Europa afronta otro momento de la verdad
El fracaso de los rescates y los relevos en el FMI y el BCE acent¨²an la crisis
Los mercados. Nadie sabe qui¨¦nes son exactamente, pero ah¨ª est¨¢n a diario, en la prensa, en las a veces indescifrables pantallas de Bloomberg, en boca de los ciudadanos y sobre todo de los pol¨ªticos, que han llegado a definirlos como "manadas de lobos". Los mercados vuelven a perder confianza en el manejo de la crisis por parte de Europa: los rescates no funcionan y el incendio de la crisis fiscal no hace m¨¢s que avivarse, con Espa?a de nuevo cerca de la zona caliente. Las causas son variadas. Los cambios en la c¨²pula del BCE y del FMI abren interrogantes. Las pr¨®ximas pruebas de esfuerzo europeas a la banca -en junio- generan dudas. Y, sobre todo, la cacofon¨ªa de voces sobre la reestructuraci¨®n de la deuda griega, un tab¨² que est¨¢ cada vez m¨¢s cerca de romperse, ha dejado esta semana a Europa frente a otro momento de la verdad.
La agencia S&P rebaja a negativa la perspectiva de la deuda italiana
Se va del BCE en octubre Jean-Claude Trichet, que ha domado las fuertes presiones alemanas sobre la pol¨ªtica econ¨®mica europea y cuyo manejo de la crisis ha sido notable. Los analistas temen que la pol¨ªtica del eurobanco se endurezca en los pr¨®ximos meses, hasta que su sustituto, el italiano Mario Draghi, se asiente en el cargo. Y acaba de renunciar Dominique Strauss-Kahn en el FMI por la archiconocida denuncia de agresi¨®n sexual a una camarera de un hotel de Manhattan: desaparece as¨ª una figura clave para explicar el papel del Fondo en los planes de rescate europeos. El poder¨ªo de Strauss-Kahn permiti¨® imponer austeridad a los pa¨ªses rescatados y, a la vez, disolver las dudas en los pa¨ªses del norte reacios a las ayudas. De no ser europeo, su sustituto podr¨ªa endurecer los cr¨¦ditos en Europa.
"Esas dos bajas no van a suponer un cambio remarcable: solo lo que digan Par¨ªs y Berl¨ªn es ahora importante", explica Daniel Gros, del think tank de Bruselas CEPR. El problema es que ni Alemania ni Francia est¨¢n lanzando un mensaje claro. Del Eurogrupo de esta semana trascendi¨® que la UE ha abierto la puerta a una reestructuraci¨®n suave de la deuda griega, que muy probablemente no implicar¨¢ una quita -esto es, una rebaja en el importe que se debe-, pero s¨ª permitir¨¢ ampliar los plazos de devoluci¨®n e incluso reducir los intereses.
La ministra francesa Christine Lagarde y el BCE han negado categ¨®ricamente esa informaci¨®n. Sin embargo, Alemania prepara desde hace semanas a su sistema financiero para amortiguar las consecuencias de la reestructuraci¨®n, seg¨²n confirmaron a este diario fuentes que han estado inmersas en las negociaciones. "La cuenta atr¨¢s para la reestructuraci¨®n es imparable, pero va a ir a c¨¢mara lenta: los pol¨ªticos europeos, incluso los griegos, siguen titubeando en p¨²blico y argumentando en su contra, pero no va a quedar m¨¢s remedio que aceptarla tarde o temprano porque sin la reestructuraci¨®n Grecia es incapaz de salir de la situaci¨®n en la que se ha metido", asegura Charles Wyplosz, economista del Graduate Institute de Ginebra.
La UE ya ha comenzado a trabajar en esa reestructuraci¨®n suave -con el ya habitual neologismo: los bur¨®cratas de Bruselas hablan de reperfilar la deuda- a instancias del ministro de Finanzas alem¨¢n, Wolfgang Sch?uble, que desde hace meses considera que los acreedores privados tambi¨¦n deber¨ªan contribuir de forma voluntaria a la superaci¨®n de la crisis. El problema es que eso supone abrir otra etapa de la crisis fiscal. El BCE posee deuda griega por valor de entre 40.000 y 50.000 millones de euros, seg¨²n distintas fuentes, por activos que ha aceptado como garant¨ªa en las operaciones de refinanciaci¨®n y bonos adquiridos en el programa de compra de deuda p¨²blica. Los bancos alemanes y los franceses tambi¨¦n siguen muy expuestos a la deuda griega y necesitan tiempo para deshacer posiciones y tener suficiente colch¨®n de capital para suavizar el golpe. "La reestructuraci¨®n rompe un dique de contenci¨®n para la banca europea y abre un horizonte dif¨ªcil de adivinar. Puede haber un contagio desordenado y el BCE ya ha advertido que podr¨ªa convertirse en un Lehman Brothers europeo. Aun as¨ª es del todo necesaria", sostiene el economista Antonio Torrero, de la Universidad de Alcal¨¢.
"Al menos se introduce en la crisis fiscal una dosis de realismo: es imposible que la econom¨ªa griega salga adelante sin una reestructuraci¨®n, con la profunda cicatriz que van a dejar la austeridad y la crisis econ¨®mica", afirma Joan Maj¨®, exministro de Industria y asesor de la Comisi¨®n Europea. Tantas inc¨®gnitas impiden que la tensi¨®n se relaje tanto en Grecia como en el resto de los pa¨ªses rescatados. "Europa no est¨¢ al borde del precipicio como antes del rescate griego, hace ya un a?o, pero s¨ª frente a un nuevo momento dif¨ªcil de la crisis fiscal", a?ade.
Grecia, Irlanda y Portugal. La teor¨ªa de la profec¨ªa autocumplida sit¨²a a Espa?a como la siguiente ficha de ese domin¨® de rescates que comenz¨® hace un a?o. "Espa?a sigue m¨¢s cerca de B¨¦lgica e Italia que de Portugal, Irlanda y sobre todo Grecia, aunque en los ¨²ltimos d¨ªas se aproxima al furg¨®n de cola", resume Santiago Carb¨®, profesor de la Universidad de Granada. Precisamente ayer Standard & Poor's a?adi¨® una pizca de presi¨®n a Italia: la agencia de calificaci¨®n rebaj¨® la perspectiva de la deuda italiana de estable a negativa, aunque la mantiene en A+. Esto significa que es probable una pr¨®xima rebaja del rating.
No habr¨¢ problemas mientras Espa?a siga cumpliendo a rajatabla los objetivos de d¨¦ficit, mantenga el crecimiento -aunque sea nimio- y ordene su sistema financiero. El pr¨®ximo examen para la banca son las pruebas de resistencia europeas de junio; despu¨¦s llegar¨¢ la prueba del Banco de Espa?a, en septiembre. "Espa?a est¨¢ sujeta a que nada de eso salga mal aqu¨ª y a que Europa remonte este en¨¦simo momento de la verdad. No parece que nada de eso vaya a salir mal, pero qui¨¦n sabe", aventura Alfredo Pastor, de la escuela de negocios IESE.
DSK: "El pacto EE UU-Europa est¨¢ roto"
"Vamos a ser honestos: el acuerdo t¨¢cito entre EE UU y Europa [por el liderazgo en el FMI y el Banco Mundial] ha expirado: ese pacto ya est¨¢ roto", dijo Dominique Strauss-Kahn (DSK) a los periodistas indios el pasado diciembre, cuando a¨²n era el poderoso director gerente del Fondo. Ser¨ªa "justo" que esos dos sillones de la calle 19 de Washington, a un cuarto de hora escaso de la Casa Blanca y del Tesoro, los ocuparan dirigentes de otras nacionalidades, dijo entonces. De eso hace ya casi medio a?o, pero Europa se ha deshecho de esas promesas, que ya se dejaron o¨ªr tras el nombramiento del alem¨¢n Horst K?hler y del espa?ol Rodrigo Rato, los dos antecesores de DSK en el Fondo, que tampoco agotaron su mandato.
Tanto Bruselas como la pr¨¢ctica totalidad de los Gobiernos europeos han cerrado filas para que la jefatura del Fondo siga en manos de un europeo en un momento clave para lidiar con la crisis fiscal del continente. Pero entre los acad¨¦micos no existe la misma unanimidad: "El nuevo director gerente no deber¨ªa ser un europeo. No hay razones cre¨ªbles para nombrar a alguien sobre la base de la confusi¨®n europea actual. Hay gran cantidad de personas altamente cualificadas fuera de Europa y ahora es su turno: ese tipo de nacionalismo es lamentable", critic¨® el economista Charles Wyplosz desde Ginebra. Seg¨²n el espa?ol Joan Maj¨®, "la maquinaria del FMI va a seguir funcionando sin grandes sobresaltos sea quien sea el pr¨®ximo jefe del Fondo: en realidad no se trata de un cargo tan influyente". Y sin embargo desde Washington el cambio parece fundamental: "Strauss-Kahn y Olivier Blanchard -su economista jefe- le han dado al Fondo un nuevo aire y una nueva c¨²pula podr¨ªa devolver a la instituci¨®n a la ortodoxia del pasado, pero lo verdaderamente preocupante ser¨ªa un cambio de pol¨ªtica con respecto a los cr¨¦ditos en Europa", indican fuentes pr¨®ximas al FMI.
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