Tokio, desierta y a oscuras
Los da?os provocados por el se¨ªsmo causan apagones y reducen el servicio de metro - Muchos negocios han cerrado y la gente se recluye en sus casas
Andenes abarrotados de gente en muchas estaciones a la salida del trabajo, oficinistas caminando por las calles con paso nervioso y mascarilla sobre la boca para protegerse de la potencial radiactividad, hoteles casi al completo cuando el mi¨¦rcoles estaban semivac¨ªos por la falta de turistas porque muchos trabajadores no pudieron regresar a sus domicilios, empresas con la calefacci¨®n a medio gas.
Estos fueron algunos de los efectos ayer de la decisi¨®n de las autoridades japonesas de reducir el servicio de metro y trenes de cercan¨ªas en Tokio para ahorrar energ¨ªa y del anuncio realizado a media tarde de que llevar¨ªan a cabo un gran apag¨®n en esta ciudad de 13 millones de habitantes si los niveles de consumo de electricidad superaban los que se hab¨ªan registrado por la ma?ana.
De las 54 centrales at¨®micas de Jap¨®n, 11 est¨¢n paralizadas desde el terremoto
Desde hace d¨ªas, las pantallas gigantes de la capital est¨¢n apagadas
Al final no hubo un apag¨®n generalizado porque, seg¨²n dijo el Gobierno japon¨¦s, no hizo falta, pero s¨ª se produjo el corte del suministro en algunos distritos, que se sumieron en la oscuridad en esta metr¨®polis habitualmente enaltecida por las luces de ne¨®n. Se prev¨¦ que las restricciones contin¨²en al menos durante seis meses.
Desde hace varios d¨ªas, las pantallas gigantes del barrio de negocios de Shibuya -uno de los puntos de referencia de Tokio, debido a su famoso cruce en X, que detiene todo tr¨¢fico rodado y permite a los peatones cruzar en todas las direcciones sobre sus bandas de cebra- est¨¢n apagadas; un duro s¨ªmbolo de la crisis m¨¢s grave que vive Jap¨®n desde la II Guerra Mundial.
La compa?¨ªa el¨¦ctrica Tokyo Electric Power (Tepco) dijo que la p¨¦rdida de la central nuclear de Fukushima y otros da?os causados por el terremoto y el tsunami ocurridos el viernes de la semana pasada situaron su capacidad de suministro de energ¨ªa un 25% por debajo de la demanda. Jap¨®n paraliz¨® 11 de sus 54 plantas at¨®micas despu¨¦s del temblor de tierra. La energ¨ªa nuclear representa el 30% del total de la capacidad de generaci¨®n el¨¦ctrica de Jap¨®n. Seg¨²n algunas estimaciones, el pa¨ªs perdi¨® por la cat¨¢strofe, al menos temporalmente, entre el 10% y el 40% de los 240 gigavatios con que cuenta.
Tokio es ahora mismo una ciudad herida, en su funcionamiento diario y en su orgullo, en la que se est¨¢n produciendo situaciones que encajan perfectamente con sus pel¨ªculas de animaci¨®n futuristas.
Aunque las autoridades afirman que la subida de los niveles de radiactividad en la capital, debido al desastre en Fukushima -central situada 240 kil¨®metros al norte de Tokio-, no supone una amenaza para la salud, muchos residentes en la capital han huido. Otros se han recluido en sus casas, con la despensa repleta. En la tienda Newdays, situada bajo el viaducto de la estaci¨®n de metro de Yurakucho, las estanter¨ªas de la secci¨®n de boller¨ªa y alimentos frescos est¨¢n vac¨ªas.
Calles normalmente inundadas de gente ahora est¨¢n semidesiertas, muchos negocios han cerrado y otros como los restaurantes del lujoso barrio de Ginza han perdido una buena parte del negocio. Adem¨¢s, han comenzado a producirse problemas de desabastecimiento de combustible, con colas hasta de dos horas para echar gasolina y cupos de 20 litros por coche en algunas estaciones de servicio. En la ciudad, flota un estado de ansiedad.
A las cinco de la tarde, centenares de personas salen de la torre de oficinas Harumi Island Triton Square, donde se encuentra la sede del grupo de importaci¨®n y exportaci¨®n Sumitomo. Los oficinistas dejan el lugar con paso r¨¢pido.
Dos ni?os caminan cubiertos con una capucha que les cubre hasta los hombros para protegerse de la potencial radiactividad. La misma imagen se reproduce en la escuela elemental Tsukishima Dai-San, cerca de Ginza. Tokio hace frente a la amenaza nuclear.
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