El mar se lleva las casas

El ¨²ltimo temporal mar¨ªtimo de hace tres semanas ha sido la puntilla que ha acabado por dejar casi en estado ruinoso una veintena de las 300 viviendas que bordean los casi dos kil¨®metros de la playa de Guardamar del Segura, en La Vega Baja, invadiendo la zona mar¨ªtimo-terrestre.

Los propietarios de las casas decidieron por cuenta propia y sin autorizaci¨®n de la Direcci¨®n General de Costas adoptar medidas para evitar que algunas de estas construcciones, en r¨¦gimen de concesi¨®n hasta el a?o 2018, se desplomaran. Desde el pasado viernes, bloques de hormig¨®n, sacos de arena y montones de piedra natural permanecen apilados en primera l¨ªnea de playa a modo de dique, con la consiguiente queja de visitantes y vecinos. Costas proh¨ªbe cualquier actuaci¨®n sobre estas viviendas, pero los due?os sostienen que si no las rehabilitan corren un serio peligro de derrumbe.

Los propietarios denuncian que la playa no se ha regenerado

Una afectada dice "que el nuevo espig¨®n cambi¨® la olas"

Viendo que algunas viviendas estaban seriamente afectadas por el oleaje, los residentes optaron por tomar medidas a las bravas, pese a que la Direcci¨®n General de Costas proh¨ªbe cualquier tipo de intervenci¨®n. ?Pero entonces qu¨¦ hacemos?, se?ala Felipe P¨¦rez, propietario de uno de estos chal¨¦s levantados en la playa de Babilonia. Ante la falta de soluciones por parte de las Administraciones, algunos decidieron contratar maquinaria pesada para colocar bloques de hormig¨®n armado delante de sus viviendas; otros optaron por sacos de arena o piedra natural. Estas edificaciones, construidas hace ya m¨¢s de medio siglo y otorgadas en r¨¦gimen de concesi¨®n, fueron levantadas sin cimentaci¨®n y sobre la arena, de forma que el envite del oleaje ha erosionado durante a?os la estructura sobre la que se levantan las casas. En los ¨²ltimos a?os, el deterioro ha sido exponencial, y no solo visible en la hilera de chal¨¦s levantada casi en la orilla del mar sino de la misma playa, ahora pr¨¢cticamente desaparecida. En opini¨®n de los propietarios, "la no regeneraci¨®n del litoral y la construcci¨®n de un espig¨®n en direcci¨®n contraria a Levante" son los causantes de la progresiva desaparici¨®n de la arena.

"El nuevo espig¨®n cambi¨® la din¨¢mica de las olas", enfatiza otra de las propietarias. La realidad es que los ¨²ltimos temporales han resquebrajado fachadas y, en otros casos, han afectado gravemente las estructuras de las casas, que acabaron vini¨¦ndose abajo. "La vista es desoladora", comenta una visitante que se ha acercado hasta lo que un d¨ªa fue playa.

Este trozo del litoral se ha convertido en visita obligada para los turistas, que ven "impresionados" el visible estado de degradaci¨®n de la zona. Mientras, los propietarios se manifiestan "impotentes" ante "la pasividad" de las Administraciones local y central.