La justicia da otro varapalo a Barber¨¢ y le impide las demoliciones en El Cabanyal

El barrio valenciano de El Cabanyal seguir¨¢ a salvo de las excavadoras hasta que se pronuncie el Tribunal Constitucional. Y ello, pese a las pretensiones de la alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢ (PP), de buscar una v¨ªa judicial que le permita sortear la orden del Ministerio de Cultura que le impide actuar en el barrio. El plan de Barber¨¢ consiste en la apertura de una avenida que atraviesa El Cabanyal por la mitad. Esta avenida supondr¨ªa la destrucci¨®n de cientos de casas y perpetrar un "expolio" del patrimonio de acuerdo a la opini¨®n del Ministerio de Cultura.

El Tribunal Supremo ha desestimado el recurso del Ayuntamiento de Valencia que solicitaba poder intervenir, al menos, en la parte no protegida del barrio marinero. El alto tribunal, que entierra as¨ª las esperanzas del Ayuntamiento de ejecutar su plan a corto plazo, condena al gobierno local adem¨¢s a pagar las costas del proceso.

Hace algo m¨¢s de tres a?os, en junio de 2009, el Supremo reabri¨® el caso de El Cabanyal. Le hab¨ªa dado la raz¨®n a Barber¨¢ en detrimento de la asociaci¨®n de vecinos y dem¨¢s entidades del barrio y entend¨ªa que su proyecto no supon¨ªa un expolio del patrimonio hist¨®rico. Pocos meses despu¨¦s, el alto tribunal estim¨®, sin embargo, su reapertura. Rescat¨® una resoluci¨®n judicial anterior y exigi¨® al Ministerio de Cultura que se pronunciase definitivamente al respecto, que dijese si el plan municipal era adecuado o no. Tras recoger informes de instituciones como el Consejo Superior de Colegios de Arquitectos de Espa?a, la Real Academia de la Historia o el Museo Nacional de Cer¨¢mica Gonz¨¢lez Mart¨ª, Cultura orden¨® al Ayuntamiento valenciano que paralizase su proyecto. Entonces, Barber¨¢ recurri¨® a la Audiencia Nacional, que tumb¨® hasta dos veces su petici¨®n. Barber¨¢ acudi¨® entonces al Tribunal Supremo que, de la misma manera, ha desestimado el recurso. Cultura obliga a la alcaldesa a suspender la ejecuci¨®n del plan mientras este "no se adapte y garantice los valores hist¨®rico-art¨ªsticos del barrio".

Paralelamente, el Constitucional debe resolver otro embrollo judicial en torno al barrio generado por la Generalitat. A instancias de Barber¨¢, el Gobierno valenciano aprob¨® en enero de 2010 una ley que sorteaba la orden ministerial. El Constitucional ya suspendi¨® cautelarmente la ley a instancias del Ejecutivo, que pidi¨® su suspensi¨®n. Ahora falta que decida definitivamente qu¨¦ prevalece, si la orden del Ministerio de Cultura o la ley de la Generalitat. La Generalitat entiende que el plan "no perjudica, da?a o deteriora la protecci¨®n del conjunto hist¨®rico".