"?El conductor ni se par¨®!"

Apenas 24 horas despu¨¦s de convertirse en primera p¨¢gina del Tour muy a su pesar, Juan Antonio Flecha se mira las piernas, hinchadas por la inflamaci¨®n, las rodillas vendadas, y suspira con pesar. "?Con lo fino que hab¨ªa venido!", dice el primer ciclista que se recuerde al que un coche acreditado del Tour atropella durante una etapa. Cay¨® junto a su compa?ero de fatigas y desgracia, Johnny Hoogerland. "Ahora me ha agarrado el masajista y me ha dado un buen repaso, al menos, me dice que no me ha encontrado tan mal como esperaba".

Pregunta. ?Le ha llamado Voeckler para ver c¨®mo est¨¢?

Respuesta. No, y tampoco esperaba que me llamara. Tampoco me preocupa, he pasado bastante de lo que pueda decir.

"Despu¨¦s del accidente tuve mi momento de llanto a solas en el autob¨²s"

P. ?Y c¨®mo vio que Voeckler incluso acelerara justo despu¨¦s de su ca¨ªda y la de Hoogerland?

R. Pues lo veo normal dentro de lo que es Voeckler, porque va as¨ª en todas las escapadas, sembrando ciza?a. Antes, justamente, Casar, otro del grupo, le hab¨ªa echado una bronca porque atacaba bajando despu¨¦s de pelear por los puntos de la monta?a, en vez de esperar a los que no los disput¨¢bamos. Iba con la fijaci¨®n del maillot amarillo, le daba todo igual. Ya le conocemos, me habr¨ªa sorprendido lo contrario.

P. Pero alguien se habr¨¢ disculpado, ?no?

R. Directamente solo Prudhomme [Christian, el director del Tour], que vino a verme al hotel por la ma?ana, y como yo estaba en el hospital le dio disculpas a Dave Braislford, el director del equipo.

P. ?Recuerda los momentos anteriores al atropello? ?Oy¨® algo?

R. Curiosamente no o¨ª nada. Todo el d¨ªa hab¨ªan estado pasando coches con invitados como moscas cojoneras, armando ruido con el claxon para apartarnos y nos pasaban rozando, pero este adelant¨® sin tocar el claxon. Me sorprendi¨® y no me dio tiempo a apartarme. Vi un coche que se me echaba encima, pero claro, nunca te esperas que se te eche encima de verdad. Nunca ha pasado esto en el Tour, ?c¨®mo iba a esperar que me pasara a m¨ª?

P. ?Habl¨® con Hoogerland despu¨¦s de la etapa?

R. Habl¨¦ antes de terminar, cuando los dos nos quedamos descolgados del pelot¨®n. ?l se miraba sangrando por todas partes y me dec¨ªa: "Tendr¨¦ que ir al hospital". Y yo le dec¨ªa que yo tambi¨¦n.

P. ?Cuando el pelot¨®n le super¨®, qu¨¦ le dec¨ªan?

R. La gente me animaba al verme destrozado y a Johnny tambi¨¦n. Pensaban que algo nos habr¨ªa pasado, pero no sab¨ªa nadie que hab¨ªa sido un coche. No se lo pod¨ªan creer.

P. ?C¨®mo ha vivido la reacci¨®n de los medios a la historia?

R. Aqu¨ª he visto que ni en el hospital le daban importancia, todos lo han tratado como otro incidente m¨¢s, cosas del Tour, pero s¨¦ que en Holanda, en Italia, en Espa?a, s¨ª se ha sabido valorar.

P. ?Ha venido el conductor a pedirle perd¨®n?

R. No ha venido y creo que si viniera pasar¨ªa de hablar con ¨¦l. La Televisi¨®n Francesa no se ha disculpado [seg¨²n fuentes conocedoras de la identidad del ocupante del coche, se tratar¨ªa de un famoso presentador televisivo cuya identidad se guarda para que el Tour no se vea obligado a expulsarlo] conmigo tampoco.

P. ?Y si viera al conductor?

R. Un d¨ªa entren¨¢ndome, un coche que sal¨ªa de un camino me vio y no fren¨® y choqu¨¦ con ¨¦l hasta salir volando. Me levant¨¦ y no ten¨ªa ni ganas de hablar con ¨¦l, ni de discutir. Ni le mir¨¦ a la cara, no se lo merec¨ªa. ?Y el del Tour ni siquiera se par¨® a ver qu¨¦ nos hab¨ªa hecho! Eso es lo peor, ni se par¨®. Yo me habr¨ªa parado.

P. ?C¨®mo se sinti¨® despu¨¦s?

R. Tuve mi momento de llanto a solas en el autob¨²s.

P. ?Qu¨¦ le pareci¨® que les dieran a los atropellados el premio a la combatividad?

R. Me pareci¨® surrealista. Me habr¨ªa parecido bien que nos premiaran, pero no precisamente por ser los m¨¢s combativos, un premio que merec¨ªa Voeckler. Nos quisieron dar un premio de consolaci¨®n y ni siquiera cumpl¨ªamos las bases para merecerlo.

P. ?Seguir¨¢ en el Tour?

R. Prefiero pensar en tirar para adelante, quiero seguir pas¨¢ndomelo bien sobre la bici y quedan etapas muy bonitas y algo habr¨¢ que hacer.