Tres jefes para echar el cierre a una historia criminal

Llegados a este punto, la pregunta es: ?Qui¨¦n en la ETA de hoy en d¨ªa tiene la suficiente autoridad y carisma para echar definitivamente la persiana a 51 a?os de cr¨ªmenes? La tesis es que la direcci¨®n colegiada de la banda est¨¢ formada por dos mujeres y un hombre: Iratxe Sorzabal, Izaskun Lesaka y David Pla. Ninguno de ellos tiene peso espec¨ªfico suficiente en el mundo radical. Por ello, los expertos antiterroristas est¨¢n casi seguros de que la vieja guardia a¨²n en libertad ha vuelto para pilotar, o al menos para asesorar, un final escalonado de ETA, que sigue considerando que dejar de matar sin obtener nada a cambio es rendirse.

Los servicios antiterroristas consideran que la banda ha recuperado a algunos veteranos para formar una especie de comit¨¦ asesor pol¨ªtico de la actual direcci¨®n etarra, cuyo objetivo ser¨ªa proponer y dar los pasos hacia el cierre de la persiana. Lo creen desde que comprobaron que, durante los meses finales de 2010, ETA consult¨® "virtualmente" entre militantes c¨®mo ver¨ªan el que se decretase "un alto el fuego permanente y verificable".

ETA se ha reorganizado en Francia durante los ¨²ltimos meses

Los expertos creen que el par¨®n durar¨¢ al menos hasta las pr¨®ximas elecciones

Al frente de ese comit¨¦ asesor siempre se cita el mismo nombre: el hist¨®rico y determinante Jos¨¦ Antonio Urrutikoetxea, Josu Ternera. "Pero informaci¨®n verificable de qui¨¦nes mandan en ETA ahora mismo no hay, solo especulaciones con base en otros datos", advierten altos cargos antiterroristas, que ayer mostraban su decepci¨®n por el comunicado: esperaban algo m¨¢s, pese a su natural desconfianza en la banda.

Lo que ahora quieren ver los expertos antiterroristas es qu¨¦ pasa en una organizaci¨®n te¨®ricamente dominada por dos mujeres -que arribaron al poder terrorista tras la captura de "el ¨²ltimo gran general de ETA": Mikel Carrera, Ata- y un hombre, Pla, a quien se identifica inicialmente como el lector del comunicado en castellano de ayer. El Gobierno est¨¢ convencido de que ninguno de los tres tiene carisma -"ni valor", insisten- para cerrar ETA.

Iratxe Sorzabal, de 38 a?os, natural de Ir¨²n (Guip¨²zcoa), milita en ETA desde los noventa, en los que se le atribuye su participaci¨®n en tres atentados mortales. Fue detenida en 2001, pero fue absuelta, lo que la llev¨® a la portavoc¨ªa de Gestoras Proamnist¨ªa. Lesaka lleva a?os ocupando puestos importantes en el aparato pol¨ªtico de ETA. Imputada por pertenecer a Haika y Segi, se encuentra huida desde el a?o 2005. Hay constancia policial de que es la autora de varios comunicados de ETA y de que ha dado ¨®rdenes a comandos operativos.

Pla, de 34 a?os, es hoy d¨ªa un dirigente clave del aparato pol¨ªtico de la banda, ya que ha tenido estrechas relaciones con las organizaciones del entorno etarra, de las que fue dirigente en los noventa. Incluso fue candidato a las elecciones municipales de 1995 por Herri Batasuna.

Los analistas de Interior est¨¢n persuadidos de que la banda est¨¢ sumergida en un proceso de reorganizaci¨®n. El recent¨ªsimo robo de 6.000 tarjetas y un n¨²mero elevado de impresoras especiales en la empresa Impuls en Bourg de P¨¨age (Francia) as¨ª lo demuestra -ETA se esforz¨® en que se supiera que el robo era obra suya-, aunque tampoco saben muy bien para qu¨¦ quieren esas tarjetas de cr¨¦dito en blanco. Eso para la banda no era una acci¨®n armada ofensiva, es decir, el tipo de ataque que se hab¨ªa comprometido a no perpetrar en su anterior comunicado. Ahora habr¨¢ que comprobar si contin¨²a con su actividad en Francia o se produce un par¨®n, si realmente el alto el fuego es "general" e incluye todas las actividades criminales de la banda, desde los robos de coches hasta el cobro del impuesto revolucionario.

Para los mandos terroristas, la actividad desplegada hasta este mismo mes en Francia demuestra que "ETA no tiene voluntad de desaparecer". No quiere, pero todas las fuentes coinciden en que la banda se encuentra en un momento de m¨¢xima debilidad y en que necesita "ox¨ªgeno". Y tambi¨¦n est¨¢n determinados a no aflojar ni un ¨¢pice la presi¨®n policial que ha llevado a ETA a esta debilidad y a este comunicado. Todas las fuentes coinciden en que, pase lo que pase, no habr¨¢ atentados al menos hasta las elecciones, una vez que se compruebe si la izquierda radical, hasta ahora pegada a ETA, puede presentarse o no a los comicios.