Suena el despertador ol¨ªmpico

James Magnussen les ha dado un palo a todos. Nadar los 100 libres en 47,07s es correr mucho. Bernard hizo 48,75s y Phelps 48,08s. Son dos tiempos soberbios. Phelps nad¨® casi un segundo m¨¢s r¨¢pido que en Pek¨ªn, donde us¨® el ba?ador de pl¨¢stico. Lo que no me cuadran son los tiempos de Lezak y de Weber-Gale. Me pregunto por qu¨¦ los t¨¦cnicos no han elegido a Ryan Lochte para nadar la final de relevos. ?Lo reservaron porque tiene un calendario apretado? No es la filosof¨ªa de este equipo postergar las pruebas colectivas para privilegiar las individuales.

En el relevo femenino, las cosas no han ido mejor para Estados Unidos. Natalie Coughlin hizo los primeros 100 en 54s, casi a un segundo por encima de lo que en situaciones normales deber¨ªa haber conseguido. Aun as¨ª, les dio a sus compa?eras casi un segundo de ventaja. ?Por qu¨¦ no lo aprovecharon? Acabaron segundas.

En los 400 libres Katie Hoff fue s¨¦ptima a seis segundos de Federica Pellegrini. En las semifinales de 100 mariposa Dana Vollmer hizo una carrera fant¨¢stica (56,47s). pero Christine Magnuson se hundi¨® y pas¨® de ser subcampeona ol¨ªmpica a no clasificarse para la final: termin¨® a dos segundos de la primera y a uno de la octava en las semifinales. En los 100 braza solo un americano, Mark Mangloff, se clasific¨® para las semifinales. ?Qu¨¦ ha pasado con Alexandrov? Yo he entrenado a Michael Alexandrov y s¨¦ que su nivel est¨¢ por encima de los 1m 01,41s que lo dejaron fuera. Para Estados Unidos, tener un solo bracista en las semifinales es inconcebible porque es un pa¨ªs con suficientes nadadores como para colocar tranquilamente a dos entre los 16 mejores del mundo.

En los 400 libres Peter Vanderkaay no ha podido coger medalla, aunque, en este caso, estamos ante una buena marca. Para Peter, 3m 44,83s es un tiempo de m¨¦rito. En los Juegos de Pek¨ªn nad¨® por debajo de ese tiempo (3m 43s), pero lo hizo con el ba?ador de poliuretano. Ahora tiene 27 a?os y es uno de esos veteranos ejemplares: hay pocos nadadores m¨¢s serios, m¨¢s responsables y mejores personas que ¨¦l.

Todos podemos tener un mal d¨ªa. Lo que no es normal es que tantos hayan tenido un mal d¨ªa en el equipo de Estados Unidos. A veces se dice que como no es un a?o de trials la selecci¨®n es dif¨ªcil. Son excusas. Con el talento que tienen nuestros nadadores y con la competici¨®n que hay todo el a?o en este pa¨ªs es imposible equivocarte. Adem¨¢s, los nadadores sab¨ªan que vendr¨ªan a estos Mundiales desde que fueron elegidos hace un a?o en los Juegos del Pac¨ªfico. Han tenido una cita al mes para competir al m¨¢ximo nivel en los Grand Prix: Indian¨¢polis en marzo, Michigan en abril, Carolina del Norte en mayo, Santa Clara en junio...

Esta mala jornada puede tener un efecto positivo si se convierte en una llamada despertador. Un wake up call ante los Juegos de 2012.

Sergio L¨®pez fue medallista espa?ol en los Juegos de Se¨²l y actualmente es entrenador del Colegio Bolles de Jacksonville y de la federaci¨®n estadounidense de nataci¨®n.