"Si acepto el chantaje me arruinan"
Nintendo pide 23 a?os de c¨¢rcel para un comerciante de Avil¨¦s por vender 'cartuchos' compatibles con la consola port¨¢til DS - El juicio comienza el martes
El plan de empresa de Alejandro se convirti¨® en realidad, pero el martes puede acabar en pesadilla. Nintendo pide para ¨¦l 23 a?os de c¨¢rcel y 840.000 euros de indemnizaci¨®n por vender en su tienda de inform¨¢tica, Alechip.com, los m¨®dulos de carga de videojuegos para la consola DS. La multinacional japonesa del ocio electr¨®nico, que no realizar¨¢ declaraciones hasta despu¨¦s del juicio, considera que estos cartuchos son "ilegales", porque permiten usar sus juegos pirateados. Adem¨¢s, en su escrito de acusaci¨®n, le culpa de violaci¨®n de marca, dise?o y revelaci¨®n de secretos.
Alejandro Fern¨¢ndez, de 31 a?os, est¨¢ tranquilo. "Por fin me podr¨¦ defender", dice. El juicio empieza el martes y la fiscal¨ªa pide una pena menor: tres a?os y medio de prisi¨®n y 12.960 euros por dos delitos, uno contra la propiedad intelectual y otro contra la industrial. El empresario asturiano rechaza de plano todas las acusaciones. "Nunca he vendido nada pirateado sino material inform¨¢tico, incluido las consolas de Nintendo, sus juegos y sus accesorios originales. Pero tambi¨¦n vendo accesorios compatibles y eso no les gusta. ?Por qu¨¦ van a por el comerciante? ?Por qu¨¦ no van a China que es donde se fabrican estos dispositivos?".
La empresa esgrime que ese accesorio permite usar sus juegos "pirateados"
"Me llamaron y me dieron dos opciones: pagar 3.000 euros o ir a los tribunales"
La aventura empresarial de este ingeniero electr¨®nico asturiano empez¨® en 2005. Como proyecto final de carrera realiz¨® un plan de negocio para abrir una tienda. "Como las opciones laborales eran escasas o directamente rozaban la explotaci¨®n", lo convirti¨® en realidad.
Empez¨® en el garaje de sus padres a los 25 a?os. "Me ofrec¨ªa en los anuncios por palabras para reparar ordenadores, consolas..., que recog¨ªa por mensajer¨ªa expr¨¦s". El negocio funcion¨® bien y seis meses despu¨¦s se traslad¨® "a un peque?o local, a la vez que abr¨ªa la tienda en Internet", que despu¨¦s ampli¨®.
En la Navidad de 2008 todo se torci¨®. Nintendo empez¨® a bloquear en la aduana los productos -por valor de 70.000 euros- que importaba de China. "Me llamaron y dieron dos opciones: pagar 3.000 euros o ir a juicio. Las dos primeras veces pagu¨¦, una de ellas consegu¨ª regatear a 1.500 euros, pero luego me rebel¨¦ y en ese momento comenzaron a lloverme demandas hasta que entraron por la v¨ªa penal". La primera demanda se archiv¨®; la segunda, la gan¨® por la v¨ªa mercantil, pero est¨¢ recurrida, explica Fern¨¢ndez.
El martes, cuando empiece el juicio, se contrapondr¨¢n dos teor¨ªas. Nintendo argumentar¨¢ que es pirater¨ªa. Cuando hace seis meses se emiti¨® la primera sentencia que ilegaliz¨® la venta de estos m¨®dulos de carga de videojuegos -un fallo de conformidad, porque los acusados se declararon culpables-, el subdirector de la compa?¨ªa, Rafael Mart¨ªnez, declaro: "Espa?a es el pa¨ªs m¨¢s afectado por la pirater¨ªa. Hay un cierto arraigo, una sensaci¨®n de que est¨¢ ah¨ª para todos y no se valora la propiedad intelectual".
En el escrito de acusaci¨®n, adem¨¢s, Nintendo a?ade que la demanda trasciende la venta de productos ilegales destinados a romper las barreras de seguridad de la consola, porque los cartuchos solo son v¨¢lidos para la Nintendo DS. Y constituye una infracci¨®n del "dise?o industrial ajeno" es decir, que se basan en el original. El fabricante tambi¨¦n considera que hay infracci¨®n de marca, porque contienen informaci¨®n secreta de su propiedad, "incluida en un software o c¨®digo inform¨¢tico". De ah¨ª que tambi¨¦n acusa de revelaci¨®n de secretos al importador.
Fern¨¢ndez, en cambio, lo ve completamente al rev¨¦s. "Ellos venden consolas capadas para que solo se puedan reproducir los contenidos que ellos comercializan. Estos cartuchos no est¨¢n dise?ados para piratear juegos, ni violar copyright ni marca alguna, sino para darles otros usos a las consolas, aut¨¦nticos ordenadores, que sin ellos ser¨ªa imposible realizar".
El juez estudiar¨¢ el martes qui¨¦n tiene raz¨®n. Fern¨¢ndez, en cualquier caso, est¨¢ tranquilo. Confiesa que cuando empez¨® esta pesadilla tuvo miedo, pero ahora ya no. "Si aceptaba el chantaje me llevaban a la ruina. Si cedo, ?con qu¨¦ cara mirar¨ªa a mi mujer, a mi hijo, a mis clientes y proveedores? Estoy dispuesto a llevarlo hasta el final".
Otros usos distintos a los juegos
Los cartuchos (o tarjetas R4) no solo sirven para almacenar juegos Nintendo descargados sin pagar, sino que extienden las funcionalidades de la consola para que sirva para escuchar m¨²sica o ver pel¨ªculas. Hay aplicaciones que convierten la Nintendo DS en un gestor de pedidos para la hosteler¨ªa.
La Universidad de Castilla-La Mancha imparte, desde 2007, una asignatura llamada Nintendo DS lite como plataforma para la docencia. Entre el material did¨¢ctico suministra un libro, de Mar¨ªa Jos¨¦ Santofimia y Francisco Moya, donde se explica que "los cartuchos para ejecutar software casero (R4, M3, Cyclos...) tienen un programa interno (navegador) que se comporta a su vez como cargador para otros programas".
Salvo la sentencia de conformidad de octubre de 2010, que declar¨® ilegal su venta, "las resoluciones dictadas por los tribunales espa?oles son de archivo o de absoluci¨®n", asegura Carlos S¨¢nchez Almedia, abogado de Alejandro Fern¨¢ndez.
El pasado 2 de diciembre de 2010, por ejemplo, el juez absolvi¨® al propietario de la tienda Chipspain porque consider¨® probado que no se utilizaban ¨²nicamente para reproducir juegos pirateados, sino que tambi¨¦n permiten reproducir otros contenidos e instalar sistemas operativos.
Y un a?o antes, un juez de Salamanca archiv¨® otra denuncia. Su decisi¨®n se bas¨® en la argumentaci¨®n del fiscal. El informe de este admit¨ªa que el C¨®digo Penal sanciona a quien "fabrique, importe, ponga en circulaci¨®n (...) o neutralice cualquier dispositivo t¨¦cnico que se haya utilizado para proteger programas de ordenador", pero en ese caso el acusado lo ofrec¨ªa "exclusivamente" para realizar copias de seguridad.
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