La rara estrella de Jamie xx
No escucho las letras. No me interesan. Si me pidieras que recitara una nuestra, ser¨ªa incapaz". A Jamie Smith no le gustan las palabras. Para el responsable de los ritmos y el sonido de The xx, la mejor banda debutante de 2010, favorita de la cr¨ªtica (su disco hom¨®nimo gan¨® el prestigioso Mercury Music Prize) y del p¨²blico (llevan 300.000 copias vendidas), son una peque?a poluci¨®n sonora. Deambula de negro riguroso por el vest¨ªbulo de su hotel en Barcelona, donde ha venido a pinchar. Parece un personaje de Tim Burton que acaba de pegar el estir¨®n. Habla de forma cadenciosa, dando la sensaci¨®n de que dice mucho m¨¢s de lo que comunica. Jamie xx, su seud¨®nimo art¨ªstico, es en persona la traducci¨®n de su minimalismo musical: ¨¢rido, distante, pero irresistible.
"Tuve que mudarme de casa de mis padres. Estaban hartos del volumen"
En los setenta, alguien vio el futuro del rock sudando en un escenario de Nueva Jersey; en los ochenta, en una parada de bus de Manchester; en los noventa era un ama de casa de Bristol quejosa, y en la pasada d¨¦cada, un gordinfl¨®n neoyorquino con una gran colecci¨®n de discos. Hoy lo tenemos aqu¨ª, jugando con el iPhone, distra¨ªdo, aburrido y totalmente inconsciente de los efectos que puede tener su trabajo en la forma en que entendemos el pop y la electr¨®nica. La distancia entre su realidad y sus consecuencias es abrumadora.
Con 21 a?os y The xx en el periodo de reflexi¨®n previo al inicio de la grabaci¨®n de su segundo largo, se ha convertido en disc jockey de referencia (a Barcelona volver¨¢ en mayo para ofrecer un set en el Primavera Sound); remezclador de ¨¦xito de Adele o Glasser; ha editado su primer corte en solitario; sale de fiesta con Michael Stipe y recibe mensajes de Courtney Love en su MySpace. "Recibo muchas ofertas para producir o remezclar y, bueno, muchas debo declinarlas. Por ejemplo..., no, no puedo decirlo". Jamie pide disculpas por su discreci¨®n. El futuro no da titulares.
Su ¨²ltimo triunfo es la sorprendente y magistral vuelta de tuerca que ha dado a I'm new here, de Gil Scott-Heron, el primer disco en 16 a?os del m¨ªtico poeta y m¨²sico afroamericano. El resultado es We're new here, un ¨¢lbum que podr¨ªa ser un di¨¢logo intergeneracional, si no fuera porque Scott-Heron no est¨¢ por la labor de escuchar, y, para Jamie, dialogar es lanzar samplers. "El primer contacto con Gil fue por carta, porque no tiene e-mail. Aunque no me respondi¨®, s¨¦ que la ley¨®. Luego le conoc¨ª en Nueva York y, bueno, fue correcto. No habla mucho. Bueno, no dice tonter¨ªas. Yo tampoco soy muy hablador... y estaba muy nervioso". Scott-Heron no parec¨ªa estar de acuerdo con las ideas de Jamie, pero, al final, mediante un emisario, el poeta le dijo al chaval que hiciera lo que le diera la gana. Smith se comport¨® con el descaro que deb¨ªa. "Mis padres son muy fans de su m¨²sica. En casa sonaba siempre, hasta que empec¨¦ a poner a todo volumen mis composiciones y tuve que mudarme porque estaban hartos de m¨ª. Recuerdo que me comentaban sus letras, pero yo no hac¨ªa ni caso", apunta en un conato de confesi¨®n. Todo un hito, si tenemos en cuenta que pertenece a una banda que se form¨® en un instituto y jam¨¢s se lo dijo a sus compa?eros de clase, que perdi¨® un componente y fue incapaz de articular el porqu¨¦ y que, tras la aparici¨®n del rumor sobre la homosexualidad de dos de sus miembros, se neg¨® a discutir sobre sus letras, por si una cosa llevaba a otra.
We're new here se cre¨® en el port¨¢til de Smith en la gira de The xx. Fue durante ese proceso cuando el m¨²sico se dio cuenta de que deseaba ir a¨²n m¨¢s all¨¢, alejarse del indie, al que jam¨¢s tuvo ning¨²n apego, para meterse de cabeza en la escena underground de la electr¨®nica londinense. "Mi primer inter¨¦s musical fue el soul. Luego, el hip-hop. Desde ah¨ª empec¨¦ a crear mis propios ritmos. Jam¨¢s tuve como referencia ninguna de las bandas que se nombran cuando se habla de The xx". Es decir, no escucha a The Cure. El futuro admite que le cuesta mucho interesarse por algo y que del pasado solo le preocupa el que forma parte de su biograf¨ªa.
A Smith, en principio, le ofrecieron ser bater¨ªa, algo extra?o, visto su perfil actual. "Me pareci¨® vulgar. Entonces les ense?¨¦ algunos ritmos que ten¨ªa y propuse hacerme cargo de las bases. Pensaba que as¨ª me ahorraba subir al escenario, pero no". Jamie terminar¨ªa tambi¨¦n produciendo el disco. Tras varios intentos frustrados con Diplo y otros productores, Richard Russell -Capo de XL, su sello, y fuerza motriz de su carrera- se le acerc¨® y le dio las llaves del estudio de XL, dici¨¦ndole que pensaba que era la persona que deb¨ªa hacerse cargo del disco. "Con los otros productores no era nuestro sonido. Piensa que, a veces, necesito 10 samplers superpuestos para sacar un ritmo. No es f¨¢cil. Me dijeron que hab¨ªa demasiado silencio en las canciones, que era todo muy minimal. Inmediatamente, me encerr¨¦ en el estudio y empec¨¦ a eliminar pistas para hacerlo a¨²n m¨¢s ¨¢rido. Funciono as¨ª, si no me empujan, no trabajo. Deben darme un motivo para dejar el skate y pillar el ordenador".
Hoy vive en Brixton, se relaciona con los productores que son vecinos en esa zona de Londres y es asiduo de clubes como Plastic People. "Mis sesiones de disc jockey han ido mutando hacia el house y el tecno. Estoy adapt¨¢ndome a una faceta de la electr¨®nica que es nueva para m¨ª. He dejado el rollo m¨¢s actual y brit¨¢nico y he empezado a investigar sonidos m¨¢s expansivos". Este futuro, como todos los que han triunfado, es admirable, pero no imitable.
We're new here, de Gil Scott-Heron y Jamie xx est¨¢ editado en XL/PopStock! Jamie xx act¨²a el 27 de mayo en Barcelona (Festival Primavera Sound).
Capricho para las estrellas
Antes era al rev¨¦s: los grupos noveles versionaban canciones cl¨¢sicas. Pero al menos cuatro consagrados se han apropiado de alg¨²n tema de The xx.
OMD. Los autores de Enola Gay logran convertir VCR, uno de los mejores temas de 2009, en el mejor single que jam¨¢s se edit¨® en 1983. No son los ¨²nicos, la banda de pop dram¨¢tico The Antlers tambi¨¦n hiz¨® una versi¨®n l¨¢nguida.
Gorillaz. A su vuelta de la gira estadounidense de 2010, la banda imaginaria liderada por Damon Albarn hizo una parada en los estudios de la BBC para una sesi¨®n en la que registr¨® la maravillosa conversi¨®n de Cristalized, el tema m¨¢s conocido de la banda, en una balada de pop maduro a lo Elbow. Damon Albarn ralentiza el tempo, pone el piano en primer plano y estruja la melod¨ªa hasta colocarla en una posici¨®n c¨®moda para su actual registro vocal. The xx ya saben c¨®mo sonar¨¢n de aqu¨ª a 15 a?os.
Shakira. Fue en su actuaci¨®n del festival de Glastonbury 2010 donde demostr¨® con Islands c¨®mo destripar a una canci¨®n de todos los elementos que la hacen especial y convertirla en otro despliegue de McPop.
Hercules and Love Affair. Los neoyorquinos pillan Shelter, lo m¨¢s cercano a una balada que contiene el debut de The xx y, aun a riesgo de sacrificar uno de los momentos m¨¢s brillantes de Jamie xx como productor del disco, lo convierten en un tema housero donde, por una vez, una interpretaci¨®n vocal menos l¨¢nguida y m¨¢s rica en color que la original favorece el resultado final. Como en los viejos tiempos, la canci¨®n fue incluida en la cara B de un sencillo. En este caso, My house.
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