El abec¨¦ de M¨¦xico DF
De la plaza de la Constituci¨®n a la Universidad, visitas esenciales en la capital
El Distrito Federal no es una ciudad, sino m¨¢s bien la suma de muchas. Una urbe donde conviven casi todos los sabores del pa¨ªs, varias de sus fisonom¨ªas, idiosincrasias y cosmovisiones. Debajo de esa suerte de indefinici¨®n con la que se ve a distancia se halla una ciudad cordial y contrastada, sutil e intensa, bien puesta en su sitio, pero a la vez como si no fuese a continuar en pie al d¨ªa siguiente. Sitio elegido por pu?os de escritores y artistas para sus quehaceres debido a esa extra?a anarqu¨ªa con la que atrapa; lugar abierto a constantes est¨ªmulos, pero tambi¨¦n contenedor secreto de rincones de silencio. El DF puede parecer desordenado, pero ya entre su gente descubriremos la amabilidad y parsimonia de una ciudad tapizada por otras ciudades. Aqu¨ª, en esta ruta, una probadita de sus contrastes y gentilezas.
Desde la gran explanada
Contemplar la plaza de la Constituci¨®n provoca una suerte de espejismo que nos hace pensar en la grandeza de Tenochtitlan, capital de los mexicas. A sus flancos se encuentran algunos de los edificios m¨¢s importantes de M¨¦xico: la catedral Metropolitana, dedicada a la Asunci¨®n de la Virgen Mar¨ªa, una de las principales obras del arte mexicano e hispanoamericano; y el Palacio Nacional, construido en 1522 como segunda residencia de Hern¨¢n Cort¨¦s sobre el palacio de Moctezuma Xocoyotzin y donde Diego Rivera pint¨® algunos de sus murales emblem¨¢ticos. En la esquina noreste de la plaza se encuentran la zona arqueol¨®gica (declarada por la Unesco patrimonio mundial) del Templo Mayor (centro dominante de la vida religiosa de los aztecas de M¨¦xico-Tenochtitlan) y el museo que la resguarda.
Caminando por el centro hist¨®rico tropezaremos con sus muchas maravillas, como el Museo del Estanquillo (Isabel la Cat¨®lica, 26), que aloja la colecci¨®n personal de pinturas, fotograf¨ªas, juguetes, ¨¢lbumes, calendarios y libros del escritor Carlos Monsiv¨¢is, quien durante m¨¢s de 30 a?os se dedic¨® al coleccionismo de objetos de la cultura popular mexicana. Otro tropiezo afortunado es el mercado de la Ciudadela, donde artesanos manufacturan piezas de todas las regiones del pa¨ªs, como sarapes coloridos, joyer¨ªa en metales preciosos, cer¨¢mica, cester¨ªa, vidrio soplado, cuero y madera. Adem¨¢s es un buen sitio para practicar la interesante costumbre del regateo.
El siguiente punto es la colonia Roma-Condesa, donde hallaremos bares, restaurantes, librer¨ªas, galer¨ªas de arte y sitios salpicados de estarcidos y grafitis alternativos. Tres recomendaciones: la exquisita comida yucateca de la cantina Xel-Ha; el caf¨¦ de la librer¨ªa Rosario Castellanos para extender la sobremesa rodeados de literatura; y, de noche, el bar Lilit, virtud y vicio con su atm¨®sfera que transpira arte en todos sus rincones y nos acerca a experiencias gastron¨®micas, est¨¦ticas y et¨ªlicas.
Maximiliano y Carlota
Volviendo a la vida diurna, hay que visitar el castillo de Chapultepec; construido por el virrey Bernardo de G¨¢lvez y Madrid como su casa de veraneo, sus muros trasminan la historia de los siglos: sirvi¨® como Archivo General del Reino de la Nueva Espa?a, fue sede del Colegio Militar y es el lugar m¨¢s simb¨®lico de la guerra contra la intervenci¨®n estadounidense de 1847. Tambi¨¦n fue residencia del emperador Maximiliano I de M¨¦xico y su esposa Carlota, quienes amueblaron el recinto con arte europeo de la ¨¦poca y muchos otros finos art¨ªculos que siguen exhibi¨¦ndose hoy d¨ªa.
Una avenida conecta al castillo con el Palacio Nacional: el paseo de la Reforma. V¨ªa ideada por el mismo Maximiliano para tener acceso directo al centro neur¨¢lgico de su imperio, la Reforma conserva el dise?o de los imponentes bulevares franceses. En mitad de esta avenida se encuentra el emblem¨¢tico monumento conocido como el ?ngel de la Independencia, inaugurado en 1910 para conmemorar el centenario de la independencia de M¨¦xico e icono actual de la ciudad y lugar de festejos nacionales.
Nada m¨¢s bajar del cerro de Chapultepec se encuentra el Museo de Antropolog¨ªa e Historia, quiz¨¢ el recinto antropol¨®gico m¨¢s importante de M¨¦xico y Am¨¦rica Latina, concebido para albergar el legado arqueol¨®gico de los pueblos de antes de la llegada de los espa?oles, as¨ª como para dar cuenta de la diversidad ¨¦tnica del pa¨ªs. Continuando con la ruta hacia el sur encontraremos el Polyforum Siqueiros, donde el muralista David Alfaro Siqueiros dej¨® impresa la Marcha de la Humanidad, considerado el mural m¨¢s grande del mundo.
Coyoac¨¢n
La ruta nos lleva ahora a Coyoac¨¢n, sitio donde convergen historia, cultura y arquitectura. Sus museos, iglesias, parques y cafecitos invitan a pl¨¢cidos paseos vespertinos. Caminar por la plaza del Centenario, sentarse en las banquitas del jard¨ªn de la Conchita con un arom¨¢tico caf¨¦ del Jarocho y dejarse estar en el ambiente de globeros, puestos de elotes, danzas prehisp¨¢nicas y tambores es una experiencia que no debe perderse. En el coraz¨®n de Coyoac¨¢n se encuentra la Casa Azul de Frida Kahlo, donde naci¨®, vivi¨® y muri¨® la pintora. Ah¨ª se encuentran varias de sus m¨¢s famosas obras y muchos de sus objetos personales.
Por ¨²ltimo, y para cerrar esta estrecha y apresurada ruta, no pierdan la oportunidad de pasear por los jardines de la Universidad Nacional, por el aroma de sus muros, por el Espacio Escult¨®rico, la Torre de Rector¨ªa y el nov¨ªsimo Museo Universitario de Arte Contempor¨¢neo, s¨ªmbolo inequ¨ªvoco del M¨¦xico de vanguardia.
Muchas otras cosas hay en esta ciudad que se oculta. Muchos rostros esperando ser descubiertos por nuestros ojos. Muchos rincones ¨ªntimos e inolvidables de esta ciudad enorme compuesta por muchas ciudades peque?as.
? Edson Lechuga (Puebla, M¨¦xico, 1970) es autor de Luz de luci¨¦rnagas (Montesinos, 2010).
Gu¨ªa
Visitas e informaci¨®n
? Museo de Antropolog¨ªa e Historia
(www.mna.inah.gob.mx ). Paseo de la Reforma y calzada Gandhi, s/n. Lunes, cerrado. 3 euros.
? Museo Frida Kahlo (www.museofridakahlo.org.mx ). Londres, 247. Lunes, cerrado. 3,30 euros.
? Museo Universitario de Arte Contempor¨¢neo (www.muac.unam.mx ). Lunes, cerrado. 2,40 euros.
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