El xen¨®fobo que divide a Alemania
Lleva vendidos 1.200.000 ejemplares. Thilo Sarrazin es el autor del libro donde se sostiene que los inmigrantes musulmanes son menos inteligentes y se integran peor, pero tienen m¨¢s hijos y esto lleva a Alemania hacia la destrucci¨®n. Tesis conflictivas en un pa¨ªs con pasado nazi. "Me acusan de racista, pero las cuestiones que planteo mueven al 60% de la poblaci¨®n", afirma
Hoy d¨ªa es posible hacerse rico y famoso en Europa por sostener que los musulmanes son "el coraz¨®n de todos los problemas" y que los inmigrantes de las zonas pobres del mundo, con su alta fertilidad, amenazan con bajar el nivel medio de inteligencia de un pa¨ªs tan culto y desarrollado como Alemania. Esto es precisamente lo que ha ocurrido con Thilo Sarrazin, de 66 a?os, exdirectivo del Bundesbank y miembro del Partido Socialdem¨®crata Alem¨¢n (SPD), a causa de su libro Deutschland schafft sich ab (algo as¨ª como "Alemania se destruye"), que se ha convertido en un caso editorial sin precedentes en su pa¨ªs.
En un primer momento, muchos periodistas e intelectuales alemanes, llamados a expresarse acerca del libro, liquidaron sus tesis por ser "delirantes" y lo archivaron como una provocaci¨®n m¨¢s. Pese a ello, el texto se ha convertido en el mayor superventas del pa¨ªs y en el libro de ensayo en lengua alemana m¨¢s exitoso de las ¨²ltimas d¨¦cadas. Seis meses despu¨¦s de su lanzamiento se han vendido 1.200.000 ejemplares y ha sido objeto de un debate sin precedentes.
Dijo: "Jud¨ªos y vascos tienen genes que les diferencian". Y sigue siendo miembro del Partido Socialdem¨®crata
En 2009 declar¨®: "No tengo por qu¨¦ reconocer a quienes no educan a sus hijos y constantemente producen ni?as con velo"
Se trata de un denso escrito plagado de estad¨ªsticas, articulado en dos l¨ªneas tan simples como xen¨®fobas: por un lado, designa a los inmigrantes turcos y musulmanes en general como "el coraz¨®n del problema", debido a su escasa integraci¨®n y su dependencia masiva de las ayudas sociales. Por otro, maneja teor¨ªas de "inteligencia gen¨¦tica" para sostener que la mayor fertilidad de las clases sociales bajas e incultas, en particular de inmigrantes musulmanes, rebajar¨¢ el nivel medio de inteligencia del pa¨ªs. Alemania "se destruye", si no cambia urgentemente las pol¨ªticas de inmigraci¨®n, seg¨²n Sarrazin.
Debido a la controversia, el autor se vio obligado a dimitir de su puesto de directivo en el Bundesbank, el banco central. La decisi¨®n recibi¨® el apoyo de la canciller Angela Merkel y del presidente de la Rep¨²blica Federal, Christian Wulff, quienes consideraron "ofensivas e inaceptables" sus declaraciones acerca de que "los jud¨ªos y los vascos tienen determinados genes que los diferencian" del resto de la humanidad, palabras que recordaron a muchos las teor¨ªas nazis. Estas frases no figuran en el libro, pero su autor las pronunci¨® en la conferencia de prensa que sirvi¨® para presentar la obra. El esc¨¢ndalo se convirti¨® en la causa directa de que tanto el Bundesbank como el SPD iniciaran la toma de medidas contra ¨¦l.
Sarrazin ya era famoso por anteriores pol¨¦micas. Cuando fue senador y ministro de Finanzas de la ciudad de Berl¨ªn, aconsej¨® a los que ped¨ªan aumentos del subsidio de desempleo que se pusieran un jersey m¨¢s para ahorrar en calefacci¨®n. Y en v¨ªsperas de las celebraciones del 20? aniversario de la ca¨ªda del Muro, en septiembre de 2009, declar¨® a la revista Lettre Internacional: "La integraci¨®n requiere un esfuerzo por parte de quienes se tienen que integrar. Yo no respeto a quien no quiera hacer este esfuerzo. No tengo por qu¨¦ reconocer a quienes viven de las ayudas p¨²blicas, pero niegan la autoridad del Estado que las otorga, no educan a sus hijos y producen constantemente m¨¢s ni?as con velo. Esto vale para el 70% de la poblaci¨®n turca y el 90% de la poblaci¨®n ¨¢rabe en Berl¨ªn".
El Bundesbank consigui¨® quitarse el problema de encima, pero no logr¨® lo mismo el Partido Socialdem¨®crata Alem¨¢n, formaci¨®n a la que pertenece Sarrazin desde hace d¨¦cadas. A iniciativa de uno de sus dirigentes, Signar Gabriel, intent¨® expulsarle abri¨¦ndole dos expedientes; en el primero result¨® absuelto de la acusaci¨®n de racismo, mientras que el segundo expediente a¨²n sigue abierto. As¨ª que, de momento, Sarrazin es todav¨ªa miembro del SPD.
El hombre que ha incendiado a Alemania vive en Neue Westend, en Berl¨ªn Oeste. Se trata de un barrio de casas burguesas y ordenados jardines por donde pasean, lejos de los inmigrantes, mujeres enjoyadas acompa?adas por perros reci¨¦n salidos del peluquero. Thilo Sarrazin abre la puerta personalmente, ataviado con pantalones deportivos, un jersey y un par de pantuflas a cuadros. Invita a tomar asiento en un sal¨®n que aloja una gran biblioteca y reconoce que su vida ha cambiado desde que escribi¨® su libro.
"Ahora soy muy conocido, viajo mucho, doy muchas conferencias, tengo muchas entrevistas. Es la vida de un escritor famoso", cuenta, mientras se frota los ojos detr¨¢s de sus gafas. Su tarea, que parece tomarse como una misi¨®n, consiste en explicar por qu¨¦ Alemania y Europa en general se destruyen: "Alemania tiene desde hace 40 a?os una tasa de nacimiento de 1,4 ni?os por mujer; esto significa que la poblaci¨®n alemana se hace m¨¢s peque?a con cada generaci¨®n; en Espa?a, aunque con a?os de retraso, tambi¨¦n tienen el mismo problema con los nacimientos. Al mismo tiempo, la natalidad se distribuye en Alemania de manera irregular en los distintos niveles de educaci¨®n. Esto significa que los estratos sociales menos instruidos obtienen un mayor promedio de nacimientos, y por esta raz¨®n el potencial de Alemania se anula a¨²n m¨¢s r¨¢pidamente que la poblaci¨®n. En tercer lugar, el tipo de inmigraci¨®n que tenemos no es el adecuado para resolver los problemas que nos afectan. Ahora solo necesitamos trabajadores cualificados. Si la tasa de nacimientos de los inmigrantes incultos, procedentes de Turqu¨ªa y ?frica, sigue constantemente m¨¢s alta, en unas pocas generaciones Alemania tendr¨¢ una mayor¨ªa de poblaci¨®n turca, ¨¢rabe, africana y musulmana".
Pregunta. Cuando uno mira hacia Alemania, no se aprecia por ning¨²n lado que la situaci¨®n sea tan dram¨¢tica...
Respuesta. La gente que tomaba copas en el bar del Titanic tampoco se daba cuenta de nada: la orquesta tocaba, todo el mundo estaba bien, y en las primeras horas nadie advirti¨® el problema. A pesar de eso, estaban condenados a muerte porque el agua segu¨ªa entrando en la nave. El tema es que lo que observamos hoy no dice absolutamente nada, porque falta perspectiva. Yo quer¨ªa analizar estos temas y ver c¨®mo evolucionaba la discusi¨®n.
De los siete millones y medio de extranjeros que viven legalmente en Alemania, un pa¨ªs de 82 millones de habitantes, tres millones son de origen turco, y 280.000, ¨¢rabe. Son muchos los que consideran que el libro de Sarrazin y su ¨¦xito son "una reacci¨®n hist¨¦rica frente a los cambios actuales en la Rep¨²blica Federal", como escribi¨® Arno Widmann, editorialista del Frankfuhrter Rundschau. Christian Staas, del semanal Die Zeit, conden¨® su "proyecto eugen¨¦sico". Fue criticado, asimismo, tanto por representantes de la comunidad musulmana como jud¨ªa. Otros, como el excanciller Helmut Schmidt, le reconocieron, sin embargo, haber roto un tab¨². Adem¨¢s, Schmidt se dijo contrario a su exclusi¨®n del partido, no sin criticar al exbanquero: "Encuentro absolutamente equivocado el hecho de mezclar las tradiciones civilizadoras de otros pueblos con la herencia gen¨¦tica".
Curiosamente, seg¨²n una encuesta realizada por el diario sensacionalista Bild, el 18% de la poblaci¨®n votar¨ªa a Sarrazin si se presentara a elecciones.
"La controversia se debe a que mi an¨¢lisis es inc¨®modo, y a la pol¨ªtica no le gusta mirar de frente las verdades inc¨®modas", contraataca Sarrazin, eligiendo con calma sus palabras. "Yo dije que personas de diferentes culturas se portan de manera diferente, y esta diferencia no es igual para todos los grupos de inmigrantes. De esta manera, romp¨ª un tab¨² pol¨ªtico que dice: todos los hombres son iguales, y ya que esas personas est¨¢n aqu¨ª, pueden ser todas consideradas como alemanas de nacimiento".
P. ?Por qu¨¦ define usted a unos determinados grupos de inmigrantes como "el coraz¨®n del problema"?
R. La integraci¨®n se puede medir a trav¨¦s de tres indicadores: el ¨¦xito de los j¨®venes en el mercado laboral alem¨¢n, los resultados en el ¨¢mbito de la educaci¨®n y la frecuencia con la que los inmigrantes recurren a las ayudas estatales. Bajo estos indicadores, se observa que tanto la integraci¨®n de la inmigraci¨®n procedente del este de Europa como tambi¨¦n la de Extremo Oriente no representan ning¨²n problema. Los inmigrantes en este caso tienen trabajo, se integran en el sistema y recurren menos a las ayudas sociales. Todos esos indicadores, analizados en el contexto de los inmigrantes que proceden de pa¨ªses musulmanes, ofrecen como resultado, por t¨¦rmino medio, los datos contrarios.
P. Por un lado, la indicaci¨®n de un grupo ¨¦tnico-religioso como "el coraz¨®n del problema"; por otro, sus teor¨ªas de inteligencia gen¨¦tica. ?No deber¨ªa uno tener cuidado con estos temas, sobre todo en Alemania a causa de su pasado nazi?
R. Una cosa no tiene nada que ver con la otra. El conocido psic¨®logo americano Martin P. Seligman escribi¨® en su libro What you can change and what you can't que las importantes investigaciones de los nazis en materia de gen¨¦tica fueron injustamente desacreditadas, debido solo a los horrores perpetrados por el r¨¦gimen nazi. Esto significa que la pregunta del pasado nazi no tiene nada que ver con los hechos del mundo de hoy.
Si se le pregunta a Sarrazin por las acusaciones de racismo, ya que designa a un grupo ¨¦tnico como causa de la posible destrucci¨®n de Alemania, ¨¦l disiente con la cabeza y, mirando hacia abajo, contesta nervioso: "No hace falta que lo vuelva a repetir. La acusaci¨®n de que soy racista es absurda y no se me puede hacer". Y a?ade: "Por lo que se refiere a los musulmanes, yo digo que su falta de integraci¨®n se debe a su cultura. Con respecto a su inteligencia media, yo no digo nada en mi libro".
P. El partido neonazi NPD distribuy¨® clandestinamente ejemplares digitales de su libro entre los miembros del partido...
R. La editorial ya est¨¢ tomando medidas y eso no tiene nada que ver con nosotros.
P. Pero sus teor¨ªas apoyan ideales pol¨ªticos extremistas.
R. La pregunta es si el libro describe factores importantes y verdaderos. No se trata de ver qui¨¦n tiene una opini¨®n particular sobre ¨¦l. El hecho de que el partido NPD apoye algunos de los pasajes del libro se ha utilizado para difamarme.
A pesar de las condenas iniciales, la pol¨¦mica causada por la idea de que "Alemania se destruye" ha producido algunos cambios sustanciales en el tono de la pol¨ªtica alemana. Pocos meses despu¨¦s de la publicaci¨®n del libro, y en pleno debate acerca de estas tesis, la canciller Angela Merkel dio por fracasado el multiculturalismo, tras haber defendido este modelo durante a?os. "Nosotros como Uni¨®n estamos a favor de la cultura alemana como gu¨ªa y en contra del multiculturalismo. El multiculturalismo ha muerto", afirm¨® Merkel en octubre pasado frente a los j¨®venes de su partido, tras argumentar que es necesario exigir m¨¢s a los inmigrantes. Desde entonces han empezado a escucharse con m¨¢s frecuencia frases de discriminaci¨®n contra el islam. "El islam no pertenece a Alemania", repiti¨® Horst Horst Seehofer, l¨ªder del partido socialcristiano b¨¢varo, aliado pol¨ªtico de la canciller. "No hay nada en la historia que demuestre que el islam pertenece a Alemania", coment¨® la semana pasada el recientemente nombrado ministro del Interior, Hans Peter Friedrich, tambi¨¦n socialcristiano.
P. ?Cree que el ¨¦xito de su libro ha influido en decisiones pol¨ªticas posteriores?
R. No lo s¨¦ todav¨ªa. Pero los pol¨ªticos han tenido que reconocer que las cuestiones planteadas por mi libro mueven al 60% de la poblaci¨®n. No s¨¦, sin embargo, si declaraciones como la de "el multiculturalismo ha fracasado" han sido oportunistas.
Representantes musulmanes en Alemania, por otra parte, denuncian constantemente que se sienten v¨ªctimas de discriminaci¨®n en una disputa que les parece absurda y descaradamente parcial. La pol¨¦mica est¨¢ servida y se encamina, con mucha claridad, hacia una creciente tensi¨®n social.
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