ acudir a la justicia, en este caso al tribunal contencioso-administrativo. Y ah¨ª es donde entran en juego los jueces madrile?os. Como la capital es la sede de todos los organismos centrales, en especial los Ministerios y las empresas p¨²blicas, todo aquel funcionario que quiera presentar un recurso debe interponer la demanda en Madrid.

Por ejemplo: un polic¨ªa nacional que trabaje en Fuengirola (M¨¢laga) deber¨¢ recurrir ante el Ministerio del Interior, cuya sede central est¨¢ en la capital. Consecuencia: su caso lo estudia el TSJM. Aparte de la Administraci¨®n central, tambi¨¦n estudian las demandas de los funcionarios del Gobierno regional y de los 179 Ayuntamientos de la regi¨®n. Los restantes depender¨ªan de los Tribunales Superiores de la comunidad aut¨®noma correspondiente.

"Solo con los recursos de los guardias civiles, los polic¨ªas nacionales y los militares tenemos un n¨²mero muy elevado de demandas, lo que nos supone un tremendo esfuerzo para sacar adelante todo el trabajo", reconoce el responsable de las secciones de lo contencioso-administrativo y n¨²mero dos del TSJM, Gerardo Mart¨ªnez Trist¨¢n. Este magistrado tiene a su cargo a 52 jueces, casi el doble de los 33 que hay en la sala 3? del Tribunal Supremo o los 40 que trabajan en la Audiencia Nacional.Zapatero anunci¨® que la bajada del sueldo de los funcionarios en 2010 y la congelaci¨®n en 2011 supondr¨ªa un ahorro de unos 4.000 millones de euros para las arcas p¨²blicas. Y su aplicaci¨®n oscilar¨ªa en funci¨®n de las categor¨ªas laborales. Seg¨²n se cobrara m¨¢s, los descensos en las n¨®minas ser¨ªan m¨¢s pronunciados.

En el caso del presidente, los ministros y los secretarios de Estado llegar¨ªan hasta el 15%. La medida no se empez¨® a aplicar hasta el verano, lo que hizo que gran parte del a?o fuera relativamente tranquila para los jueces de lo contencioso-administrativo. Tras el par¨®n estival y las llegadas de las primeras n¨®minas con las rebajas salariales llegaron los problemas para el TSJM. En lugar de las 1.900 o 2.000 demandas que reciben las 10 secciones de este tribunal por mes, se dispararon hasta superar ampliamente las 3.000, seg¨²n explicaron fuentes judiciales a este peri¨®dico. En algunos casos rond¨® las 4.000.

Adem¨¢s, algunos sindicatos hicieron demandas tipo y animaron a sus afiliados a que recurrieran una medida que consideraron ilegal y que vulneraba ampliamente los derechos laborales adquiridos.

Gerardo Mart¨ªnez Trist¨¢n y su equipo han propuesto una soluci¨®n para acabar con el colapso de papeles que entran en su secci¨®n. A trav¨¦s de un modelo de sentencia pretenden acabar con duplicidades y sentencias contradictorias. Para ello, unificar¨¢n toda la doctrina tras estudiar los casos m¨¢s significativos, aplicar las normas vigentes y analizar la jurisprudencia actualizada. Una vez firmado ese fallo tipo, se har¨¢ extensible a todos los funcionarios de un mismo organismo o los que planteen principios jur¨ªdicos similares. Los primeros resultados se podr¨ªan ver en febrero, seg¨²n fuentes judiciales, cuando se espera que haya terminado la avalancha de demandas de los ¨²ltimos meses. "Si se plantea una sentencia muy bien fundamentada, con una explicaci¨®n muy clara, el recurrente muchas veces desiste de acudir al Tribunal Supremo. Adem¨¢s, resulta bastante caro ese recurso y suele llevar mucho tiempo", asegura Mart¨ªnez Trist¨¢n.