La otra acampada cierra por vacaciones

"Que quede claro: no es una retirada". ?ngel Alberto Montero es el presidente de la asociaci¨®n que aglutina a cerca de 15.000 cooperativistas del sureste de Madrid, que llevan cerca de una d¨¦cada a la espera de un piso. Y est¨¢ muy preocupado por que nadie interprete que abandonan la lucha. No quiere muestras de debilidad. Sentado en una silla de pl¨¢stico, rodeado de compa?eros de la acampada que han mantenido durante casi tres meses en la cuesta de Moyano y de los ¨²ltimos trastos del campamento, promete que volver¨¢n en septiembre con acciones incluso m¨¢s "contundentes". Su marcha, dice, no tiene m¨¢s motivo que el cansancio: "Simplemente, necesitamos descansar".

Un total de 85 d¨ªas y muchas m¨¢s noches, seg¨²n la l¨®gica de Sabina, han pasado a la intemperie por una presunta estafa que est¨¢ en los tribunales y que les ahoga por muchos frentes. Aportaron desde 40.000 hasta 70.000 euros por una vivienda, que en el peor de los casos llevan hasta catorce a?os esperando.

Hacienda les reclama el dinero desgravado con la cuenta vivienda

Ofigevi es el nombre que les hace temblar. David Torralbo y sus dos hijos administraban esta gestora de 11 sociedades cooperativas cuyo fin era levantar viviendas protegidas en el sureste de la regi¨®n. Comenz¨® a captar socios en 1997. Se apuntaron 6.100, que aportaron 190 millones de euros para desarrollar los futuros barrios de El Ca?averal, Los Berrocales o Los Ahijones, todos en el distrito de Vic¨¢lvaro. Junto con Los Cerros y Valdecarros, otros dos desarrollos colindantes, ten¨ªan previsto edificar hasta 120.000 casas.

"Futuros vecinos". As¨ª es como se denominan a s¨ª mismos, con bastante acierto, los cooperativistas, porque los desarrollos en los que invirtieron son, como mucho, futuro. Salvando El Ca?averal, el resto es hoy por hoy un p¨¢ramo. Ofigevi est¨¢ adem¨¢s en concurso de acreedores. Sobre David Torralbo y sus dos v¨¢stagos pesa una orden de ingreso en prisi¨®n por delito de estafa, dictada por el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 43 de Madrid.

Una "futura vecina" es Carolina. Con 32 a?os vive en casa de sus padres a pesar de que ya podr¨ªa llevar tiempo independizada. En su familia, la huella de Ofigevi son 129.000 euros. "Mis dos hermanos entraron tambi¨¦n en la cooperativa de Los Ahijones, cada uno aportamos unos 43.000 euros". Dos de ellos no se ir¨¢n de casa en mucho tiempo.

Les prometieron una casa en un plazo que era imposible de cumplir, argumentan desde Majavilan, el despacho que les representa. Pero adem¨¢s asumieron un riesgo sin la red que cre¨ªan tener. En la querella que presentaron en los tribunales figura tambi¨¦n como acusada de la presunta estafa la aseguradora, HCC Europe, que afirma que el contrato que suscribi¨® con ellos no avala, como exige la ley, las cantidades que aportaron los cooperativistas. "Sentimos que nos han apaleado", dice Juani, otra de las afectadas y secretaria de la asociaci¨®n. Su pareja, Jes¨²s, tambi¨¦n invirti¨®. "A veces discutimos, nos culpamos de haber ca¨ªdo los dos, pero ya qu¨¦ le vamos a hacer". Entre sus peticiones figura tambi¨¦n una amnist¨ªa a Hacienda, que les reclama el dinero que se dedujeron por lo que ingresaron en las cuentas vivienda.

Las pancartas con todas las reivindicaciones que han decorado el campamento est¨¢n ya a buen recaudo. El resto de trastos los han repartido entre el 15-M y los servicios de limpieza del Ayuntamiento. ?Decepcionados por no salir de la cuesta de Moyano con una soluci¨®n debajo del brazo? Un no rotundo por respuesta. "Ahora estamos m¨¢s unidos. La acampada ha sido terap¨¦utica, nos ha hecho m¨¢s fuertes", defienden. Despu¨¦s de las vacaciones volver¨¢n a la carga.