"?Qu¨¦ es el s¨¢nscrito?", pregunta 'Watson'
El mayor fallo de la m¨¢quina: confundir Toronto con Chicago
El formato del programa es peculiar, pero inconfundible. Bajo distintas categor¨ªas, que los concursantes eligen por una cifra determinada de dinero, el presentador lee una respuesta y el participante aporta la pregunta. Ejemplo. Bajo la categor¨ªa Uni¨®n Europea, por 200 d¨®lares, Watson eligi¨® la respuesta que ofrec¨ªa el presentador: "Cada a?o la UE nombra capitales de la cultura: una de las ciudades de 2010 fue el lugar turco de encuentro de las culturas". Y Watson respondi¨®, en forma de pregunta: "?Qu¨¦ es Estambul?".
Parece enrevesado, y hasta cierto punto lo es, hace falta mucha concentraci¨®n y capacidad de reacci¨®n para seguir fluidamente el programa, sello de la cultura contempor¨¢nea norteamericana que, por primera vez en su historia, ha ganado una m¨¢quina. Bajo la misma categor¨ªa anterior, Watson formul¨® bien varias otras cuestiones. "Un controvertido programa de subsidios de la UE que se llama PAC, nombre m¨¢s corto para 'Pol¨ªtica com¨²n", formul¨® el presentador. Watson reconoci¨® el tema: agricultura... y gan¨® otros 600 d¨®lares. Era la tercera prueba de la categor¨ªa.
'Dialecto'
La computadora de IBM acert¨® tambi¨¦n algunas cuestiones complicadas como la englobada bajo la categor¨ªa Dialecto. "?SprechenSiePlattdeutsch? Si usted lo habla, est¨¢ usando una variante de esta lengua". "?Qu¨¦ es el alem¨¢n?", proclam¨® seguro de s¨ª mismo Watson. "V¨¦dico, con al menos 4.000 a?os de antig¨¹edad, es el primer dialecto de esta lengua cl¨¢sica india". Watson formul¨® acertadamente la pregunta: "?qu¨¦ es el s¨¢nscrito?". Retomando el tema de la UE, Watson reclam¨® para s¨ª -a trav¨¦s del mando que activaba para solicitar las preguntas- la siguiente adivinanza: "Se elige cada cinco a?os y tiene 736 miembros de cinco partidos". "?Qu¨¦ es Parlamento Europeo?". El programa consta de momentos en los que al elegir una cuesti¨®n el dinero se dobla, lo que hace que el concursante que est¨¦ en racha se aleje mucho de sus contrincantes. Watson tuvo esa oportunidad en varias ocasiones. Al p¨²blico, formado por ingenieros, le doli¨® su fallo m¨¢s clamoroso, confundir Toronto con Chicago.
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