Indignados por 247.707 euros
Un escalofr¨ªo ha recorrido el cuerpo del contribuyente: la factura de los 45 d¨ªas de acampada de los rebeldes indignados en la plaza de Catalunya le ha costado al erario p¨²blico 247.707 euros. Un total de 72 toneladas de basura han sido retiradas de la c¨¦ntrica plaza; 54 de los 160 desalojados por 660 polic¨ªas ten¨ªan antecedentes penales y pertenec¨ªan a 19 nacionalidades. A la vista matem¨¢tica est¨¢ la rapidez y diligencia en el proceder y comunicar de las autoridades, nacionales y municipales. Todas ellas han querido dejar claro que los que permanec¨ªan en la plaza, m¨¢s que indignados, eran irreductibles y poco ten¨ªan que ver con el grueso del Movimiento 15-M, que ya se hab¨ªa desmarcado de la acampada residual. Pero en el aire flota un cierto aroma de revancha por la ocupaci¨®n, por las cr¨ªticas vertidas hacia los pol¨ªticos, por la alteraci¨®n de la vida ciudadana, por la necesidad urgente y casi obsesiva de demostrar, en suma, que la pretendida superioridad moral de los acampados es una falacia, puesto que rompen, ensucian y cuestan dinero. Igual que aquellos a quienes los indignados reprochan sus flaquezas.
Existe la necesidad urgente de demostrar que la pretendida superioridad moral de los acampados no es m¨¢s que una falacia
Sea como fuere, en ¨¦poca de crisis hay que ser cuidadoso con los gastos y con los gestos. Quiz¨¢ por ello, el d¨ªa en que se dio a conocer el oneroso coste de la acampada parec¨ªa elegido adrede, pues era la fecha l¨ªmite para la presentaci¨®n de la declaraci¨®n de la renta. Es loable que tanta preocupaci¨®n coincida en la misma semana en que ha trascendido que el presidente, el vicepresidente y el consejero delegado de una entidad financiera suman retribuciones de 10,1 millones de euros anuales. La cr¨ªtica entrar¨ªa en el terreno de lo opinable si el dinero fuera privado, pero sucede que esa misma entidad ha recibido en segunda entrega 4.465 millones de euros de dinero p¨²blico procedente del Fondo de Reestructuraci¨®n Ordenada Bancaria (FROB). Tambi¨¦n esta misma semana, hablando de cantidades, se ha apagado el AVE manchego. Su coste era de 18.000 euros por transportar a nueve personas diariamente. "Renfe siente dolor cuando un tren pasea chapa", dijo un directivo de la compa?¨ªa. Pues debe de sentir mucho dolor, porque Espa?a es el pa¨ªs que m¨¢s chapa pasea por la alta velocidad. No hemos sido capaces de amortizar siquiera el AVE Barcelona-Madrid, si se incluye todo el mantenimiento. La l¨ªnea entre las dos capitales deber¨ªa transportar nueve millones de pasajeros anuales para ser rentable. Hasta ahora, desde su inauguraci¨®n en 2008, ha sumado solo ocho millones.
Para repartir m¨¢s la responsabilidad pol¨ªtica y geogr¨¢ficamente, ?qu¨¦ decir de los 22 millones de euros empleados por el tripartito en comprar, sin convocar concurso, material para llevar agua a Barcelona en plena sequ¨ªa del 2008? La irregularidad -hija de la urgencia- fue archivada por la fiscal¨ªa, pero est¨¢ siendo investigada por el Tribunal de Cuentas, tal como adelant¨® el pasado lunes este diario, sin que levantara entonces excesivas sospechas.
Errores y despilfarros tambi¨¦n los hay en la vertiente deportiva. En mayo de 2009, memorable por la "Copa, Lliga, Champions" del Bar?a, la factura en destrozos urbanos fue de 250.000 euros. Un a?o antes, el dispositivo especial de seguridad de la semifinal entre el Bar?a y el Manchester United cost¨® 224.000 euros al erario p¨²blico. A esa suma hay que a?adir la preparaci¨®n de un ¨¢rea, en el Port Ol¨ªmpic, para reunir a los seguidores del equipo ingl¨¦s: 40.000 euros m¨¢s. En total, 264.000 euros, de los que el Ayuntamiento y la Generalitat intentaron en vano cobrar una parte al club.
Como broche, un elemento de espiritualidad. En noviembre pasado, la visita de Benedicto XVI a Barcelona, de un d¨ªa de duraci¨®n, cost¨® al contribuyente 1,7 millones de euros.
Y as¨ª podr¨ªa continuar la interminable relaci¨®n de hechos en los que la demagogia adopta el color de la ideolog¨ªa de quien selecciona. Paguen los indignados esos 247.707 euros por ser los causantes de tanto estropicio, piden algunos. Y puestos a recaudar, habr¨¢ que pasar con insistencia el cepillo a quienes se hacen los dormidos en otras misas.
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