Scotland Yard recurre a la mano dura

Una de las cuestiones que m¨¢s sorprende al ver las im¨¢genes de los disturbios de estos d¨ªas es la suavidad con que la polic¨ªa brit¨¢nica est¨¢ tratando a los saqueadores. Es una pol¨ªtica que pudo empezar a cambiar ayer por la noche. El primer ministro, David Cameron, anunci¨® por la ma?ana que m¨¢s de 16.000 polic¨ªas se desplegar¨ªan anoche en las calles de Londres y que actuar¨ªan de forma "m¨¢s contundente".

?Qu¨¦ significa m¨¢s contundente? De entrada, Scotland Yard parec¨ªa dispuesta a generalizar o extender el uso de veh¨ªculos acorazados para dispersar a los revoltosos. Esos veh¨ªculos, llamados Jankel y utilizados de forma habitual en Irlanda del Norte, entraron en acci¨®n con ¨¦xito en la madrugada del martes en la zona de Lavender Hill, en Clapham Junction, donde la polic¨ªa logr¨® dispersar a 150 saqueadores que intentaban tomar los almacenes Debenhams.

El uso de gases lacrim¨®genos ni siquiera est¨¢ en discusi¨®n

Interior excluye un eventual despliegue del Ej¨¦rcito

Una diputada pide que se decrete un toque de queda para evitar los saqueos

La polic¨ªa anunci¨® que se reservaba tambi¨¦n la posibilidad de utilizar balas de goma para dispersar cualquier manifestaci¨®n. El uso de balas de goma est¨¢ muy restringido incluso en Irlanda del Norte y casi no tiene precedentes en Gran Breta?a, donde seg¨²n algunos no se han utilizado jam¨¢s y seg¨²n otros se utilizaron en 1985 durante los disturbios de Broadwater Farm, en Tottenham. Disparadas al aire para que caigan en par¨¢bola, las balas de goma son muy efectivas para obligar a los manifestantes a dispersarse y permitir a la polic¨ªa ganar tiempo y reagruparse o ganar terreno.

En Gran Breta?a no se utilizan porque pueden llegar a ser letales y dan la sensaci¨®n de situaci¨®n ca¨®tica. El mismo argumento, su peligro y mala imagen, justifica la renuncia a otras herramientas corrientes en esos casos en Europa continental, como los gases lacrim¨®genos o los ca?ones de agua.

El uso de gases ni siquiera est¨¢ en discusi¨®n. La utilizaci¨®n de ca?ones de agua s¨ª se ha discutido y es reclamada por los medios de la derecha y por much¨ªsimos comentarios en Internet. La ministra del Interior, Theresa May, descart¨® ayer su uso con palabras que sonaron altaneras: "La manera en que act¨²a la polic¨ªa en Gran Breta?a no es mediante el uso de ca?ones de agua. La manera en que act¨²a la polic¨ªa es a trav¨¦s del consentimiento de las comunidades".

Una frase que caus¨® cierto furor porque parec¨ªa sugerir que lo que ha de hacer la polic¨ªa es afear a los saqueadores su comportamiento y convencerles de que se vayan a casa. Algo improbable a la luz de la actitud agresiva que revelan las im¨¢genes m¨¢s impactantes difundidas estos d¨ªas. No solo de asaltos a comercios y de edificios y veh¨ªculos en llamas, sino tambi¨¦n im¨¢genes vejatorias de energ¨²menos obligando a desnudarse a un joven para robarle, o de c¨®mo golpean a otro y luego hacen ver que le van a ayudar cuando en realidad lo que quieren es robarle lo que lleva en la mochila.

Pero la frase de Theresa May ha ofendido sobre todo porque parece olvidar que los ca?ones de agua s¨ª se utilizan en Irlanda del Norte que, aunque estrictamente no es parte de Gran Breta?a, s¨ª lo es de Reino Unido. El Servicio de la Polic¨ªa de Irlanda del Norte dispone de seis ca?ones de agua, pero es dif¨ªcil que acceda a transportarlos a Londres precisamente estos d¨ªas, cuando a¨²n no ha acabado la temporada de marchas protestantes, siempre propensas a los disturbios entre los sectores m¨¢s fan¨¢ticos tanto de la poblaci¨®n protestante como de la cat¨®lica. En Internet han empezado a circular rumores y una persona aseguraba que su padre ha visto en la carretera ca?ones de agua transportados camino de Londres.

Scotland Yard se plante¨® ya el uso de ca?ones de agua en diciembre pasado, cuando sus fuerzas se vieron superadas por segunda vez por las manifestaciones estudiantiles en protesta por el aumento de las tasas universitarias y los recortes sociales. La responsable del Home Office ya descart¨® entonces el uso de esa herramienta, pero el responsable de la rama de orden p¨²blico de Scotland Yard, el comandante Bob Broadhurst, dej¨® abierta la puerta de cara al futuro.

"No hay planes en este momento para utilizar ca?ones de agua en las calles de la capital pero ser¨ªa una tonter¨ªa que no dedic¨¢ramos tiempo a estudiar esas t¨¢cticas para ver si pueden ser apropiadas en el futuro", dijo entonces en una nota. Y estos d¨ªas parecen tener un marcado aroma a futuro.

Otras dos alternativas debatidas en p¨²blico ayer eran el despliegue del Ej¨¦rcito y decretar un toque de queda. El uso del Ej¨¦rcito fue espec¨ªficamente descartado por la ministra May y desaconsejado por numerosos expertos, tanto por problemas pr¨¢cticos como de imagen. El toque de queda fue reclamado por Dianne Abbott, diputada laborista por Hackney North y Stoke Newington, en una entrevista en la BBC. "Sacar al Ej¨¦rcito a la calle o utilizar ca?ones de agua no har¨¢ m¨¢s que empeorar las cosas", coincidi¨® con la jefa del Home Office. "Estos no son disturbios pol¨ªticos, esto es pillaje. Lo que hay que hacer es implantar un toque de queda", a?adi¨®, aunque no supo precisar ni en qu¨¦ zonas ni a qu¨¦ horas ni a qu¨¦ gente deber¨ªa afectar ese toque de queda. ?Solo a los m¨¢s j¨®venes o a toda la poblaci¨®n?