Todos pendientes de Sortu
La inc¨®gnita sobre la presencia de la nueva izquierda 'abertzale' silencia las conjeturas de los posibles resultados - Elorza y Goia adelantan su candidatura
Sortu se ha hecho ya un hueco en las pr¨®ximas elecciones locales y forales del Pa¨ªs Vasco sin saber siquiera si podr¨¢ concurrir. Y es que la nueva marca de la izquierda abertzale aparece como el elemento desequilibrante de estos comicios, planteados de entrada como una rev¨¢lida de las auton¨®micas de 2009. A 100 d¨ªas vista de concurrir ante las urnas, EL PA?S comienza hoy una serie de radiograf¨ªas relativas al 22-M.
La izquierda abertzale es, por su contrastado respaldo social, una hist¨®rica referencia para componer el tablero pol¨ªtico vasco, tanto dentro como fuera de las urnas. De hecho, su ¨²ltima ausencia es interpretada por los nacionalistas como la causa directa del cambio pol¨ªtico en Ajuria Enea. Por el contrario, su hipot¨¦tica presencia avivar¨ªa los pron¨®sticos y, en algunos casos directos como los del PP, desbaratar¨ªa ciertas aspiraciones.
La opci¨®n electoral de Euskal Herria Ezkerretik vuelve a tomar cuerpo
El PNV estrena candidatos para la dif¨ªcil pelea en Vitoria y Donostia
En previsi¨®n del incierto desenlace sobre la suerte legal de Sortu, algunos partidos no evitan sus gui?os al nuevo proyecto pol¨ªtico de la izquierda abertzale. Od¨®n Elorza, al presentar ayer su candidatura a la reelecci¨®n como alcalde de San Sebasti¨¢n admiti¨® que los radicales est¨¢n "haciendo m¨¦rito" para concurrir a las elecciones de mayo, decisi¨®n que le parecer¨ªa "bien" si as¨ª los deciden los tribunales, informa Isabel Landa. El actual alcalde donostiarra present¨® la candidatura socialista, en el Palacio de Aiete, sede de la Casa de la Paz y los Derechos Humanos.
Elorza, de hecho, sigue con especial inter¨¦s la suerte de la nueva Batasuna porque, previsiblemente, necesitar¨¢ de nuevos apoyos externos para conservar su candidatura. El alcalde socialista, refractario al PP, sabe que durante la legislatura se le ha complicado el panorama para asegurarse los votos que le aseguran la mayor¨ªa absoluta. La ruptura de EB, con el desgajo de Alternatiba ahora asociada a Eusko Alkartasuna, dibuja otro rompecabezas al que se viene acostumbrando la pol¨ªtica vasca, pero de manera especial San Sebasti¨¢n y las Juntas Generales de Guip¨²zcoa. Elorza es mucho m¨¢s optimista y ayer augur¨® que espera obtener entre catorce "e incluso quince" concejales, muy por encima de los once actuales. "No tengo ning¨²n temor", dijo, a sus rivales al advertir de que afronta la precampa?a como los futbolistas, "con ganas de bal¨®n".
Especialmente en este territorio la suerte legal de Sortu se vive con especial ansiedad. Ante la fundada sospecha de que no disponga del tiempo suficiente para presentar sus listas a mediados de abril, surge de inmediato la s¨®lida opci¨®n de que las listas conjuntas de las fuerzas soberanistas dispondr¨¢n de un filtro mucho m¨¢s c¨®modo que en la anterior convocatoria. Es en este contexto donde toma fuerza la hip¨®tesis de que la apuesta denominada Euskal Herria Ezkerretik - Sortu, EA y Alternatiba- pasar¨ªa a convertirse en el bander¨ªn electoral abertzale, ajeno, por supuesto, a la suerte que decida Aralar.
Pello Urizar, secretario general de EA, empez¨® ayer mismo a desvelar sus cartas al reconocer, en Radio Popular, que si Sortu no est¨¢ en las elecciones, "EA y Alternatiba iniciar¨¢ el camino al que la izquierda abertzale se sumar¨¢ despu¨¦s". Urizar sostiene que el compromiso soberanista alcanzado entre estas fuerzas pol¨ªticas tiene "bases estrat¨¦gicas de largo recorrido que se deben poner encima de la mesa para recabar el apoyo de la sociedad".
El PNV se siente directamente concernido por este planteamiento de quienes le consideran en Euskadi su rival directo. Sabe que hist¨®ricamente la presencia de la izquierda abertzale le blinda la m¨ªnima opci¨®n de un trasvase de votos. Sin embargo, en la reciente encuesta de la Diputaci¨®n de Guip¨²zcoa, la lista jeltzale aventajaba con holgura a los radicales y su rival a batir era el PSE-EE, ganador en 2007. Con las previsiones en la mano, Markel Olano (PNV) estar¨ªa en condiciones de repetir mandato con el apoyo de Aralar. Pero este sondeo no tuvo en cuenta el efecto del polo soberanista y prefiri¨® individualizar las posibilidades de algunos de sus integrantes. Despu¨¦s de la irrupci¨®n de Sortu, y al margen de su suerte jur¨ªdica, nadie prev¨¦ que compitan cada uno por su lado.
De momento, Eneko Goia, nuevo candidato del PNV a la alcald¨ªa de San Sebasti¨¢n, aplaz¨® ayer sus referencias a la nueva Batasuna y se limit¨® a augurar que la pr¨®xima legislatura "ser¨¢ la de la paz" y que se postula para relevar a Elorza para desarrollar una gesti¨®n "rigurosa". Quiz¨¢ sea hoy, junto a I?igo Urkullu y Joseba Egibar en el Kusaal, cuando apueste por la legalizaci¨®n de Sortu.
Los jeltzales, firmes en Bilbao con la holgura electoral que aporta I?aki Azkuna, asumen la profunda dificultad de marcar territorio propio en Vitoria y San Sebasti¨¢n. Para intentarlo, en ambas capitales acuden con rostros nuevos aunque por razones bien opuestas. En el caso de Gorka Urtaran, como soluci¨®n interna de emergencia, y en San Sebasti¨¢n, porque Joseba Egibar tiene confianza en Goia y no en Xabier Ezeizabarrena.
La quimera del adelanto electoral
I?igo Urkullu, primero, ha encendido la mecha y Josu Erkoreka, despu¨¦s, ha avivado el fuego. Ocurre que el PNV cree ver una inmejorable ocasi¨®n pol¨ªtica para instar a un adelanto de las elecciones auton¨®micas una vez que Sortu reciba la autorizaci¨®n legal de la justicia para as¨ª, entiende, recomponer el mapa de la "aut¨¦ntica representaci¨®n" de los vascos. Traducido, reparar por la v¨ªa de las urnas la reivindicaci¨®n jeltzale latente desde que se produjo la alternancia en el Gobierno vasco, con el relevo de Ibarretxe.
Como era previsible, el PSE-EE ha cerrado la puerta sin contemplaciones. El jueves, ya lo hizo Rodolfo Ares apelando al despecio que el PNV mostraba por el Parlamento. Ayer, el lehendakari, Patxi L¨®pez, entr¨® al trapo para zanjar la cuesti¨®n: "No habr¨¢ adelanto electoral", dijo, al tiempo que dese¨® la admisi¨®n de Sortu. Como refuerzo, Txarli Prieto acus¨® a los jeltzales de "buscar la parte del bot¨ªn" que podr¨ªa obtener tras la legalizaci¨®n de Sortu.
En el debate pol¨ªtico se antoja prematura la reivindicaci¨®n de Urkullu porque ha mostrado con excesiva rapidez su pretensi¨®n para adaptar a sus intereses los efectos colaterales que la presencia de la nueva Batasuna tendr¨ªa en las urnas. Con la izquierda abertzale en la C¨¢mara vasca, el PNV siempre ha tenido el respaldo para asegurarse el Gobierno.
Precisamente a este contexto pol¨ªtico se refiri¨® varias veces Prieto en su comparecencia de ayer ante los medios informativos. El l¨ªder socialista cree, de hecho, que el PNV "a?ora" los tiempos en los que llegaba a acuerdos, incluso de legislatura, con la izquierda abertzale. Para Prieto, el PNV, con esta nueva exigencia, demuestra "nerviosismo, falta de criterio y sus ansias por tratar de repartirse" parte del espacio pol¨ªtico del mundo de la izquierda abertzale.
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