Fracasa el contraataque de Gadafi
Las fuerzas rebeldes resisten la ofensiva de las tropas del dictador en el oeste del pa¨ªs - La avalancha de refugiados desborda la capacidad de acogida de T¨²nez
Consciente de que ha perdido casi por completo el este de Libia, el coronel Muamar el Gadafi trata de presentar cierta resistencia a los rebeldes por el oeste. El dictador lanz¨® un nuevo ataque en la madrugada de ayer contra Zauiya, a 50 kil¨®metros de la capital, que fue repelido por los alzados. La batalla dur¨® seis horas. Los testimonios recogidos por las agencias en la ciudad se?alan que fuerzas especiales del r¨¦gimen y soldados afines utilizaron tanques y artiller¨ªa pesada, armamento similar al utilizado por los alzados.
El fracaso del nuevo embate de los leales a Gadafi es interpretado por la oposici¨®n como una muestra de la debilidad de sus fuerzas. Los insurgentes aseguran que se est¨¢n organizando: "Todos los consejos militares de la Libia libre se est¨¢n reuniendo para formar un consejo militar unificado que organice un ataque a las fuerzas de Gadafi, sus milicias y mercenarios", declar¨® el capit¨¢n Faris Zwei a Reuters.
Ambos bandos batallaron seis horas con tanques y artiller¨ªa pesada
ACNUR pide medios para llevar al interior de T¨²nez a miles de huidos
Lo cierto es que Zauiya lleva liberada varios d¨ªas -aunque la comida empieza a escasear- y tampoco ha habido avances desde all¨ª hacia Tr¨ªpoli, a pesar de la cercan¨ªa. Por ahora, en el oeste, todo sigue en tablas sin un frente claro.
Pese a que ciudades como Zauiya est¨¢n tomadas por las fuerzas de la oposici¨®n, es dif¨ªcil saber qui¨¦n controla la regi¨®n occidental del pa¨ªs. Las tropas del dictador libio han abandonado los principales puntos de la costa occidental y solo realizan incursiones espor¨¢dicas en las ciudades para castigar a la poblaci¨®n. Sin embargo, son todav¨ªa fuertes en la carretera que lleva a la capital y m¨¢s al sur, en los caminos del desierto.
Los movimientos de tropas tuvieron lugar ayer en una zona que hab¨ªa dejado de ser controlada por las fuerzas de Gadafi. Se trata del segundo acceso a Libia por T¨²nez, entre la ciudad tunecina de Dehiba y la libia de Wazin, al sur de Ras el Ajdir. Esa carretera lleva a una ciudad libia llamada Nalut, a 60 kil¨®metros de esa frontera. El lunes por la ma?ana toda esa carretera y las ciudades estaban liberadas, pero ayer las tropas se replegaron para bloquear el l¨ªmite con T¨²nez y tratar de impedir que los rebeldes se hicieran fuertes en Nalut. Un periodista de la agencia italiana Ansa que est¨¢ en esa ciudad asegura que los vecinos se preparan para un ataque y que no son demasiado optimistas dada la escasa fuerza militar que poseen. Los habitantes de Nalut solo cuentan con Kal¨¢shnikov para defenderse.
Mientras tanto, en el puesto fronterizo de Ras el Ajdir, entre T¨²nez y Libia, la situaci¨®n empeora con los d¨ªas y las im¨¢genes se vuelven cada vez m¨¢s dram¨¢ticas. Unas 20.000 esperaban ayer en el lado libio para entrar en T¨²nez, seg¨²n cifras de Naciones Unidas. Las ONG lanzaban pan a los refugiados y estos se amontonaban para hacerse con una pieza. La presencia de militares tunecinos frente a la verja azul que separa ambos lados se ha intensificado en los ¨²ltimos d¨ªas y a veces recurren a la violencia para evitar que los refugiados accedan de forma desordenada. Muchos tratan de saltar la muralla clandestinamente, pero son inmediatamente descubiertos por un grupo de j¨®venes que se han ofrecido voluntarios para dar palos. Los soldados dispararon al aire para mantener el orden tambi¨¦n en el acceso a los autobuses que llevan a los refugiados, la mayor¨ªa egipcios, al campamento instalado por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en el camino a Ras el Ajdir.
Las condiciones clim¨¢ticas tampoco ayudan. Si el lunes fue una tormenta de arena la que oblig¨® a miles de personas a cobijarse en unas naves industriales en el puesto fronterizo, ayer fue la lluvia la que les oblig¨® a guarecerse. La zona se convirti¨® pronto en un barrizal.
Unas 75.000 personas (20.000 solo ayer) han huido por el oeste de Libia desde el 20 de febrero, seg¨²n ACNUR. Otras 70.000 personas habr¨ªan abandonado el pa¨ªs por el paso hacia Egipto, seg¨²n la misma fuente, sumando un total de 145.000 desplazados. La agencia de la ONU alert¨® sobre la situaci¨®n vulnerable de los africanos subsaharianos en Libia, donde en los ¨²ltimos d¨ªas han muerto violentamente 10 somal¨ªes.
La situaci¨®n se agrava en el caso de los m¨¢s de 8.000 refugiados y 3.000 demandantes de asilo, muchos procedentes de pa¨ªses subsaharianos como Chad, Eritrea, Somalia o Sud¨¢n, que ya estaban en Libia antes del estallido de las revueltas y que no tienen medios para salir del pa¨ªs.
Una portavoz de ACNUR, Melisa Fleming, se?al¨® que para evitar una crisis humanitaria se necesita transporte urgente para evacuar al interior de T¨²nez a los desplazados. "El acceso al agua y a servicios sanitarios son cuestiones muy serias, y las letrinas ser¨¢n nuestro pr¨®ximo quebradero de cabeza", coment¨® otro representante de la organizaci¨®n.
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