Rubalcaba defiende que la banca pague tambi¨¦n el coste de la salida de la crisis

Finalizado el debate sobre el estado de la naci¨®n, en que el protagonismo del PSOE correspondi¨® al presidente saliente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, llega la hora del candidato Alfredo P¨¦rez Rubalcaba. Todo el partido, incluido su secretario general, se va a poner a partir de ahora al servicio del que el pr¨®ximo fin de semana ser¨¢ proclamado oficialmente candidato, y su horizonte inmediato ser¨¢ la preparaci¨®n de la conferencia pol¨ªtica prevista para la ¨²ltima semana de septiembre.

Rubalcaba ya trabaja para esa cita, con las reuniones que celebra desde finales de mayo con socialistas en todas las autonom¨ªas. Ayer lo hizo con los secretarios provinciales, y apunt¨® algunas claves de su estrategia. Una de ellas fue la propuesta de que los bancos y los poderes econ¨®micos compartan tambi¨¦n el coste de la salida de la crisis y no la hagan recaer solo en los sectores m¨¢s afectados por la misma.

El candidato quiere convencer de que la derecha no gestiona mejor la crisis

En esa l¨ªnea, dijo: "?Por qu¨¦ los bancos dieron hipotecas de alto riesgo? ?Qui¨¦n tiene m¨¢s responsabilidad quien la pide o quien la concede? Algunos directores de sucursales cobraron porcentajes por unas hipotecas que sab¨ªan que estaban en el l¨ªmite o que eran imposibles de pagar. Los bancos tienen necesidad de cobrarlas, pero no pueden hacerlo a costa de la gente".

En este alegato revel¨® una de las claves de su estrategia en la elaboraci¨®n del programa electoral. En la medida que la econom¨ªa espa?ola est¨¢, aunque de manera muy lenta, en la l¨ªnea de salida de la crisis, Rubalcaba cree que el programa socialista debe recoger medidas que supongan un reparto de su coste. Y puso como ejemplo la decisi¨®n del Consejo de Ministros del viernes pasado de adoptar medidas a favor de los m¨¢s castigados: los hipotecados, los peque?os empresarios, los aut¨®nomos y los Ayuntamientos.

Detr¨¢s hay toda una filosof¨ªa, que ayer revel¨® Rubalcaba. Aclar¨®, en primer lugar, que ya no funciona alentar el miedo a la derecha como estrategia de obtenci¨®n de voto, ni tampoco apelar al reconocimiento de los logros pol¨ªticos y sociales de los distintos Gobiernos socialistas.

La clave de la estrategia, por tanto, debe radicar en actitudes positivas y en presentar un proyecto cre¨ªble, defendi¨®. Las encuestas de que disponen los socialistas revelan que una mayor¨ªa de espa?oles censura la actitud del PP por su falta de apoyo al Gobierno contra la crisis y por no ofrecer propuestas. Pero esa mayor¨ªa atribuye al PP m¨¢s capacidad para sacar a Espa?a de la crisis que el PSOE, lo que confirma que est¨¢ muy instalada la idea de que la derecha gestiona mejor la econom¨ªa que la izquierda.

Este dato resulta clave en la nueva estrategia socialista. De ah¨ª que Rubalcaba apueste como objetivo principal por elaborar un "proyecto de calado" que desmienta la tesis de que la derecha gestiona la econom¨ªa mejor que la izquierda. Ayer adelant¨® que ese proyecto debe tener dos rasgos: "ser cre¨ªble y que salga al paso de los problemas de los ciudadanos".

Rubalcaba sabe que est¨¢ muy instalada la idea de que los socialistas son capaces de elaborar grandes teor¨ªas pero que son m¨¢s discutibles sus aplicaciones, su cercan¨ªa. En la utilidad del programa, en la propuesta de soluciones sencillas para los problemas que la crisis y el paro han generado, se comprometi¨® a centrar sus esfuerzos. Y de ah¨ª que elevara a categor¨ªa de ejemplo su plan de favorecer a los m¨¢s afectados por la crisis, recogido en el ¨²ltimo Consejo de Ministros. En esa l¨ªnea, reclam¨® ideas a los reunidos, y Jos¨¦ Blanco, vicesecretario general, que le acompa?¨®, anunci¨® que un tercio de los participantes en la elaboraci¨®n del programa pertenecer¨¢n a movimientos sociales sin partido. Blanco hizo una alusi¨®n al Movimiento 15-M, del que alab¨® su ansia de participaci¨®n pol¨ªtica, pero descalific¨® el que no distinga entre PP y PSOE. Precisamente, Rubalcaba se hizo eco de una iniciativa del 15-M al defender, como otra clave de su estrategia, la huida de la confrontaci¨®n con el PP, porque "solo conduce a desprestigiar la pol¨ªtica".