Una red de sat¨¦lites dar¨¢ Internet de bajo coste a media humanidad
Astra y Google lideran el proyecto O3b, que quiere salvar la brecha digital
Internet se prepara para dar el gran salto a los pa¨ªses pobres. Una red de tecnolog¨ªa avanzada y de envergadura planetaria ofrecer¨¢ cobertura de banda ancha a unos 3.000 millones de personas. Bautizado como O3b Networks (Other 3 billion, otros 3.000 millones, la mitad de la poblaci¨®n mundial), el proyecto para conseguir un Internet global se basa en el lanzamiento de una constelaci¨®n de sat¨¦lites en ¨®rbita ecuatorial que llevar¨¢n la se?al desde Nicaragua hasta Nueva Zelanda, pasando por Brasil, Nigeria, Siria, Etiop¨ªa o India.
En 2010 se calcula que unos 2.000 millones de personas ten¨ªan conexi¨®n a la Red. Pero una gran parte de la poblaci¨®n internauta se concentra en Am¨¦rica del Norte, Europa y Jap¨®n. El Sur vive de espaldas a la Red. El sistema para recortar la brecha digital consiste en llevar a los pa¨ªses emergentes o en v¨ªas de desarrollo que todav¨ªa no han entrado en la sociedad de la informaci¨®n grandes canutos troncales de Internet a trav¨¦s de sat¨¦lites.
Se lanzar¨¢n 20 sat¨¦lites que se colocar¨¢n en ¨®rbita ecuatorial
El proyecto costar¨¢ 880 millones de euros y empezar¨¢ a funcionar en 2013
Los primeros ocho artefactos se lanzar¨¢n en 2013. Una sucesi¨®n de antenas activas ir¨¢ atrapando la se?al de un sat¨¦lite a otro y una red de telepuertos instalados en distintos puntos del planeta permitir¨¢ bajar esos gigantescos canutos de Internet a distintas zonas del planeta.
Uno de esos telepuertos estar¨¢ ubicado en el sur de Espa?a (previsiblemente en Andaluc¨ªa), desde donde se canalizar¨¢ la distribuci¨®n de la se?al hacia buena parte del continente africano. Otras bases se instalar¨¢n en las islas del Pac¨ªfico, Am¨¦rica del Norte y del Sur, el Mediterr¨¢neo oriental, Oriente Pr¨®ximo y Australia.
Despu¨¦s ser¨¢n los operadores de telecomunicaciones locales los que redistribuir¨¢n la se?al a los usuarios, un proceso que se llevar¨¢ a cabo, en la mayor¨ªa de los casos, mediante redes inal¨¢mbricas (Wimax o 4G, por ejemplo). Las cotas de cobertura de banda ancha a trav¨¦s de cable o ADSL en ?frica o Latinoam¨¦rica est¨¢n poco desarrolladas.
Abrir zanjas para trazar cableados a trav¨¦s de la selva se antoja una misi¨®n pr¨¢cticamente imposible. Y la ineficiente infraestructura de l¨ªneas de telefon¨ªa fija (en Nigeria cinco de cada cien hogares no tienen acceso al tel¨¦fono) hace del sat¨¦lite el m¨¦todo m¨¢s eficaz y barato para conectar con la web y hacerlo con la misma calidad que ofrece la fibra ¨®ptica.
Con un presupuesto de 1.200 millones de d¨®lares (880 millones de euros), O3b est¨¢ impulsado por la Sociedad Europea de Sat¨¦lites (SES), que aporta un 30% de la inversi¨®n, el gigante estadounidense de Internet Google, el banco SHBC y Liberty Global, entre otros. Como socio tecnol¨®gico, SES -la compa?¨ªa que explota Astra- lanzar¨¢ al espacio 20 sat¨¦lites. Pero a diferencia de los que se utilizan, por ejemplo, para distribuir canales de televisi¨®n en Europa, no estar¨¢n situados en ¨®rbita geoestacionaria (a 36.000 kil¨®metros de altura) sino a 8.063, lo que les permitir¨¢ ganar en velocidad de transmisi¨®n al estar cuatro veces m¨¢s cerca de la Tierra.
En los sat¨¦lites de comunicaciones tradicionales, la se?al tarda en subir y bajar unos 0,5 segundos. Con el sistema dise?ado por O3b, que sit¨²a los sat¨¦lites en una ¨®rbita intermedia, la latencia se reduce a 0,1 segundos. Esta nueva generaci¨®n permitir¨¢ conexiones m¨¢s r¨¢pidas y flexibles. Prestar¨¢ servicio tanto a los operadores de telecomunicaciones, como a los proveedores de servicios de Internet.
O3b permitir¨¢ recortar la brecha digital entre un Norte acostumbrado ya a coexistir con el iPhone, el iPad y las tabletas electr¨®nicas y un Sur que vive al margen de las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y la comunicaci¨®n. "No tener acceso a banda ancha tiene consecuencias econ¨®micas y sociales", dice Jos¨¦ Luis G¨¢rate, director de desarrollo de Negocio de Astra. "La gran ventaja del sat¨¦lite es la cobertura y la simultaneidad. Puede llevar se?al a miles de millones de personas. Es la ¨²nica infraestructura que cubre el territorio de manera homog¨¦nea y con la misma calidad de servicio", explica G¨¢rate.
Fundada por Greg Wyler, O3b puede hacer posible que millones de personas de m¨¢s de 150 pa¨ªses emergentes entren en el mundo digital y se conecten, a bajo coste y alta velocidad con el resto del mundo. El sue?o del Internet global.
Con parab¨®lica y sin censura
Adem¨¢s de participar en el proyecto O3b como socio tecnol¨®gico, Astra ha desarrollado su propio sistema para llevar banda ancha por sat¨¦lite a Europa, ?frica subsahariana y Oriente Pr¨®ximo. A trav¨¦s del sistema Astra 2 Connect el operador europeo utiliza la llamada banda Ku, que es capaz de llevar la se?al directamente al usuario.
Para acceder a Internet mediante este sistema se necesita una antena parab¨®lica y un m¨®dem, equipamiento que ronda los 300 euros, una cantidad demasiado elevada para las econom¨ªas medias del continente africano. Por eso este tipo de redes est¨¢n siendo utilizadas preferentemente por hospitales, ONG y organismos gubernamentales.
El Astra 2 Connect est¨¢ operativo en pa¨ªses como Costa de Marfil, Angola, Sud¨¢n, Tanzania, Kenia o Somalia. "Desde Los Monegros o desde Guinea Ecuatorial, los usuarios tienen un acceso transparente a Internet", explica Astra. En este caso no es necesario que un operador nacional entre en juego para redistribuir la se?al.
Esta tecnolog¨ªa proporciona conexiones de banda ancha sin restricciones, ya que no se ve afectada por las limitaciones de las redes terrestres. Al no depender de ning¨²n operador local, se podr¨ªan sortear incluso los bloqueos de Internet que intentaran aplicar los Gobiernos de turno. "Ser¨ªa muy complicado establecer procesos de censura. Estar¨ªa solo en nuestras manos, y eso nunca lo har¨ªamos", dice Astra.
La compa?¨ªa tiene previsto utilizar pr¨®ximamente para estos servicios la banda Ka, que permitir¨¢ ampliar la cantidad de usuarios que puede engancharse a la Red y, al mismo tiempo, aumentar la velocidad del servicio. Las velocidades m¨¢s lentas son convenientes para mensajes de correo electr¨®nico, navegaci¨®n web o intercambio de documentos de negocios, mientras que los archivos de v¨ªdeos necesitan m¨¢s capacidad.
El desequilibrio digital
- Cada segundo se env¨ªan alrededor de tres millones de correos electr¨®nicos en todo el mundo.
- El a?o pasado, 2.000 millones de personas contaban con conexi¨®n a Internet. La mayor parte de los usuarios se concentra en los pa¨ªses desarrollados. En el continente africano solo existe una conexi¨®n por cada mil ordenadores.
- En Corea del Sur la velocidad de conexi¨®n media es de 17 megas por segundo. En las islas Cook se puede tardar hasta 10 minutos en enviar un simple e-mail.
- El 80% de los alumnos de Estados Unidos cuentan con un ordenador como apoyo en su educaci¨®n. En Brasil ¨²nicamente hay conexi¨®n a Internet en uno de cada diez colegios.
- Todos los hogares de Andorra tienen acceso a fibra ¨®ptica. En Nigeria, el 95% no tienen siquiera l¨ªnea de tel¨¦fono.
- El flujo diario de SMS supera el n¨²mero de habitantes del planeta (m¨¢s de 6.000 millones), pero todav¨ªa hay un 20% del territorio sin acceso a se?al de telefon¨ªa m¨®vil.
- Aunque los mercados emergentes son cada vez m¨¢s influyentes en la econom¨ªa global, en muchos de estos lugares hay deficiencias para acceder a la sociedad de la informaci¨®n.
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