"Enterrado en el mar seg¨²n la tradici¨®n isl¨¢mica"

Una vez concluida la misi¨®n de caza y captura de Osama bin Laden, vivo o muerto -finalmente fue muerto-, la Administraci¨®n de Barack Obama ten¨ªa que resolver una dif¨ªcil cuesti¨®n: ?qu¨¦ hacer con el cad¨¢ver del l¨ªder de Al Qaeda?

Que Bin Laden cayera abatido por las balas de las fuerzas especiales de la Armada solucion¨® el largo debate -de casi 10 a?os- de qu¨¦ hubiera pasado de haber sido capturado con vida. Un juicio le hubiera regalado una privilegiada plataforma para publicitar su mensaje de terrorismo y muerte a Occidente. Condenarle a cadena perpetua hubiera reforzado su imagen de l¨ªder que pelea por una causa que los islamistas radicales consideran justa.

Bin Laden estaba muerto, dijo Obama. Todos los anteriores escenarios quedaban descartados. Pero d¨®nde y c¨®mo se daba sepultura al hombre m¨¢s odiado de Estados Unidos no era una cuesti¨®n menor. Las autoridades decidieron deshacerse, solo 12 horas despu¨¦s de anunciar su fallecimiento, de tan pol¨¦mico cad¨¢ver. El espacio de tiempo era perfecto, ya que se cumpl¨ªa con uno de los requisitos que exige la tradici¨®n musulmana: enterrar el cuerpo en menos de 24 horas.

Arabia Saud¨ª y Pakist¨¢n se negaron a acoger los restos mortales

Desde su mansi¨®n en Abbottabad, al norte de Islamabad (Pakist¨¢n), el cuerpo sin vida de Bin Laden fue trasladado en helic¨®ptero a la base militar de Bagram, a las afueras de Kabul (Afganist¨¢n). Desde all¨ª, el cuerpo fue transportado a bordo del portaviones Carl Vinson.

"Osama bin Laden ha sido enterrado en el mar respetando las tradiciones isl¨¢micas", dijo el consejero para la lucha antiterrorista de la Casa Blanca, John Brennan, que no a?adi¨® m¨¢s detalles. Para seguir la tradici¨®n isl¨¢mica, quienes prepararon el cad¨¢ver deber¨ªan haberlo lavado tres veces -algo de lo que debe encargarse un miembro de la familia si es posible-; se deber¨ªan haber pronunciado una serie de plegarias y ser enterrado antes de que transcurrieran dos puestas de sol. Esta ¨²ltima condici¨®n se cumpli¨® sin lugar a dudas. Cubierto con una s¨¢bana blanca y enfundado en una bolsa de pl¨¢stico, el cuerpo de Osama bin Laden fue colocado sobre una tabla, que se elev¨® por encima de la borda y se inclin¨® para que el cuerpo se deslizara hacia el mar.

Bin Laden descansa muerto ahora en un lugar tan secreto del mar Ar¨¢bigo como lo fueron sus escondites en vida en los ¨²ltimos 10 a?os. ?Por qu¨¦ el difunto no fue entregado a su Arabia Saud¨ª natal? Informaciones sin confirmar hablan de que las autoridades norteamericanas pidieron a Arabia Saud¨ª que se hiciera cargo del cad¨¢ver, pero que el r¨¦gimen de los Saud se neg¨® a ello.

Ning¨²n pa¨ªs parec¨ªa dispuesto a aceptar los restos mortales del terrorista m¨¢s buscado del planeta por las consecuencias que pudiera traer y por el temor a la consagraci¨®n de un lugar de culto y peregrinaje del terror. Pakist¨¢n tambi¨¦n rechaz¨® albergar los restos mortales de Bin Laden. Afganist¨¢n no era una opci¨®n... Solo quedaba el agua.

Sin duda, EE UU ha limado muchos de los problemas que hubieran supuesto enterrar al l¨ªder de la red terrorista Al Qaeda. Pero la sepultura que se le ha dado en alta mar no agrada ni convence a los m¨¢s radicales, que lo consideran una provocaci¨®n que deber¨¢ ser vengada.

Para los te¨®ricos de las conspiraciones que puedan alegar que Bin Laden sigue vivo y todo es producto de las maquinaciones de la CIA, diferentes cadenas de televisi¨®n informaban ayer de que la identidad de Osama Bin Laden quedaba confirmada tras hab¨¦rsele practicado pruebas de ADN.