Arrepentidos del botox
El abuso de las inyecciones paralizantes refleja la presi¨®n social para aparentar ser j¨®venes - Se uniformiza un tipo de rostro poco expresivo entre los famosos
A Martin Scorsese le cuesta cada vez m¨¢s encontrar actrices que transmitan emociones en los planos cortos. El director de cine estadounidense se ha declarado contrario al efecto que conlleva el abuso del botox y de los lifting que bombardean cualquier atisbo natural de comunicaci¨®n no verbal. En Hollywood la plasticidad de las caras retocadas empieza a ser un inconveniente m¨¢s que un b¨¢lsamo est¨¦tico.
La batalla para parecer eternamente joven en un mundo cada vez m¨¢s competitivo no solo ata?e al ¨¢mbito del espect¨¢culo, tambi¨¦n se libra en la calle, aunque los hombres y las mujeres, huyen ya de los excesos y buscan una aparente naturalidad. ?Pero cu¨¢l es el precio de parecer m¨¢s j¨®venes? ?Cu¨¢l es la edad que se quiere aparentar?
La actriz Nicole Kidman lamenta ahora haberse retocado
Espa?a es uno de los pa¨ªses que m¨¢s operaciones de est¨¦tica realiza
Un 3% de los que se operan se convierten en asiduos de la cirug¨ªa pl¨¢stica
La esperanza de vida se ha alargado y con ella los a?os de juventud
Las personas cada vez viven m¨¢s a?os. En Espa?a, la esperanza de vida se ha elevado hasta los 78,55 a?os en los hombres y 84,56 para las mujeres en 2009. Adem¨¢s, la crisis del modelo social actual, que los expertos hablan de cambiante, l¨ªquido, instalado en lo reversible, lo provisional, hace un buen maridaje con las cirug¨ªas est¨¦ticas no invasivas. Se trata del ahora me pongo, ahora me quito. La creencia de que la felicidad consiste en tener un buen aspecto f¨ªsico est¨¢ muy implantada. Seg¨²n los expertos, la sociedad occidental tiene sobrevalorados la juventud y el culto al cuerpo.
Testimonios de mujeres famosas y de a pie que empiezan a mostrar signos de arrepentimiento por la falta de expresividad en sus rostros tras hacer uso de infiltraciones de la toxina botul¨ªnica, m¨¢s conocida como botox, evidencian una tendencia a la reflexi¨®n y abren un debate sobre la necesidad de verse j¨®venes sin perder el valor de la expresi¨®n.
La actriz Nicole Kidman confes¨® hace poco en p¨²blico que no solo hab¨ªa sido una asidua a las inyecciones de botox, sino que estaba arrepentida y que "no le hab¨ªa gustado el efecto". La cantante Sharon Osbourne, esposa de Ozzy Osbourne, ya reneg¨® hace un par de a?os de su adicci¨®n al botox. Lleg¨® a decir que le daba miedo acabar como "esa gente que parece que tiene el rostro planchado y congelado".
Casi todo el mundo est¨¢ ya familiarizado con el botox. La toxina botul¨ªnica es uno de los tratamientos antienvejecimiento m¨¢s demandados actualmente. Se aplica principalmente en la mitad superior del rostro, el entrecejo es una de las zonas m¨¢s habituales. Seg¨²n los especialistas, esta sustancia paraliza temporalmente los m¨²sculos evitando que se contraigan, de esta forma, se previene la formaci¨®n de arrugas y las existentes se suavizan hasta ser casi inapreciables. Pacientes y cirujanos lo recomiendan porque, seg¨²n dicen, no requiere preparaci¨®n ni cuidados posteriores, no es doloroso y no deja cicatrices. Y adem¨¢s, es m¨¢s barato que el lifting.
No hay nada nuevo en el hecho de que las personas expuestas al p¨²blico se retoquen, tampoco hay nada nuevo en que el resto de mujeres y hombres sigan los c¨¢nones de belleza que marcan el cine y la televisi¨®n. Lo que s¨ª est¨¢ cambiando es que cada vez se hace a una edad m¨¢s temprana. Seg¨²n un estudio realizado por la Sociedad Espa?ola de Cirug¨ªa Pl¨¢stica, Reparadora y Est¨¦tica (Secpre), el 43% de las intervenciones quir¨²rgicas se realizaron a pacientes de 30 a 44 a?os, el 35% a aquellos de m¨¢s de 45 y el 22% restante, a los menores de 30. En EE UU, el 20% de las pacientes tiene menos de 34.
El auge del lifting en los a?os ochenta y noventa, cuando evolucionaron las t¨¦cnicas quir¨²rgicas agresivas para modificar los signos de la vejez a edades entre los 60 y 65 a?os, dio paso a f¨®rmulas menos invasivas, como el botox, que seg¨²n los expertos ha revolucionado la cirug¨ªa est¨¦tica en los ¨²ltimos 20 a?os. Hoy, crece el uso de materiales de relleno, aplicaciones con l¨¢ser, mesoterapia y radiofrecuencia, t¨¦cnicas menos invasivas con el cuerpo pero que buscan lo mismo: detener el paso del tiempo.
La silicona, el botox y las liposucciones siguen siendo reclamo aunque han descendido con la crisis econ¨®mica. Espa?a es uno de los pa¨ªses que m¨¢s operaciones de est¨¦tica efect¨²a, por detr¨¢s de Argentina, M¨¦xico y EE UU. Las cirug¨ªas faciales representaron en 2009 el 41,6% de las 105.000 operaciones de est¨¦tica que se hicieron en Espa?a el a?o pasado, y en nueve de cada diez operaciones de cirug¨ªa la operada era una mujer. La cifra representa aproximadamente un 27% menos que el a?o anterior, seg¨²n la Secpre.
Mientras el lifting baja, el botox sube porque es mucho m¨¢s econ¨®mico; 400 euros la sesi¨®n frente a los 9.000 o 12.000 euros del lifting. Aunque el botox requiere de retoques cada seis meses. Las cl¨ªnicas ingresaron unos 106 millones de euros por las cirug¨ªas pl¨¢sticas en 2009, lo que supone m¨¢s de 1.000 euros por cada una, sin contar los honorarios de los m¨¦dicos, que pueden ser parecidos a esa cifra o seis veces m¨¢s altos.
Los cirujanos juegan la baza de que la satisfacci¨®n con el aspecto f¨ªsico supone un beneficio para las personas en muchos ¨¢mbitos de la vida. "Por eso, carece de sentido pensar en ella como una aplicaci¨®n fr¨ªvola o secundaria ya que como hemos visto, la apariencia f¨ªsica supone un elemento central en el bienestar de las personas", opinan en la Secpre.
Hay una frase recurrente en las consultas de cirug¨ªa pl¨¢stica: "Que sea natural". Los pechos exagerados y los labios abultados son ya historia frente a la b¨²squeda de resultados m¨¢s naturales y sutiles. Para el cirujano pl¨¢stico Jaume Masi¨¤, la cirug¨ªa es cuesti¨®n de coherencia. El responsable de la Unidad Avanzada de Reconstrucci¨®n Mamaria, Microcirug¨ªa y Linfedema de la Cl¨ªnica Planas, en Barcelona, cree que hace tiempo que se ha demostrado que los cirujanos pl¨¢sticos no tienen una varita m¨¢gica. "Tener 50 a?os y querer aparentar 20 no funciona porque se ha visto que se pierde la naturalidad cronol¨®gica. S¨ª es verdad que antes se abusaba con los excesos. Se trata de mejorar y optimizar cada momento en la vida de las personas y que se sientan mejor consigo mismas", explica Masi¨¤, recientemente nombrado presidente de la Secpre.
El cirujano pl¨¢stico Juan Pe?a lleva 30 a?os ejerciendo la profesi¨®n, intentando lograr resultados naturales en sus pacientes. Trabaja en el Hospital San Rafael de Madrid, adem¨¢s de tener una consulta privada. Asegura que todos los excesos son malos porque el sentido de la belleza es la armon¨ªa. "El criterio del m¨¦dico es fundamental. Saber decir que no a un paciente a tiempo es una victoria, la fama no te la dan los pacientes que operas sino los que rechazas".
Aunque todo el mundo sue?a con la naturalidad, es la "apariencia" de la naturalidad. Joana Bonet, directora de la revista Marie Claire y colaboradora del programa Hoy por hoy de la Cadena SER opina que se trata de una falsa naturalidad. "Se ha idealizado porque vivimos en pleno apogeo del juvenismo. Ese elogio hacia la juventud se ha convertido en un icono, cuando en los a?os sesenta y setenta se proyectaba la belleza como imagen de la madurez y equival¨ªa a plenitud. Ahora se vive una presi¨®n social para parecer joven. Vivimos implantados en esa impostura que por otro lado se justifica por el alargamiento de la esperanza de vida".
Adriana, nombre ficticio, tiene 37 a?os y hace un a?o y medio prob¨® a inyectarse botox encima de la ceja. Le gust¨® el efecto porque fue m¨ªnimo y por eso hace un mes repiti¨® en un centro de est¨¦tica de Madrid. Pero no result¨® igual y se arrepinti¨® desde el momento en que no sent¨ªa la frente. "Tengo la sensaci¨®n de que se me ha hecho el ojo m¨¢s peque?o. La gente me dice que no se nota mucho pero yo lo noto, pierdes expresividad. Hay que tener cuidado con esto porque hay gente que tiene mucho vicio y se les queda la misma cara r¨ªa, llore o est¨¦ seria. Eso me horroriza".
A la Asociaci¨®n del Defensor del Paciente llegan reclamaciones de personas que se han arrepentido porque no era lo que esperaban o porque quieren reclamar por negligencia, como por ejemplo por una par¨¢lisis facial. La presidenta de la asociaci¨®n, Carmen Flores, advierte de la importancia de acudir a centros especializados para evitar pr¨¢cticas poco ortodoxas. "La Administraci¨®n deber¨ªa tener un mayor control, porque las inyecciones las est¨¢ poniendo gente que no son cirujanos, hay mucho intrusismo", dice.
Recientemente, el cirujano facial brit¨¢nico Norman Waterhouse, ex presidente de la Asociaci¨®n Brit¨¢nica de Est¨¦tica y Cirujanos Pl¨¢sticos aseguraba en The Guardian que el rostro edad cero, es un efecto del abuso de las cirug¨ªas. "El uso de sustancias de relleno expande la piel. Si uno las usa demasiado, a medida que desaparecen necesita m¨¢s de ellas para cubrir los espacios y as¨ª es como uno queda atrapado en el ciclo botox". Un dato: un 3% de los pacientes que acuden a un cirujano se convierten en consumidores de cirug¨ªa est¨¦tica.
Los especialistas dicen que la cirug¨ªa debe servir para mejorar la autoestima o para superar complejos, nunca para parecerse a otra persona. Mientras la mayor¨ªa de la gente que se expone p¨²blicamente utiliza estos tratamientos, entre el gran p¨²blico s¨ª que hay una tendencia hacia la naturalidad, hacia la belleza natural y responsable. Esto se empieza a ver con el movimiento que se ha levantado contra el uso del photoshop y los retoques fotogr¨¢ficos. "Corremos el peligro de convertirnos en una sociedad con una iconograf¨ªa muy hier¨¢tica, con rasgos muy estandarizados, con falta de matiz, de riqueza gestual y expresiva que es lo m¨¢s dram¨¢tico del abuso de la cirug¨ªa pl¨¢stica y est¨¦tica", dice Joana Bonet.
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