"Si la Iglesia nos quita el campo de la fiesta, no nos queda nada"
Los feligreses de Ribadulla defienden ante el juez que son due?os del terreno
"Con la Iglesia hemos topado". Lu¨ªs Garc¨ªa Campos rescat¨® esta frase cuando se erigi¨® en portavoz del medio centenar de vecinos de Ribadulla, en el municipio coru?¨¦s de Santiso, demandados por el Obispado de Lugo para dirimir en un pleito civil la propiedad de unos terrenos tasados en 4.000 euros por un perito. Aunque no acudieron todos, la cantidad de demandados era tal (53), que los bancos de la sala de vistas acabaron abarrotados, por lo que el juicio para aclarar la demanda de propiedad acab¨® celebr¨¢ndose a puerta cerrada. Sin entrar se quedaron al menos tres. Uno ya hab¨ªa fallecido, otro "est¨¢ en la UCI", explicaron al auxiliar del juzgado, y un tercero ten¨ªa cita con el m¨¦dico y lleg¨® m¨¢s tarde.
La di¨®cesis llev¨® como testigo a un cura de una parroquia cercana
El juzgado hab¨ªa reservado la sala para dos d¨ªas, pero fue suficiente con poco m¨¢s de dos horas. Tan solo declararon siete de los demandados, que repitieron que el campo les pertenece y que all¨ª organizan sus actividades sociales. El letrado del Obispado, Alejando Fern¨¢ndez Pumari?o, se percat¨® de que las respuestas ir¨ªan todas en la misma direcci¨®n, por lo que decidi¨® renunciar a la toma de declaraci¨®n al resto de demandados.
El proceso judicial se acort¨® y enseguida se pas¨® a las conclusiones finales, en las que este abogado sostuvo que resulta "indiscutible" que la propiedad de los terrenos es de la Iglesia, cuesti¨®n que da por acreditada en una escritura p¨²blica. Adem¨¢s apunt¨® que la celebraci¨®n de fiestas en "un trozo" de la parcela en litigio obedece a que se hab¨ªa consentido la utilizaci¨®n de ese espacio a una comisi¨®n vecinal.
El letrado de los parroquianos, Jos¨¦ L¨®pez, explic¨® que en el plan urban¨ªstico de Santiso el terreno figura como propiedad de los vecinos y que as¨ª aparece inscrito en el catastro, adem¨¢s de existir una escritura de venta p¨²blica de la asociaci¨®n de vecinos a los habitantes de Ribadulla.
A la salida del juzgado explic¨® que hab¨ªa quedado "absolutamente acreditado" que en 1968 la empresa hidroel¨¦ctrica propietaria del embalse de Portodemouros entreg¨® a la poblaci¨®n ese terreno en sustituci¨®n de uno anterior que qued¨® inundado: "Desde entonces, siempre fue de ellos". Y es que el problema parte de la inundaci¨®n parcial que sufri¨® Ribadulla en los a?os sesenta, cuando la empresa Moncanbril construy¨® un embalse y bajo las aguas quedaron todas las dotaciones de la Iglesia, incluido un campo comunal donde se celebraban las fiestas. Iglesia, cementerio y casa rectoral se trasladaron a una zona ubicada en una parte m¨¢s alta del pueblo y, enfrente, el terreno de la discordia.
"Todos sabemos que el terreno es nuestro y eso se lo tenemos que hacer entender al juez", afirma el portavoz de los habitantes de la parroquia, Garc¨ªa Campos. "Recurriremos hasta donde haga falta, ya que si nos quitan el campo no nos queda nada". El presidente de la asociaci¨®n vecinal, Jes¨²s S¨¢nchez, carg¨® contra el actual obispo, Alfonso Carrasco Rouco: "Hasta ahora nadie nos hab¨ªa dicho nada, ni se hab¨ªan metido con nosotros, pero desde que muri¨® el anterior y vino este fue cuando comenz¨® todo".
Uno de los testigos del Obispado, un antiguo sacerdote de Ribadulla, declar¨® que bajo su tutela pastoral, que dur¨® 10 a?os, la fiesta no se hab¨ªa celebrado en el terreno litigado, aunque dijo ignorar cu¨¢l es el espacio que utilizan los vecinos para este cometido. "Es el cura de una parroquia que est¨¢ al lado y vino a concelebrar varias veces en la fiesta, ?c¨®mo puede decir que no sabe donde se celebra? El cura miente m¨¢s que nosotros", ironiz¨® Garc¨ªa Campos a la salida del juzgado.
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