El disco sonar¨¢ mejor con ellos

Hay algo en el trabajo de un productor musical, en esa fina capa de color traslucida que imprime en la partitura, capaz de lograr que al mismo o¨ªdo le entusiasmen Paul McCartney, Beck y Radiohead. La construcci¨®n de un sonido marca de la casa que, en el caso de alguien como, por ejemplo, Nigel Godrich, puede garantizar un brillo particular a esos tres productos musicales citados. Indispensable en la m¨²sica internacional o en el hip-hop (donde a menudo quien produce es m¨¢s importante que quien rapea), el productor total ha tardado en instalarse o reconocerse en Espa?a, donde a menudo se confunde con un buen t¨¦cnico o un ingeniero de sonido. Dos nombres emergentes del panorama patrio andan ¨²ltimamente detr¨¢s de casi todo lo que suena bien: Ricky Falkner y Ra¨¹l Fern¨¢ndez Refree.

Ambos compaginan este trabajo con sus proyectos art¨ªsticos y conciertos

Ambos empezaron en la escena hardcore de Barcelona (en el sello BCore) y se han erigido ahora en productores de referencia de un estilo que poco tiene que ver con aquella acelerada hormona guitarrera ("Pero es importante la visceralidad de poner el dedo en un punto de la guitarra y no preguntarse lo que est¨¢s tocando", dice Refree reivindicando ese origen). Falkner est¨¢ detr¨¢s de los discos de Sidonie, Love of Lesbian, Standstill, Beth (una triunfito que no suena a karaoke), Sanjosex o del futuro proyecto de los ex miembros de Sunday Drivers. Refree ha impreso su sello en los trabajos de Nacho Umbert, Pablo Alfaro, Mala Rodr¨ªguez o Mar¨ªa Rod¨¦s.

Los dos empezaron con sus bandas. "Primero produje las maquetas de mis grupos, quiz¨¢ por car¨¢cter u o¨ªdo. Pero creo que hasta que en 2004 me llamaron de Love of Lesbian no me convert¨ª en productor oficial", recuerda Falkner. Luego pas¨® a ser ese animal de estudio que es hoy capaz de dotar de una enorme calidad a los grupos y, como dice su colega Refree, "catapultar a bandas indie hacia un p¨²blico mayoritario".

Pero, ?qui¨¦n necesita a un productor? Para Refree, "de una manera u otra, todo el mundo, aunque sea el t¨ªpico amigo que te aconseja". "Acuden a m¨ª, sobre todo, proyectos unipersonales. Y lo prefiero. Nunca he cre¨ªdo demasiado en las bandas, porque no todas las canciones necesitan los mismos m¨²sicos. Los grupos est¨¢n acostumbrados a tocar todo el rato, y si le dices a uno que suelte el instrumento pone mala cara. Creo en algo m¨¢s orquestado, que entra y sale creando sorpresa".

Uno de los grandes discos de 2010 fue el "Ay...", de Nacho Umbert, m¨²sico de gran talento que se top¨® con Refree con poco m¨¢s que unas buenas letras y una guitarra. El resultado es espectacular. "El proceso de nuestro disco fue especial. Fuimos quedando, no nos conoc¨ªamos de nada. Yo ten¨ªa canciones que eran pura guitarra y voz, y no ten¨ªa ni idea de lo que ten¨ªa que ser. Me escuch¨® y me entendi¨®. Es un tipo con una intuici¨®n acojonante... y a partir de ah¨ª fuimos trabajando... Un productor as¨ª es una figura fundamental para hacer un disco de este tipo, yo estaba perdido", recuerda Umbert.

Falkner y Refree son capaces de tocar la mayor¨ªa de los instrumentos que aparecen en la producci¨®n, para que suene m¨¢s org¨¢nico, "m¨¢s crujiente", dice Refree. Eso, claro, abarata los costes. Pero la crisis de la industria tambi¨¦n hace que los artistas se lo piensen dos veces antes de recurrir a un productor que luego tendr¨¢ que acudir a un estudio de grabaci¨®n con el consecuente aumento de gastos. Ninguno de los dos vive estrictamente de la producci¨®n y compaginan el oficio con sus proyectos art¨ªsticos y conciertos (ayer Refree present¨® su Matilda en la sala Sol).

Para Falkner, un productor tiene que tener o¨ªdo y entender el lenguaje de cada instrumento, pero tambi¨¦n ser paciente con los egos y hacer un poco de "vigilante de patio de colegio". Convencer en cada momento sobre la idoneidad del camino a tomar. "He grabado discos que se han convertido en una batalla. Aunque a veces me enfrento a mi propio ego, y cuando se hace evidente es un poco vergonzoso. Pero de esas luchas salen cosas interesantes", explica.

Jordi Llansam¨¤, fundador del sello BCore, conoce muy bien a estos productores. A ambos les ha editado sus primeros discos. "Una figura como Falkner es importante para construir el ¨¢lbum. A veces son capaces de solucionarlo entero. Lo veo un tipo de productor que busca un sonido menos moderno, muy c¨¢lido y antiguo. Me recuerda al sonido m¨¢s de los setenta espa?ol. Tanto ¨¦l como Refree son muy buenos con instrumentaci¨®n. Consiguen hacer como un coj¨ªn detr¨¢s de la m¨²sica, sutil, pero que si lo quitas hay una gran diferencia en el resultado final", se?ala.

Pero las referencias profesionales en el campo de la producci¨®n son todav¨ªa extranjeras: Rick Rubin (el preferido de Refree, pero con un aire a Falkner), Nigel Godrich, Phil Spector o George Martin (el quinto Beatle y el "Papa" seg¨²n Falkner). Aqu¨ª en Espa?a, m¨¢s all¨¢ de Paco Loco o Santi Garc¨ªa, que no representan exactamente lo mismo, no hay mucho donde fijarse: "Se valora cada vez m¨¢s, pero no hay mucha tradici¨®n en este tipo de figura. Tanto Ricky como yo vamos bastante al tu¨¦tano. Entramos en todo, sin querer ser intrusistas. Pero hay gente que lo que hace es ponerte el micro aqu¨ª o all¨¢. El productor de antes cog¨ªa a un grupo y les dec¨ªa: 'voy a haceros petar, chavales'. Eso no tiene nada que ver con lo que hacemos". A¨²n as¨ª, sus grupos funcionan de maravilla.