Cierre por reformas en el sector agrario
El valor de la producci¨®n de la agricultura espa?ola en 2010 fue inferior al de hace una d¨¦cada
En 2007, en un alarde de euforia con la subida de los precios de las materias primas, los responsables de Agricultura se fijaron llegar al final de la legislatura con una producci¨®n final agraria (PFA) por un valor superior a los 50.000 millones de euros. El reto ten¨ªa tres patas: pol¨ªtica de apoyo a las explotaciones para aumentar su productividad, la mejora de los mecanismos de los mercados y lograr un mayor valor a?adido a los productos agrarios.
Frente a ese objetivo, la realidad es que el valor de la PFA ha ido a menos. Se han reducido los cultivos importantes, han cerrado explotaciones ganaderas y el precio de los productos en origen ha ca¨ªdo. En 2001, el valor de la PFA fue de 38.600 millones de euros a precios corrientes. En 2010, seg¨²n datos oficiales, ese valor ha ca¨ªdo a solo 38.300 millones. La participaci¨®n del sector agrario en el producto interior bruto ha bajado hasta suponer el 2,2%, y al 4,11% si se computa la producci¨®n alimentaria.
La baja rentabilidad fuerza el abandono de las explotaciones ganaderas
El comportamiento a la baja del valor de la PFA tiene algunas de sus causas en unas estructuras de producci¨®n y comercializaci¨®n deficientes.
Pero a ese escenario negativo se ha sumado en la ¨²ltima d¨¦cada la aplicaci¨®n de la pol¨ªtica agr¨ªcola com¨²n (PAC), en una doble direcci¨®n. Por un lado, con la reforma de una serie de organizaciones comunes de mercado (OCM) y, por otra parte, con las propias reformas de la PAC.
En materia de producciones, con los excedentes o el coste elevado como justificante, Bruselas impuso las reformas de las OCM importantes por su valor como remolacha, algod¨®n o tabaco. La aplicaci¨®n de las mismas supuso bajar la superficie del cultivo de remolacha de m¨¢s de 100.000 a 46.000 hect¨¢reas, y la cuota de producci¨®n de un mill¨®n a menos de 500.000 toneladas de az¨²car. Hoy, los precios se han disparado por la falta de stocks. Para el algod¨®n, la reforma supuso bajar de 90.000 a unas 55.000 hect¨¢reas, y de 15.000 a la mitad, en el tabaco.
La actual situaci¨®n del sector agrario responde igualmente a las reformas de la PAC impuestas en esta d¨¦cada basadas en recortes o eliminaci¨®n de los mecanismos para la regulaci¨®n de los mercados. Esta pol¨ªtica comunitaria de puertas adentro, junto con la firma de acuerdos bilaterales con terceros pa¨ªses para facilitar las importaciones, se ha traducido en unos mercados con menos regulaci¨®n, volatilidad y ca¨ªdas en los precios, salvo momentos coyunturales, todo ello agravado por el aumento de los costes de producci¨®n.
Esta p¨¦rdida de rentabilidad en el conjunto del sector agrario no se ha traducido en recortes de producciones agr¨ªcolas como el olivar, el vi?edo o las frutas y hortalizas, ante la imposibilidad de cambiar de cultivos de una campa?a para otra. Sin embargo, s¨ª se ha reflejado en las explotaciones ganaderas, donde la situaci¨®n se ha agravado en 2010 por el aumento en los precios de los cereales. Los ganaderos cierran.
Los precios ruinosos de la leche supusieron pasar en la ¨²ltima d¨¦cada de 100.00 a unas 24.000 explotaciones, sin que se cubra la cuota de 6,3 millones de toneladas. En el ovino, las explotaciones han pasado de 240.000 a 118.000; el censo, de m¨¢s de 25 a menos de 18 millones de cabezas, y la producci¨®n, de 240.000 a 121.000 toneladas. En el porcino, las explotaciones pasaron de m¨¢s de 200.00 a unas 90.000. Este ser¨ªa el principal subsector ganadero donde el cierre de explotaciones se ha sustituido por macrogranjas con aumento de producci¨®n de 2,5 a 3,3 millones de toneladas, aunque su valor ha pasado de 4.791 millones en 2006 a 4.410 millones en 2010. En el vacuno de carne se pas¨® de unas 100.000 a unas 50.000 explotaciones, y la producci¨®n, de 715.000 a menos de 580.000 toneladas. El mismo fen¨®meno se repite en avicultura, aunque este caso es posible ajustar censos en cuesti¨®n de meses en funci¨®n de los precios.
En el conjunto de las caba?as ganaderas hay una cifra que refleja la evoluci¨®n del sector. El valor de la producci¨®n en 2006 fue de 14.000 millones y de solo 12.600 en 2010.
Desde el sector agrario se alerta a la UE sobre la situaci¨®n de cierres, ca¨ªdas de producci¨®n y del riesgo de una mayor dependencia exterior frente al primer objetivo de la implantaci¨®n de la PAC hace medio siglo. -
Caen los precios de la tierra
La evoluci¨®n de los precios de la tierra en las ¨²ltimas dos d¨¦cadas ha estado muy ligada a las reformas de la pol¨ªtica agr¨ªcola com¨²n, as¨ª como al comportamiento de los mercados y, en definitiva, a la renta de las explotaciones. La situaci¨®n actual no es una excepci¨®n. Sobre la mesa est¨¢n los interrogantes sobre el futuro de las ayudas PAC m¨¢s all¨¢ de 2013. Con la excepci¨®n coyuntural de los cereales, las producciones m¨¢s importantes se venden al l¨ªmite de la rentabilidad y todo ello se refleja en los precios de la tierra para usos agrarios.
Seg¨²n los datos manejados por la Administraci¨®n, en 2009 los precios de la tierra experimentaron un descenso del 4,6%, lo que supone aumentar la l¨ªnea de ca¨ªda del a?o anterior con un descenso del 0,9% tras un largo periodo de subidas. Para 2010, los datos iniciales no suponen cambios.
El precio medio de una hect¨¢rea para usos agrarios en Espa?a en 2009 fue de 10.465 euros frente a los 11.070 euros de 2007. En un pa¨ªs donde el valor de una hect¨¢rea va desde los 265.000 euros por una platanera a los poco m¨¢s de 700 euros de un pastizal de secano en Arag¨®n, el valor medio oficial tiene escasa significaci¨®n a efectos de saber cu¨¢nto vale una hect¨¢rea de tierra. Para tener una idea m¨¢s cercana sobre el valor de la tierra, se pod¨ªa hablar de una hect¨¢rea de secano para cereal con rendimientos medios por unos 7.000 euros, una de regad¨ªo de labor a unos 19.000 euros, una de vi?edo medio a 15.000 euros o un olivar de secano a unos 21.000 euros en zonas de producci¨®n media. Lo m¨¢s significativo de los datos de la encuesta sobre los precios de la tierra en 2009 es la bajada de las cotizaciones de todas las superficies y de todas las producciones en todas las autonom¨ªas, con la excepci¨®n del Pa¨ªs Vasco. -
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