El bar¨®n invencible de La Gomera

Casimiro Curbelo era hasta la pasada semana un senador completamente desconocido fuera de Canarias. En su ficha de la web del Senado figura que desde que est¨¢ en la C¨¢mara Alta no ha registrado ninguna iniciativa, ni ha intervenido nunca. Consta en su registro de actividades que es presidente del cabildo de La Gomera. Ahora es conocido por el incidente a la salida de una sauna de Madrid, cuando estaba con su hijo y fueron detenidos por insultar e intentar agredir a agentes de polic¨ªa.

Cuando naci¨® en La Gomera en 1955 la pol¨ªtica casi no exist¨ªa. Por entonces, el caciquismo y los terratenientes marcaban las reglas de juego. Su familia cultivaba, viv¨ªa y com¨ªa de lo que produc¨ªa la tierra. Algo muy distinto a ser senador.

En el curbelismo, los que mueren fuera son repatriados gratis a su tierra

A Santa Cruz de Tenerife se fue a hacer Filosof¨ªa y Letras Casimiro Curbelo, sin mayor pasi¨®n pol¨ªtica que la que descubri¨® en 1982 con la victoria de Felipe Gonz¨¢lez en las elecciones generales de aquel a?o. La pasi¨®n roja le inund¨®, de repente, y en solo un a?o pas¨® de no ser ni siquiera afiliado a convertirse en el presidente insular de los socialistas gomeros y, un a?o despu¨¦s, alcalde de su ciudad natal, San Sebasti¨¢n de La Gomera.

Entonces comenz¨® a crecer el rosal socialista en aquellas tierras dif¨ªciles de cultivar. Cumple perfectamente con el perfil de lo que se puede reconocer como un bar¨®n insular. Un bar¨®n que desde hace casi dos d¨¦cadas aporta un senador cada cuatro a?os. ?l mismo. En la ¨²ltima ocasi¨®n, logr¨® su puesto en la C¨¢mara alta con solo 7.157 votos, ganados uno a uno. Un bar¨®n que desde 1993 da al PSOE la presidencia del Cabildo de La Gomera. Un bar¨®n que logra un semillero de votos importante para el Parlamento de Canarias, en donde ha estado en dos legislaturas. Y, sobre todo, un bar¨®n que se gobierna solo y que ha conseguido para los socialistas gomeros un nivel de autonom¨ªa que le permite adaptar el socialismo al curbelismo. Hasta el viernes no se le conoc¨ªan esc¨¢ndalos ni pol¨¦micas. En el curbelismo, todos aquellos gomeros que mueren fuera de la isla tienen todos los servicios pagados para poder ser enterrados en su tierra. Incluso la corona de flores. Tambi¨¦n los ni?os tienen los libros de texto gratuitos a su disposici¨®n. No tiene horario y es capaz de atender y hablar con todos los ciudadanos que lo precisen. Con ¨¦l, el sonido del silbo gomero ha llegado a ser Patrimonio Inmaterial de la Humanidad y toda Alemania sabe que La Gomera es un vergel de senderos impecables por el que Angela Merkel pasea en su tiempo de vacaciones.

Omnipresente, con dos hijas y un hijo, igual juega a las cartas con los jubilados del bar de la esquina que se sienta a compartir mesa, mantel y mariscos con los pol¨ªticos m¨¢s importantes de este pa¨ªs. Socialista convencido, antes que socialista es gomero. Y gracias a ello logr¨®, en el c¨¦nit de su carrera pol¨ªtica, para s¨ª mismo y para el PSOE casi el 70% de los votos en las elecciones auton¨®micas del a?o 2007. No ha llegado a mandar en el PSC porque no le ha interesado. En el fondo, ¨¦l disfruta y trabaja por su peque?o cortijo, con peque?as excedencias a cargo del Senado donde no ha registrado en los tres ¨²ltimos a?os una sola iniciativa. ?l, quiz¨¢s, olvid¨® por unas horas lo que le cost¨® a sus padres sacar adelante a la familia y conseguir que Casimiro estudiara y pudiera prepararse para la vida tan distinta que le quedaba por delante. El socialismo en Canarias ha callado estos d¨ªas, sorprendido por la actitud de una persona "totalmente equilibrada". Se habla de "la reacci¨®n paternal m¨¢s que pol¨ªtica", pero reconocen que Curbelo est¨¢ muy afectado por la reacci¨®n estatal del PSOE. Y as¨ª, cabizbajo, se le vio en la procesi¨®n de la Virgen del Carmen celebrada este fin de semana en la capital gomera.