Una explosi¨®n en un piso hiere a cuatro personas en el barrio de Tetu¨¢n

Una explosi¨®n en un piso en el distrito de Tetu¨¢n, sobre la una de la tarde de ayer, destroz¨® la residencia e hiri¨® a cuatro de las seis personas que estaban dentro. Seg¨²n inform¨® una portavoz de Emergencias Madrid "al parecer fue por un escape de gas", que pudo producirse al manipular de una caldera.

Los heridos, ninguno grave, son los inquilinos del piso, una pareja y una amiga de ellos, los tres de nacionalidad dominicana, adem¨¢s de una vecina del piso colindante, se?al¨® la misma portavoz. La hija de 15 a?os de la pareja, que tambi¨¦n estaba en el piso, no result¨® herida, pero tuvo una crisis de ansiedad y fue atendida por una psic¨®loga del Samur. Todos fueron traslado a centros sanitarios.

"Hab¨ªa sangre. Una mujer ten¨ªa un corte en una pierna", relata un vecino

Seg¨²n Javier Mu?oz, vecino del inmueble, hab¨ªa tambi¨¦n un ni?o "de unos cinco a?os" en el piso que no habr¨ªa sufrido lesiones pero que estaba en estado de choque.

Los afectados ten¨ªan quemaduras, cortes causados por la ca¨ªda de cristales y contusiones provocadas por el desprendimiento de escombros. Mu?oz, que vive en la primera planta del edificio, contaba que nada m¨¢s sentir la explosi¨®n subi¨® a ayudar. "El piso estaba destrozado. Una mujer ten¨ªa un corte serio en una pierna. Hab¨ªa bastante sangre", narraba. Encontr¨® a otra mujer inconsciente debajo de "un mont¨®n de cascotes que tuvieron que sacar entre cuatro", asegur¨®.

Siete unidades de bomberos, y un importante despliegue policial, tanto de municipales como nacionales, llegaron a la glorieta de Miguel Rubiales, n¨²mero 4.

El edificio estaba visiblemente afectado y los da?os materiales eran cuantiosos: todos los cristales que daban a la calle estaban rotos por la detonaci¨®n. Tambi¨¦n result¨® da?ada la estructura del inmueble, aunque seg¨²n un portavoz del Ayuntamiento "puede ser reparado". El t¨¦cnico de edificaci¨®n Antonio de Pablos consideraba ayer que probablemente no se sabr¨ªa la verdadera magnitud de los da?os "hasta lunes o martes". Hasta entonces, los residentes de los 13 pisos del edificio tendr¨¢n que alojarse en otro lugar.

Isabel Garc¨ªa miraba desolada los montones de escombros en la calle y se lamentaba de que solo ten¨ªa la ropa que llevaba puesta: "No he bajado nada". No obstante, estaba previsto que los vecinos subieran a sus casas uno por uno para recoger cosas indispensables, "como documentaci¨®n y medicinas".

Agentes del Samur Social organizaron el alojamiento en pisos y hoteles para las siete familias que anoche no ten¨ªan donde dormir.

Hacia las 15.30, los equipos de bomberos empezaron a salir y a dejar paso a los servicios de limpieza para que retiraran los escombros y muchos de los restos de muebles y pertenencias de los vecinos, que hab¨ªan salido despedidas de sus viviendas.