"?T¨² a un alcalde no le das ¨®rdenes!"
El incidente se produjo tras una trifulca el ¨²ltimo d¨ªa de la campa?a electoral
El alcalde de Mondariz, Julio Al¨¦n Montes, que el 22-M renov¨® su mayor¨ªa absoluta en la lista del PP, tendr¨¢ que comparecer el 25 de octubre en los juzgados de Ponteareas para responder de una denuncia por desacato y alteraci¨®n del orden p¨²blico que le puso la Guardia Civil. El ¨²ltimo d¨ªa de la campa?a electoral, 20 de mayo, a media tarde, se enfrent¨® a una pareja de agentes que lleg¨® a poner orden, alertada de una trifulca en la playa de O Val, en el r¨ªo Tea. Con el regidor comparecer¨¢n en el juzgado, su hijo, Julio Al¨¦n Mart¨ªnez, y su sobrino, Manuel Al¨¦n.
"Yo le doy el n¨²mero de placa, deme su DNI", se escucha al guardia civil decir, tranquilo y firme, en una grabaci¨®n con c¨¢mara de tel¨¦fono m¨®vil a la que ha accedido este peri¨®dico. Julio Al¨¦n encara al agente dando pasos atr¨¢s y adelante, como si no diera cr¨¦dito a lo que le dice, estirando el cuello para vocearle: "?T¨² a un alcalde no le das ¨®rdenes!".
"?T¨² a un alcalde no le das ¨®rdenes!", le espet¨® Julio Al¨¦n a un agente
Los agentes estaban escuchando la versi¨®n de tres j¨®venes que momentos antes hab¨ªan sido apaleados supuestamente por Al¨¦n y sus acompa?antes. Ellos se hab¨ªan instalado esa misma tarde con sus familias para pasarla en las mesas de piedra del ¨¢rea recreativa, junto a la playa. Espray en mano, los tres playeros embadurnaron un cartel electoral del PP pegado a un contenedor de basura con el texto "non os votes".
Alguien avis¨® a la comitiva electoral del PP. Seg¨²n testigos presenciales, primero lleg¨® el coche con la megafon¨ªa, que aparc¨® junto al ¨¢rea recreativa con el soniquete a toda pastilla. Los tres j¨®venes protestaron por el ruido y, seg¨²n estos testimonios, recibieron los primeros pu?etazos. En esas est¨¢n cuando desembarca el resto de la comitiva electoral en varios coches: el hijo del alcalde, algunos de sus amigos y otros familiares, con el propio Al¨¦n al mando. Los tres del espray son acusados de pintar el cartel y ah¨ª mismo empieza la malleira en ellos.
Siempre seg¨²n los mismos testigos, el griter¨ªo y las protestas de las familias asentadas en el ¨¢rea recreativa, que increpan al alcalde afe¨¢ndole la conducta, hacen desistir al regidor y sus acompa?antes, que se van dejando supuestamente un ojo a la virul¨¦ y otras secuelas a los agredidos. La Guardia Civil, que llega tras ser alertada por el vecindario campista, estaba recogiendo de las v¨ªctimas su versi¨®n de la trifulca cuando vuelve el regidor con su somat¨¦n. "?Identifiquen a estos!", ordena imperioso Julio Al¨¦n. El agente le dice con buen tono que a modi?o, que no est¨¢n ya para recibir ¨®rdenes de alcaldes airados porque los tiempos son otros y el protocolo marca otras prioridades.
"?Qu¨¦ pretendes decirme a m¨ª? ?Darme lecciones de Historia?", se crispa el regidor. Su hijo, Julio Al¨¦n Jr., tercia despectivo: "?El alcalde est¨¢ por encima tuya!", le dice al agente, que, haciendo o¨ªdos sordos, insiste en pedir al regidor su DNI: "?Yo voy a llamar al teniente ahora mismo!", amenaza Al¨¦n.
Por alterar el orden p¨²blico y desacato a la autoridad est¨¢n en el juzgado el alcalde, su hijo y Manuel Al¨¦n, su pariente en segundo grado. Las v¨ªctimas no han denunciado, a la espera de lo que suceda el 25 de octubre en la vista oral de Ponteareas, donde esperan comparecer como testigos. Disponen de un parte m¨¦dico con las lesiones que sufrieron. Tambi¨¦n, dependiendo de los resultados de ese juicio -de que se aprecie delito, falta o se archive-, los hechos podr¨ªan abrir una v¨ªa administrativa, ante la Subdelegaci¨®n del Gobierno, en funci¨®n de la condici¨®n de regidor de Julio Al¨¦n.
Al¨¦n es el segundo alcalde del PP que ha de comparecer en el juzgado por perder las formas como candidato, durante la campa?a electoral. El otro es Nelson Santos, de Porri?o. Seg¨²n la denuncia, amenaz¨®, fuera de s¨ª, a dos adversarios de la lista del BNG cuando pegaban fotocopias de una informaci¨®n publicada ese d¨ªa por este peri¨®dico: "Te pego una hostia que te arranco las gafas. Eres un miserable, muerto de hambre y te voy a arrancar la cabeza a ti y a tu jefe. Vete a trabajar, vago de mierda (...)".
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