Medio Ambiente planea obligar a Madrid a implantar un peaje urbano

Que Madrid tiene problemas con la contaminaci¨®n ya no lo niega nadie. Ni Ana Botella, la concejal de Medio Ambiente, que hace unos meses tuvo que anunciar que la capital supera los l¨ªmites legales y necesita pedir una moratoria a la Uni¨®n Europa para tratar de cumplirlos en los pr¨®ximos cinco a?os. El problema de Madrid se llama di¨®xido de nitr¨®geno, un gas irritante de las v¨ªas respiratorias que procede principalmente del tubo de escape de los coches y, m¨¢s en concreto, de los di¨¦sel. El Ministerio de Medio Ambiente tiene la receta para combatir ese y otros contaminantes: aplicar un peaje urbano. Hacer pagar a los veh¨ªculos que entren a la ciudad es una de las medidas del Plan nacional de mejora de la calidad del aire que Medio Ambiente ha colgado en su p¨¢gina web para informaci¨®n p¨²blica.

El documento, que debido a un error se ha hecho p¨²blico antes de consensuarlo con las autonom¨ªas, prev¨¦ tambi¨¦n limitar la velocidad m¨¢xima en la periferia de las ciudades a 80 kil¨®metros por hora en las horas de mayor tr¨¢fico, lo que afectar¨ªa a las v¨ªas de circunvalaci¨®n y a las radiales de la capital. Medio Ambiente tambi¨¦n quiere delimitar zonas en las que se proh¨ªba circular a los coches m¨¢s contaminantes, una medida que ya inclu¨ªa la Estrategia local de calidad del aire que present¨® Alberto Ruiz-Gallard¨®n en 2006. Las llamadas zonas de emisiones bajas (ZEB) tendr¨ªan que haber entrado en vigor en 2008, pero nunca llegaron.

Medio Ambiente propone tambi¨¦n una ambiciosa reforma fiscal para penalizar a los veh¨ªculos m¨¢s contaminantes, los di¨¦sel. Es algo que Gallard¨®n, en contra de la l¨ªnea que ha defendido el PP, lleva tiempo pidiendo y que ha sometido a votaci¨®n en la Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias. El PSOE vet¨® la propuesta en la ¨²ltima comisi¨®n ejecutiva antes de las elecciones.

El documento se iba a presentar a las comunidades en una conferencia sectorial la semana pasada, pero se pospuso. Madrid lleva meses diciendo que espera las directrices de Medio Ambiente para elaborar su propio plan de calidad del aire.

El documento, de varios cientos de p¨¢ginas, a¨²n tiene que ser discutido con las comunidades aut¨®nomas. De ah¨ª que Medio Ambiente asegure que es un "borrador". La p¨¢gina web en la que puede consultarse asegura que se somete a tr¨¢mite de informaci¨®n p¨²blica desde el 15 de junio al 30 de junio de 2011. El texto detalla en el apartado de Aplicaci¨®n, seguimiento y revisi¨®n que "los ministerios afectados, as¨ª como el resto de autoridades auton¨®micas o locales, adoptar¨¢n las medidas necesarias para el desarrollo y aplicaci¨®n del Plan nacional de mejora de la calidad del aire en el ¨¢mbito de sus respectivas competencias". El Ayuntamiento de Madrid est¨¢ pendiente de redactar su propio plan. El anterior est¨¢ caducado -estuvo vigente entre 2006 y 2010- y necesita presentarle otro a Bruselas para que le conceda la moratoria.

Lo que propone Medio Ambiente va mucho m¨¢s all¨¢ de lo que Gallard¨®n ha anunciado que quiere hacer para mejorar la calidad del aire. Algunas medidas las contemplaba el propio Ayuntamiento y no llegaron a realizarse; otras est¨¢n radicalmente en contra de sus planes. En lo que s¨ª coinciden es en la reforma fiscal que el concejal de Hacienda, Juan Bravo, lleva meses defendiendo.

- Penalizar los di¨¦sel. La reforma fiscal que propone Medio Ambiente afectar¨ªa al impuesto de matriculaci¨®n, al de hidrocarburos y al de circulaci¨®n, lo que a su vez supone modificar leyes como la de Haciendas Locales. La fiscalidad actual beneficia el consumo del di¨¦sel (que emite menos CO2, pero m¨¢s part¨ªculas y m¨¢s di¨®xido de nitr¨®geno) frente a la gasolina, admite el documento. Se tratar¨ªa, por tanto, de equiparar la fiscalidad de unos y otros.

En cuanto al impuesto de circulaci¨®n, el plan pretende introducir criterios ambientales en los tipos impositivos, de forma que se pueda bonificar a los coches que emiten menos contaminantes (CO2, NO2, part¨ªculas...) para incentivar la compra de los m¨¢s limpios y renovar un parque muy dieselizado. Para ello se usar¨ªa la normativa Euro sobre homologaci¨®n de veh¨ªculos, que exige que los coches matriculados cumplan unos m¨¢ximos de emisiones. Es lo mismo que Gallard¨®n propuso a la FEMP, y que va en contra de la ¨²ltima propuesta del PP nacional en el Congreso: reformar el tributo para incluir una deducci¨®n del 50% sobre el impuesto actual a coches que emitan menos de 200 gramos de CO2 por kil¨®metro siempre que se entregue otro de m¨¢s de 10 a?os (en la pr¨¢ctica, un todoterreno de lujo podr¨ªa pagar la mitad del impuesto si es di¨¦sel, pero no si es gasolina).

- Peaje urbano. Una de las medidas que propone el Ministerio de Medio Ambiente es la introducci¨®n de un peaje urbano, es decir, "aplicar una tasa o tarifa a los autom¨®viles por la utilizaci¨®n del viario en un ¨¢mbito urbano". El borrador del plan nacional precisa que debe ser finalista y que los ingresos deben destinarse a mejoras del transporte p¨²blico. El documento asegura que los costes ser¨ªan "elevados", al menos en la primera fase para su implantaci¨®n. Incluso ofrece un c¨¢lculo, con datos de 2006, seg¨²n el cual costar¨ªa 150.000 euros por carril. Sin embargo, asegura que se ven compensados por los ingresos derivados de su funcionamiento. "Deben ser rentables econ¨®micamente", a?ade. El documento sugiere tambi¨¦n que exista una tarifa incrementada para episodios de contaminaci¨®n.

El alcalde, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, suele argumentar que un peaje para entrar en la ciudad perjudicar¨ªa a la actividad econ¨®mica, y que propiciar¨ªa, por ejemplo, la deslocalizaci¨®n de empresas. El texto apunta a otra cuesti¨®n que probablemente tambi¨¦n ha sopesado el equipo del alcalde: los "problemas de aceptaci¨®n p¨²blica y pol¨ªtica". El peaje, asegura Medio Ambiente, "puede ser muy impopular al percibirse solo como recaudatorio". Y apunta a otra pega: "Su posible falta de equidad social". Sin embargo, los beneficios superan los perjuicios, a?ade. La mejora del transporte p¨²blico, de la calidad del aire y, por tanto, de la salud, "deben compensar el efecto de las tarifas sobre determinados grupos de poblaci¨®n".

Las experiencias en otras ciudades muestran que "la aceptaci¨®n aumenta con el tiempo", se?ala el texto, porque se ha demostrado que se puede llegar a reducciones "muy importantes" del tr¨¢fico privado. Un ejemplo ser¨ªa el 20%-25% de Estocolmo, cuando el objetivo era el 17%.

- Reducci¨®n de la velocidad. A menos velocidad, menos consumo de combustible y, por tanto, menos emisiones de los motores. Con esa premisa, Medio Ambiente propone limitar la velocidad m¨¢xima de circulaci¨®n en la periferia de las ciudades. En concreto, a 80 kil¨®metros por hora durante las horas de mucho tr¨¢fico. Se har¨ªa mediante un sistema de velocidad variable que permitir¨ªa, en las horas de menor volumen de tr¨¢fico, como el mediod¨ªa o la noche, incrementar el m¨¢ximo hasta los 110 km/h. El documento valora que, adem¨¢s de reducirse las emisiones, se lograr¨ªa una disminuci¨®n de la congesti¨®n del tr¨¢fico en la entrada de la ciudad, con menor alternancia de paradas y arranques. Otro efecto beneficioso ser¨ªa "una dr¨¢stica reducci¨®n de los accidentes de circulaci¨®n", destaca.

- Vetar los coches 'sucios'. El plan del Ministerio de Medio Ambiente habla de "zonas urbanas de atm¨®sfera protegida" (ZUAP), ¨¢reas delimitadas para aplicar en ellas medidas sobre el tr¨¢fico. Por ejemplo, "la limitaci¨®n permanente del acceso a veh¨ªculos m¨¢s contaminantes". ?Cu¨¢les?Los coches se clasificar¨ªan seg¨²n sus emisiones en cinco categor¨ªas. Todos llevar¨ªan pegatinas de colores para identificarlos, un sistema que seg¨²n el documento debe poner en marcha el Ministerio de Industria. Los que tengan adhesivo rojo (corresponde a los di¨¦sel Euro 0 a Euro 2, gasolina Euro 0 y todos los anteriores a 1992) quedar¨ªan prohibidos en la primera fase, que Medio Ambiente calcula que puede ponerse en marcha el a?o que viene. La propuesta del Ministerio habla incluso de prohibir a los autobuses urbanos contaminantes entrar en las ZUAP.

Este sistema de etiquetado le ser¨¢ muy ¨²til al alcalde cuando lleve a la pr¨¢ctica las tarifas variables en los parqu¨ªmetros que anunci¨® durante la campa?a electoral. Quiere que paguen m¨¢s los coches m¨¢s contaminantes, por un lado, y todos cuando los niveles de contaminaci¨®n sean elevados.