Los palestinos recriminan a Siria el asalto a Latakia
El ataque a un campo de refugiados da?a la relaci¨®n de la OLP con El Asad
El r¨¦gimen sirio no deja de perder amigos. La campa?a de represi¨®n lanzada sobre Latakia, ya en su cuarto d¨ªa, amenaza ahora con arruinar la antigua relaci¨®n de la familia El Asad con importantes sectores de la sociedad palestina. Entre los barrios asaltados por las tropas presidenciales figura el campo de refugiados palestinos de Al Ramel, la mitad de cuya poblaci¨®n, unas 5.000 personas, se vieron obligadas a huir. El hecho de que la furia del Gobierno de Damasco haya alcanzado tambi¨¦n a los palestinos coloca en situaci¨®n inc¨®moda a Ham¨¢s, organizaci¨®n patrocinada por El Asad, y hace que la OLP engrose el bando de los enemigos de la dictadura siria.
Yaser Abed Rabbo, dirigente hist¨®rico del Frente Democr¨¢tico para la Liberaci¨®n de Palestina y miembro de la comisi¨®n ejecutiva de la OLP, acus¨® ayer al presidente Bachar el Asad de estar cometiendo en Latakia "un crimen contra la humanidad". "En este bombardeo se utilizan buques de guerra y tanques contra casas de hojalata y contra gente que no puede escapar ni esconderse", dijo.
Las tropas de Bachar el Asad entraron el lunes en Al Ramel, tras un par de jornadas de bombardeos intensos, y obligaron a la poblaci¨®n a evacuar el campo. Los soldados quer¨ªan "eliminar bandas armadas", seg¨²n la televisi¨®n oficial siria. Un portavoz de UNRWA, la agencia de la ONU encargada de la di¨¢spora palestina, declar¨® que la situaci¨®n humanitaria era "grav¨ªsima" y que exist¨ªan informes no confirmados sobre la muerte de al menos dos habitantes de Al Ramel.
El campo bajo ataque fue establecido a finales de los a?os 40 para acoger a la primera oleada de refugiados palestinos generada por la creaci¨®n de Israel. La mayor parte de los habitantes de Al Ramel nacieron en territorio sirio, al igual que sus padres, pero permanecen en un gueto a la espera de un improbable retorno a las casas que dejaron sus abuelos.
El r¨¦gimen de los El Asad se ha fabricado una imagen de solidaridad pan¨¢rabe y de antisionismo acogiendo a palestinos y patrocinando a una organizaci¨®n radical como Ham¨¢s. Los palestinos financiados por Damasco se han ocupado de hostigar a Israel, asumiendo una tarea de alto riesgo que el Ej¨¦rcito sirio prefiere evitar. Ahora, incluso Ham¨¢s toma distancias de sus jefes en Damasco. Latakia, que en abril sufri¨® un asalto militar y que se ha convertido en una de las capitales del movimiento contra la dictadura, no solo aloja un campo palestino: fue tambi¨¦n la provincia natal del jeque Izzedin al Qassam, m¨¢ximo s¨ªmbolo pol¨ªtico de Ham¨¢s. Un portavoz del grupo en Gaza admiti¨® ayer que el Gobierno sirio parec¨ªa estar cometiendo "algunos errores graves", aunque eso no deb¨ªa "empa?ar sus d¨¦cadas de trabajo por la causa palestina".
Activistas de la oposici¨®n denunciaron que en los cuatro d¨ªas de ataques hab¨ªan muerto al menos 34 personas. Tambi¨¦n aseguraron que las tropas estaban realizando una "limpieza ¨¦tnica" con la expulsi¨®n de Latakia, poblada por unas 600.000 personas, de miles de musulmanes sun¨ªes con el fin de reforzar la posici¨®n de la minor¨ªa alau¨ª, a la que pertenece El Asad y la c¨²pula del r¨¦gimen.
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